Los gobernantes mexicanos se creen dueños del petróleo y demás recursos naturales, del producto de los impuestos y de los mejores empleos en la nación.
Además, actúan como si fueran amos del pueblo, de las libertades individuales y, por supuesto, de sus vidas (estas últimas amenazadas, reprimidas o quitadas a discreción por Ejército y Policía). Éste es un país totalitario con máscara de república. Por eso los ciudadanos están desarmados y sólo pueden comprar armas del calibre que el Ejército permita.
Vivimos pues en un estado policíaco. No hay libertades individuales y al pueblo se le permite respirar sólo para que pague impuestos y produzca otras ganancias a la clase gobernante.
El gobierno y la policía no son auditables por el pueblo así que hacen lo que quieren con el tesoro nacional. En México somos víctimas, no ciudadanos.
Hasta la religión a seguir por las masas nos es hábilmente impuesta por el gobierno (la misma - judeo-cristiana, - pero revolcada y con diferentes sombreros).
A través de bien llevada planeación de dominación, el grupo étnico que maneja México ha crecido y no se ve para cuándo se vayan al país de sus ancestros, pues el botín aquí es fácil de tomar y los dirigentes de todos los partidos políticos son del mismo grupo.
Hay una Constitución, claro, pero en la práctica sirve únicamente de pantalla para que los países europeos (también gobernados por el mismo grupo étnico, pero ellos si espantados por los increíbles excesos cometidos aquí contra el pueblo) no estén moliendo con sus odiosos Derechos Humanos.
La Constitución (copia de la de los americanos) otorga el derecho de libre expresión a los ciudadanos, pero en la práctica ni en México ni en ningún otro país del mundo se permite.
Sí, leyó usted bien. Nadie permite la libertad de expresión en su totalidad. Algunos gobiernos tienen, como aqui en México y en Latinoamérica, la cavernícola costumbre de asesinar a los que les pican las costillas. Han muerto cuatro periodistas mexicanos asesinados en 1998 y la última gracia de nuestros gobernantes fue amenazar de muerte al director de un diario capitalino dizque por ``escribir pendejadas.''
En los países ya civilizados usan medios sutiles: la presión de Hacienda, la imposibilidad de difundir la palabra independiente debido a los monopolios informativos, y otras "tácticas invisibles."
Pero a ningún gobierno, primermundista o tercermundista, le gusta que le digan todas sus verdades.
Ahora bien. La libertad de expresión en si es el derecho del pueblo a decir todo, repito, todo lo que guste y no lo que las autoridades exijan. No debe haber temor por parte de un medio informativo o de un ciudadano a que el gobierno le corte la cabeza por externar opiniones.
Después de todo, "la libre expresión es la voz del corazón."
Y si se incurre en difamación u otros daños, pues que un juez decida posteriormente, pero no debe haber cortapisas previas a la opinión. Si a los gobernantes no les parece que los critiquen, pueden dejar la política e irse a la pobreza y anonimato de la vida privada (soñar no nos cuesta nada).
En México, lógicamente, no se puede decir todo, de ahí que las concesiones de radio y televisión sean otorgadas directamente por el gobierno a quienes tratan bien al reyecito ("el Estado es mío") en turno. No hay votaciones para otorgar las bien llamadas "concesiones" de comunicaciones.
Listillos ellos, los gobernantes mexicanos también controlan el papel para la impresión de periódicos, asegurándose con esto que no se les alebresten los directores de rotativos.
De esa manera el pueblo escucha lo que el gobierno (o cualquier otro tipo de poder absoluto, como Iglesia y Ejército) quiere, no la realidad.
En el mundillo de las comunicaciones - televisión, radio, revistas y Periódicos - hay algo peor que la censura: la "auto censura."
Pero la libertad de expresión es un espejo de lo que sucede en un país. Si las cosas andan mal, los medios lo reflejarán. Por tal razón Comunicaciones le da mano libre a medios como Televisa, que da a la nación una imagen distorsionada sobre la verdadera situación política, religiosa, militar y económica en México.
