Reflejos en un Espejo Chino

* Francisco J. Vargas

Columna #329: Las Dos Caras De La Guerra

La estrategia militar china advierte que La guerra tiene dos caras. La cara cruel y repugnante es la de guerrear matando y destruyendo gente y edificios, es llamada el rostro de los Ejércitos. La otra cara es sonrisa divertida producida por sutiles estrategas que utilizan metafísica china en la destrucción total del enemigo -sea individuo, corporación, ejercito o país- sin derramar visiblemente sangre ni destruir la plaza.

Una cara mata, la otra cura. Lo lógico entonces es que algunos se pregunten: ¿Cuánto tiempo se requiere para convertir a un hombre ordinario en un estratega extraordinario? Puesto que en las universidades no enseñan este conocimiento, la respuesta solamente el maestro de metafísica y estrategia la sabe. Lo seguro es que de cada mil aspirantes a estrategas militares, generalmente en uno convergen los innumerables factores físicos, mentales y metafísicos necesarios. Los demás pierden su tiempo y el del maestro. Evidentemente pues, los estrategas ordinarios y los extraordinarios caminan por diferente rutas.

Lo mismo en tiempos de paz que de conflicto armado, en México únicamente vemos la cara horrible de la guerra. Padecemos gente en el poder cuyas acciones brutales solamente reflejan la sucia mente de generales y gobernantes. Como es afuera es adentro, dice la alquimia china, y la actual guerra civil que empieza a enseñar las orejas en México nos muestra el rostro más repulsivo y espantoso de los ladinos. Hemos dejado que el procónsul Felipín Manos$ucias Calderón, y el Popi$, se apoderen de e interpreten la Constitución y la Biblia a su antojo. Las consecuencias están a la vista.

Dicen en China que desde tiempos inmemoriales los hombres del poder y los religiosos han entendido que el camino más corto para mantenerse en la cúpula del poder indefinidamente, es intimidar a la población con violencia y amenazas de boleto solamente de ida al Infierno. (Es de notar que los vaticanos, por ejemplo, nunca excomulgan en México a funcionarios ladrones y genocidas, y menos aún a sus propios curas pederastas y avariciosos, lo cual exhibe una religión cristiana y católica falsa, materialista y muy convenenciera.)

Sepa usted que en cuestion de reyes y funcionarios, su presencia en la historia es constante, pues cuando cae uno se levantan dos dispuestos a remplazarlo y manejar fortunas. Es común entonces ver que en México gobernantes y obi$pos se asocian para robar -ellos le llaman "expropiar"- tierras como quieren hacer en Atenco desde hace siete años. Dicen los obi$pos que es "por el bien común," o sea el de curas y gachupines. Planean construir allí centros comerciales y un aeropuerto internacional, aunque para ello los changos verdes tengan que asesinar "a cuantos campesinos sean necesarios," según dijo el banquero de la franquicia vaticana mexicana, el altanero panzón ensotanado Obé$imo Cepeda, obi$po de Ecatepec. No les importa que robos y represiones de ese tipo causen peligroso descontento social que durará décadas. Las leyes, dicen los muy cínicos, son como las mujeres (dizque hechas para violarse).

El terrorismo religioso y de Estado que sufrimos actualmente, además, evita cuestionamientos embarazosos de la población a gobernantes tiranos y vaticanos millonarios. (A ver, Manos$ucias Calderón, ¿dónde quedaron los 250 millones de dólares decomisados el otro día a narcos en una sola operación policial?) En general, la actual polarización pueblo-ejército provocada por vaticanos y gobernantes encubre convenientemente sus deficiencias administrativas y miserias religiosas.

(Tiene la PGR en cárcel federal de alta seguridad a un carpintero no-ladino, a quien en un ilegal cateo vecinal le encontraron un mosquetón obsoleto e inoperable, mientras que a un aduanero gringo que pescaron en la frontera norte contrabandeando a México armas de fiego de alto poder escondidas en una camioneta, lo dejaron ir como si nada. ¿Por qué no está en cárcel de alta seguridad como cualquier ciudadano mexicano, siendo que llevaba "armas de uso exclusivo del ejército," bla, bla? ¿Qué clase de justicia es ésa? Ah, se me olvidaba: México, en su papel de patio trasero de los USA, tiene el Gobierno que los vecinos quieran. Por eso no será nunca posible despenalizar el uso de las drogas, pues no conviene al dueño de la casa. Y en cualquier propiedad se hace lo que el dueño quiera, aunque aquí el inquilino sea Espanha y el sub-inquilino México.)