Pero la censura es como si una persona fea destruyera el espejo que refleja su horrible fisonomía. En otras palabras, la lógica indica que hay que curar la raíz de este problema, no el efecto. Desgraciadamente eso requiere inteligencia y voluntad de parte de los gobernantes, que no andan muy sobrados de ninguna.
Y para rematar el gobierno hace finalmente a un lado las apariencias y descaradamente quiere imponer una censura más extensa a los medios. Pretenden que se difunda la opinión oficial y que cesen las críticas a la administración. Qué se diga algo, si, pero muy leve y con justificaciones para el gobierno. Al estilo Zabludovsky-Televisa, pues.
Parece que algún perverso asesor (qué debe ser extranjero, los de aquí son más bien lelos; ¿será el gordo alemán-americano?) convenció a Zedillo que destruir la mente de las personas a través de la censura es mejor que asesinarlas.
¿Pero cómo lograrlo legalmente y sin qué respinguen los países que critican al gobierno mexicano por abuso de autoridad?
Muy fácil: mandaron a un "institucional," un ex secretario de Gobernación, a que criticara públicamente la Ley de Imprenta en una conferencia sobre derecho de información. El sujeto dijo ahí que "La libertad de expresión es anacrónica......y no tiene el derecho a desdibujar, mentir, alterar ni maquillar la realidad."
En efecto. Ese derecho lo tiene el gobierno, que actúa como si tuviera el monopolio de la verdad perfecta. En realidad lo único anacrónico que tenemos en México en relación a la libertad de expresión es el gobierno mismo. Eso es lo que deberíamos cambiar, no los reglamentación de la misma.
También dijo el recadero del gobierno que México se encuentra "en el último furgón del tren" en materia de Ley de Imprenta. Bien dicho. Ahí se encuentra, pero por que ahí la tiene el gobierno. Qué dejen de asesinar e intimidar a periodistas y los dejen "escribir pendejadas" y verán que la Prensa se pondrá rápidamente a primer nivel y dirá exactamente que clase de gobierno tenemos.
Como la Iglesia con su "verdad," el gobierno creé que la palabra les pertenece, alegando que los que hablan de la realidad nacional son "irresponsables, amorales, corruptos y faltos de profesionalismo."
Pues a mí me parece que se están describiendo los gobernantes a si mismos.
METAFÍSICA: Con el pretexto de la crisis del precio del petróleo el titular de Hacienda, Gurría, abusa de la ingenuidad del pueblo.
Primero hizo recortes al por mayor en el presupuesto y servicios, como si éstos se pagaran solamente con el dinero del petróleo y no con los impuestos de la ciudadanía. Y para remachar ahora quiere cobrar intereses sobre intereses y rebajar a la mitad el impuesto sobre las bebidas embriagantes para que ya borracho el pueblo no proteste el alza de impuestos que se avecina.
En cambio el secretario de la Defensa Nacional anda en España comprando armamento para reprimir mas al pueblo y para proteger el pastel gubernamental, propiedad de la familia política mexicana.
Qué bonito. Para el Ejército sobra el dinero mientras sabemos que mucha gente está muriendo de hambre en México . Qué chulada de país este. Pagan los ciudadanos para que se armen los gobernantes y los repriman. Al fin que "del mesmo cuero salen las correas" y los gobernantes se mantienen en el poder con el dinero del pueblo.
Y no hay quien pueda pedir cuentas al gobierno en nombre de la ciudadanía acerca de sus desmane. Cada sexenio presidencial produce cientos de políticos millonarios y millones más de pobres.
Sin embargo, lo establecido por la fuerza y el engaño no dura, y el ciudadano tiene a su disposición tres modos de expresar descontento contra un sistema gubernamental corrupto.
El primero es a través del voto; el segundo es a través de la lucha armada; y el tercero (y mejor) es el de la metafísica china.
Cada situación requiere de un método diferente, lo cual es evidente hasta en la Naturaleza: aún los animales, como caballos y vacas, se defienden de manera distinta contra vientos fuertes.