En este México manejado subliminalmente desde Gringolandia pero ocupado físicamente por espanholes y criollos mochos y conversos, la buena vida está reservada para gobernantes, políticos, obi$pos, legisladores, generaletes y ministros de la Corte. La mexicanada que se vaya a la porra, como de costumbre. Pero la estrategia militar china advierte: Mientras más rápido y lejos se aleje uno del camino correcto, peor nos irá. Deducimos entonces que la guerra civil que azuzan gobernantes, empresarios y vaticanos les va a incendiar el culo, pues los conflictos civiles donde hermanos matan hermanos suelen salirse de control en un santiamén. Especialmente cuando son instigados por espanholes tarugos.

No hay que perder de vista que las masas son monstruo imposible de engañar todo el tiempo, y se vuelven incontrolables cuando despiertan a la realidad. Ciertamente, conquistadores ladinos y curas han roto récord atarantando al pueblo mexicano, pero después de cinco siglos de engaño, es ya imposible ignorar las largas y cochinas uñas de los muy explotadores. Aunque aparentemente el conflicto civil en México solamente beneficiará a ladinos en el poder, hay que esperar al epílogo. Por lo pronto, empezamos a ver la ridícula militarización sin ningún respeto a la cacareada cuan falsa "soberanía de los estados." Dice Manos$ucias Calderón que "en México manda el Estado," pero no es cierto. Es inconcebible que lleguen soldados a cualquier "estado soberano" y sorpresivamente y con su prepotencia habitual desarmen a policías municipales y estatales. ¡Y los gobernadores (y los pericos en y de Radio Fórmula) alabando la arbitrariedad! Asustados por el asustado Calderón, soslayan su obligación hacia la ley.

La soberanía de los estados es pues tan falsa como la "democracia" mexicana que exige a sus ciudadanos credencial de elector obligatoria (y nadie dice nada). Eso solamente es posible en países ocupados, no en repúblicas como dicen que somos (ja, ja). Porque encima, los militares les dictan a policías municipales y estatales qué tipo de armamento (usualmente palos y piedras) pueden usar en su trabajo contra la delincuencia bien armada. ¡Hágame el pinche favor! Dicen los generaletes tener miedo de que armas de policías terminen en manos de malhechores. Pero y entonces, ¿cómo es que dejaron libre al aduanero que mencioné? Puras mentiras, pues. ¿Y los legisladores? Ah, ellos cobran sus millones de dólares en sobornos en Los Pinos, si no qué chiste tendría ser político. En lugar de que el Congreso contuviera al Ejecutivo, en este país donde todo es al revés Manos$ucias Calderón compra a los obsequiosos legisladores y supremos de la Corte. Viva México, ¿eh?

Para enmascarar su penosa sumisión a los apestosos generaletes verdes, alega el agachón gobernador judío de Michoacán, Lazarito Cárdenas (el mini-tatita indigno del nombre del abuelo, que tampoco era como para impresionar a nadie mas aparte de los priístas), que está bien que los soldados tomen su estado por asalto. Que habría que formar un cuerpo estatal de seguridad (a estas alturas se le ocurre al baboso tal cosa) que reemplace a los changos verdes. Pues yo digo que esos valientes tendrían que llevarse sus propios palos de escoba para enfrentar a la delincuencia, porque los militares no dejan que nadie utilice armas de fuego "peligrosas" para ellos ja, ja.

El Gobierno, pues, hace las cosas mal, y mal terminará, aunque los funcionarios crean que ellos serán la excepción en la historia pues se creen demasiado listos. El preludio del desastre son las cada vez más frecuentes deserciones masivas de policías. Y de soldados. Es tan alto el número de soldados desertores y tan bajo el número de altas en el ejército, que ahora los militaretes han olvidado (a güevo) su anticuado machismo y permitirán que las mujeres estudien diversas carreras militares (hasta ahora solamente podían ser enfermeras). Tales carreras, obvio, eran exclusivas para los machos criollos. Nada más que los generaletes exigen que las mujeres deberán mantenerse solteras y sin hijos, o sea que deberán mantener las piernas cerradas. Si es para morir a manos de malcontentos, pos entonces sí que vengan las pinches viejas, ¿eh geneletes? Pero es que hasta hace poco ser obi$po, oficial militar, o policía federal o estatal, era en México ocupación reservada para inútiles jóvenes gachupines que ni saben ni necesitan hacer más que reprimir indios, lo cual ha sido tradicionalmente fácilen estas tierras.

Ahora que vivimos una guerra interna fomentada por un gobierno extranjero (¿le digo cuál?) obsesionado en apoderarse del petróleo mexicano, y que se requiere agarrarse a tiros con malcontentos furiosos y bien armados, ya no les gustó más el queso a los ratones gachupines. Lo bueno es que a los no-ladinos las deserciones masivas de cuicos y soldados nos favorecen. Se confirma el buen funcionamiento de los rituales chinos, ya que los vacíos dejados por los desertores criollos tendrán que ser llenados por indígenas y mestizos, mismos que empezarán a tomar posiciones de autoridad nunca antes abiertas a nativos. Tarde o temprano el desbalance racial en cuadros de autoridad dará a la gente del pueblo el aprendizaje necesario en cuestión de manejo de armas y tácticas de combate que algún día se volverán contra los conquistadores.

Los ladinos pueden reírse todo lo que quieran de los rituales chinos, pero sus efectos les causarán más lágrimas de las que imaginan ahorita. Títulos universitarios, ciencias políticas y altos rangos militares no necesariamente capacitan a nadie para entender los principios más profundos de la guerra.

El vergonzante Circo militar presentándose en todo México -y tan bien publicitado por Televi$a-, ya no garantiza a criollos y espanholes seguridad, pues su peor enemigo son ellos mismos. Los brutales changos verdes corretean sudorosos a civiles armados mientras pretenden combatir el narcotráfico. Buscan armamento clandestino en manos de ciudadanos descontentos que pudieran derrocar al gobierno del corrupto marrano converso, Manos$ucias Calderón. Por eso en los retenes militares y en los brutales cateos ilegales que los "heroicos" soldaditos siempre llevan a cabo en altas horas de la madrugada y con lujo de prepotencia, producen armamento de alto poder pero poca droga y dinero (botín de los generaletes). Han llegado al extremo de expedir partes de guerra ja, ja, dizque para explicarnos por qué cientos de changuitos verdes despanzurran civiles y los queman vivos con armamento militar supuestamente para ser usado en el campo de batalla contra ejércitos, y no contra civiles aunque sean malhechores.

La guerra civil la está polarizando el ejército con su brutalidad. Y nadie hace hincapié en la barbaridad genocida perpetrada contra ciudadanos, armados o no. Lo que estamos viendo es conducta militar como en Irak, país oficialmente ocupado por los gringos. Porque mire usted. Para justificar la violencia militar contra la población, gobernantes y generaletes verdes crean constantemente nuevos "cuerpos militares de élite," dizque para combatir el crimen. Pero con la gente de siempre, con los mismos militares, con el mismo armamento. El color de los uniformes y el nombre cambian, pero los resultados no. Los "cambios" presumidos son hechos precisamente para que todo siga igual. Es decir, atole con el dedo para la indiada explotada.

La militarización siempre ha existido por abajo del agua. Si ahora es más visible, es únicamente porque Manos$ucias Calderón anda asustado por un posible derrocamiento. Al mismo tiempo y aprovechando el viaje, tiende espesa cortina de humo militar y religiosa para que no veamos que obi$pos y gobernantes andan también tras un jugoso negocio llamado Las Tierras de Atenco. Para ello, Calderón utiliza la excomunión a la indiada rebelde, y reformas a las leyes para considerar terroristas (dignos de cadena perpetua) a disidentes sociales. Es parte del viejo plan para apoderarse de las tierras de los campesinos en Atenco. Plan fraguado por el Vaticano y el PAN para construir ahí el nuevo aeropuerto Texcoco.