El método del voto, por ejemplo, no tiene la influencia necesaria para cambiar el país porque el sistema electoral y los partidos políticos están bajo sospecha de servir al poder establecido.
El método de la lucha armada, por otro lado, es para los que tengan los pantalones bien puestos. . . y de ésos no hay muchos por aquí. Además, la mayoría de hombres jóvenes tienen familias que no pueden ni deben ser arriesgadas en una aventura revolucionaria.
Así que el método mas práctico es el de la metafísica china pues "para sujetar al tigre se necesita que alguien nos ayude" y que mejor que sean los dioses quienes den una manita al pueblo.
Si no sabe cómo ejecutar un ritual chino, vea la columna #14. Dedíque la petición al ``dios de la política.'' Pídale lo que quiera para los gobernantes y para el país.
No necesita entonces agarrar un fusil para defender o cambiar al país: hágalo por medio de rituales. Son mas efectivos. El Cielo es imparcial y no corre usted ningún riesgo personal puesto que nada más usted sabe dónde y cuándo hace su ritual.
Déle caña a quién quiera y cómo quiera, qué los dioses oyen todas las peticiones. Se puede llevar entre las espuelas a presidentes, ministros, alcaldes, generales, etcétera, incluidas sus familias. Dicen que no todos los gobernantes son malos, que no hay que generalizar: mentira, si fueran buenas gentes no estuvieran ahi. Chíngueselos.
Este ritual, además, también sirve para defenderse de otros países hostiles y abusones y de sus instituciones o personal abusivo. Prenda su billete y arrímeles mecha, qué también por ahí les duele.
PRINCIPIO DE SALUD: Según el informe anual de la Coca Cola México está en el segundo lugar de consumidores del mentado refresco, despuecito de Estados Unidos.
Algunos mexicanos, según el informe, se recetan 800 botellas al año del adictivo líquido, lo cual indica que en realidad tomamos mas sodas que los americanos.
¿Lo pavoroso del informe? Qué menciona únicamente la Coca. Mucha gente no toma agua ni leche, sólo refrescos.
Si usted es de los que están haciendo ricos a los refresqueros pero no quiere morir antes de tiempo y de fea manera, apréndase de memoria esto: ni se le ocurra tomar sodas, y menos las que contienen cafeína, o "cola." Mejor tome agua y éntrele a los jugos de frutas.
Para empezar, lo frío de las bebidas afecta el delicado balance de la temperatura corporal. Con el tiempo este desequilibrio causa muchas enfermedades, de las cuales las mas benignas son calambres en las piernas, mareos, ansiedad y sudores fríos en todo el cuerpo. Luego, la botella regular contiene colorantes, sabores artificiales, cafeína, y mas de diez cucharadas de azúcar. Esto produce alta presión, diabetes, acidez estomacal y obesidad. Las sodas "light" son todavía más venenosas.
Por curiosidad quisiera saber cómo se imaginan los consumidores de sodas que el cuerpo desecha ese veneno, cuando hasta comer un dulce o pedazo de pastel causa enorme daño al aparato digestivo. Hoy dia hasta el menos informado sabe que sal y azúcar en exceso son venenos.
Por último, la pregunta obligada: ¿por qué Salubridad no informa al público mexicano acerca de lo peligroso de los refrescos? ¿O es qué en Salubridad piensan que su obligación es proteger a los embotelladores en detrimento de los consumidores, los cuales están siendo prácticamente asesinados a pausas....qué "refrescan?"
Una despistada doctora de Salubridad dice que no es cierto que los refrescos son nocivos para la salud. Pues deberían ponerla en dieta de sodas para que sienta en carne propia el daño que causan. Le recomiendo a la señora que ponga un diente en un vaso de Coca o Pepsi y cuente en cuántas horas el azúcar deshace la pieza dental. Del daño a órganos del aparato digestivo mejor ni hablemos.
NUESTRO FÚTBOL: A pesar del trabajo intenso de los aduladores oficiales, ya empieza a verse el verdadero nivel de "la selección de todos": primero no pudo con los clubes suramericanos y ahora ni con equipos de segundo nivel en Europa.