Atenco es auténtica mina de oro para los judíos que intentan hacer el negocio de sus vidas con la comercialización y revalorización de tierras aledañas en Texcoco. Para lograrlo, les valen madre a curas y funcionarios vida y libertad de los dueños actuales de esas tierras. Es tan suculento el negocito, que el mismo Popi$ Benedicto 16 -a través del barrigón cardenal encubridor de curas pederastas, Norberto Rivera, y del obi$po Obé$imo Cepeda- está altamente involucrado en la sangrienta represión oficial a pobladores de Atenco (dime dónde hay mucho dinero en terrenos valiosos y te diré dónde está metida la Igle$ia).

Y lo más repugnante del Vaticano es que para lograr despojar rápidamente a los atenqueños, instigó tras bambalinas las injustas y desproporcionadas condenas (67 años de prisión) que los marranos jueces criollos y el ladino gobernador del estado de México, Enrique Genocida Peña Nieto, endilgaron a los líderes de la resistencia civil en Atenco. ¿El crimen? Pos dizque haber "retenido" unas horas a unos funcionares estatales que habían ido a hostigar ilegalmente a los lugareños. Para eso sirven obi$pos y gobernantes gachupines, para arruinar con su avaricia la vida de gente no-ladina y pacífica. Y piensan que nadie ve el sadismo gachupín judío contra nativos mexicanos.

Sadismo que persiste desde inicios de la Conquista, y que únicamente desaparecerá a base de fuertes rituales chinos (pronto les diré cómo le vamos a hacer). Porque en criminal y escandalosa tergiversación de la justicia, al procurador del estado de México, Abel Villicaña (haga su lista de ombres para incluirlos en los rituales chinos), se le hizo corta la sentencia de 67 años (prácticamente cadena perpetua) a cada uno de dos líderes atenqueños sentenciados. Dijo el muy cabrón que esa sentencia fue "excesivamente bondadosa," e insistirá (vaya saña) en que sea aplicada la pena máxima de 120 años de prisión por "terroristas." Y los obi$pos risa y risa.

¡Hijos de su puta madre!

Pero en esta batea de mierda que es la justicia mexicana al servicio exclusivo de ladinos e Igle$ia, al menos no se le ha cumplido el gusto al maricón obi$po Obé$imo Cepeda, de ver "500 o más" atenqueños muertos por soldaditos. El promotor de locales comerciales de gratis para la Igle$ia (su mochada en México por atarantar indios mexicanos) se asoció esta vez con su alma gemela, el gobernador del estado de México, Enrique Genocida Peña Nieto, quien para demostrar que los gobernantes están para chupar sangre del pueblo y no para servirlo, altaneramente advirtió en los medios que no concedería el indulto a ningún líder de Atenco condenado. Pinches indios, ¿eh, gobernador?

La militarización entonces sirve también a la política del Gobierno y Vaticano para intimidar a los pobladores de Atenco. Así se evitan Calderón y Peña Nieto otra protesta masiva de "macheteros" y otra "caída" de la nueva expropiación que Manos$ucias planea endilgarles. Dejamos mansamente que obi$pos y funcionarios hagan con nosotros lo que quieran, y el resultado es la presente suspensión de garantías. Eso exhibe la falsedad del cacareado "estado de Derecho" en México, y la hipócrita "protección a la vida" de fetos que los curas insisten (falsamente) es "la voluntad de Dios." No hay nada en la Biblia que sustente la intromisión de la Igle$ia en la práctica sexual de los mexicanos, y nadie ha dicho que Jesucristo anduviera cuidándoles las verijas a la gente. Es entonces criminal que el Estado laico no nos proteja de los cochinos obi$pos maricones y de sus odios hacia las mujeres.

Pero entender los caminos visibles e invisibles del arte de la guerra no es tan fácil como los ladinos piensan. Tan no lo es, que utilizar militares y excomuniones contra mexicanos que dominen los rituales chinos los arrastrará al fondo del barranco. Probado está en la historia que entrar dormidos al campo de batalla es suicidio seguro: El que vea mejor y primero, someterá al enemigo. En Los Pinos han reaccionado mal frente al descontento civil, con el sobado plan maestro ladino de siempre: El Gobierno lanza al ejército contra la población para evitar movimientos "subversivos." Los soldaditos peinan estado por estado -están aposentados ya en un tercio de los treinta y un estados, van por más- en busca de armas, pues una revuelta a nivel nacional pudiera voltearles su lujosa lanchita a panistas y vaticanos.