Pero Lapuente dice que "todo va bien." ¿Qué entenderá este técnico por malos resultados? Pero el problema de la selección mexicana es muy simple. Lo saben los directivos, lo sabe Televisa y lo sabe el público: no funciona porque los jugadores no son los adecuados, mucho menos el técnico.
Veamos. Mejía Barón aguantó bien la primera ronda del mundial del `94 pero porque la selección fue la que formó el argentino Menotti. Un técnico nuevo juega por muchos meses con los jugadores que dejó el técnico anterior, por eso Mejía Barón parecía capaz de dirigir la selección mexicana. Cuando Mejía pudo ya imponer sus jugadores se vio su verdadera capacidad como técnico y se desplomó el equipo. Nomás acuérdese cuando mandó a los defensas a tirar penales y dejó a Hugol en la banca. Y eso que dicen que Mejía tenía a Tuca Ferreti en las gradas asesorándolo.
Lapuente corrió con mala suerte. Para empezar, se encontró una selección mal armada por Bora, aunque de éste no se sabe a ciencia cierta fue por naco o para darles una manita a otros en la clasificación de zonas. O a lo peor Bora no quiso que otro técnico llegara a saludar con sombrero ajeno y a propósito dejó sin base al equipo nacional. El caso es que Lapuente no tuvo la suerte de Mejía Barón y llegó a la selección sin tela de dónde cortar para cuando menos inicialmente hacernos creer que puede dirigir una selección.
Lapuente se la ha llevado "probando jugadores." Tanto que clamaban los muñecos parlantes de Televisa por un técnico mexicano "qué conozca el medio" y Lapuente demuestra precisamente no conocer a los jugadores mexicanos.
La única gracia de Lapuente, - como lo fue de Roca, Cárdenas, Mejía Barón y Bora, - es la de cambiarles la posición a los jugadores mexicanos. Si de por si éstos no dan una en su posición natural, cambiándolos de la misma es suicidio seguro.
Un técnico extranjero - exceptuando a Bora - no habría permitido que Televisa y la federación le manosearan su programa de trabajo, por eso piden en Televisa técnicos mexicanos para la selección. Menotti renunció cuando Televisa le quiso imponer condiciones.
Carlos Miloc en su momento dijo también, "Déjenme escoger jugadores y programa de trabajo, y hago campeón del mundo a México." Naturalmente que no le dieron la selección. ¿Acaso creía Miloc que Televisa quiere un campeonato del mundo? Ellos quieren imponer jugadores y ganancias de la publicidad. En vez de nombrar a un técnico capaz y que conozca el medio, pero exigente, digamos como Lavolpe, Televisa prefiere títeres que a todo digan si.
El lema de los técnicos y federativos mexicanos - al igual que el de nuestros gobernantes - es que el pueblo mexicano es villamelón, por eso a los aficionados nos dan gato por liebre cada cuatro años (con el PRI es cada seis).
Y ahí va por el mundo la selección, exhibiéndose con "jugadores" mediocres en estadios vacíos. A ver hasta cuando nos cansamos de tolerarlos, porque ellos solitos nunca van a aprender la lección.
MÁS DE RITUALES CHINOS: Con rituales chinos una persona puede ayudar o dañar una oficina, corporación o lo que sea. También puede hacerse rico si los dioses le dan el dinero que pida a través de los rituales.
Los santos católicos no dan dinero, por eso México está siempre pobre por más que le recen a infinidad de santos y vírgenes. Por eso en China la Iglesia no hace adeptos. Allá hay santos que dan dinero mientras que los católicos no tienen esa virtud.
Y es que en China los santos son personalidades que tuvieron probada calidad humana. Los de por acá no sabemos quiénes fueron pues la mayoría son santos extranjeros. Ni siquiera sabemos si es cierto lo que de ellos nos cuentan los obispos.
Así que a darle a los rituales chinos y ya verá como se le compone su situación económica.
* Master, Estrategia Militar China
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