Los retenes militares, los cateos y persecuciones arbitrarias de vehículos, sospechosa y sistemáticamente producen decomisos de armas, pero no de drogas. Suena a cliché, pero los militares tienen carta blanca para matar gente a discreción y por eso se han incrementado los casos de barbaridad militar. Hace días vimos acciones militares contra civiles tan espantosas, que si no fuera porque los demás países occidentales están gobernados también por judíos, México ya hubiera sido repudiado internacionalmente. Cientos de soldados atacaron con vehículos blindados y armamento de alto poder destructivo hecho para campos de batalla -bazookas, lanza-granadas, helicópteros, ametralladoras, rifles de asalto y artefactos incendiarios-, ¡una casa ocupada por cinco civiles únicamente!, uno de ellos mujer. Que dizque eran "narcotraficantes," dicen los militares. Y alégueles.

La casa ardió por tanto proyectil lanzado por los "heroicos" soldaditos, y los supuestos "narcotraficantes" (nunca se demostró que lo fueran, ni Botijón Soberanes, de la Comisión de Derechos Humanos -él cobra en Los Pinos, por sipuesto- se dio por aludido ante tal abuso militar), quedaron totalmente calcinados en el interior. Todo se les permite a los histéricamente asustados militares. Y tan campantes con su gracia de destrozar a un grupo de civiles, pues los muertos no hablan ni para defenderse. Narcos o no, a eso se le llama Genocidio. Vaya pues a aplaudir a los asesinos militares el próximo 16 de Septiembre en su acostumbrado desfile para mostrar las armas que destrozan al pueblo mexicano. Digo, si para entonces los changuitos verdes no lo han carbonizado todavía a usted y a su familia -por ser "narcos," claro- con lanza-llamas comprados con nuestro dinero.

Y si algún gobernador ladino con un poco de vergüenza y conocimiento de la ley se opone a la militarización en su estado, funcionarios y generaletes verdes conocen el método perfecto para someterlo en tres patadas. Por ejemplo. Cuando el gobernador de Veracruz dijo a principios de año que su estado no necesitaba de changos militares para mantener el orden estatal, el televiso Joaquín Muñeco López Dóriga, lacayo a sueldo de los militaretes, chillaba como marranito en su programa radial que el gobernador "alentaba" el narcotráfico al rehusar someterse al yugo militar. Cuando ni eso fue suficiente para doblegar al gobernador, entonces un grupo de militares disfrazados de civil asesinaron en plena calle y a la luz del día a cuatro guardaespaldas de los hijitos de Enrique Genocida Peña Nieto.

Y claro, las autoridades culparon (¿a quién más?) a "los narcotraficantes." Apoco no.

Pero, ¿qué hacían los hijos de Peña Nieto en Veracruz, si según el Muñeco López Dóriga es un estado inseguro sin la protección militar ? Ah, pues los niñitos andaban dizque de vacaciones (ja, ja). Plan con maña, pues. Inmediatamente después del resultado trágico de la provocación, López Dóriga vociferaba que todo eso sucedió -como si en los demás estados con presencia militar no mataran a nadie- porque el gobernador de Veracruz no aceptaba que el ejército ocupara el estado. El consiguiente escándalo, y las presiones públicas del "informador chiquito," consiguieron su propósito: Veracruz ya se militarizó oficialmente. Ahora está bajo el operativo militar denominado "Veracruz Seguro," ja, ja. ¿No que no tronabas, pistolita,? habrán festejado el Muñeco, Manos$ucias Calderón, y los sádicos generaletes verdes.

Pero Veracruz sigue tan inseguro hoy como antes de la llegada de los changuitos verdes al estado. Aunque a nadie oarece importarle que el militarizar México es oficializar la tortura militar, algo igual de temerario a darle tijeras a un simio, como dicen los estrategas chinos. Porque para intimidar a la población y a los gobernadores, los soldaditos perpetran monstruosos abusos y asesinatos contra narcos e inocentes, pero igual hacen contra policías municipales y estatales, a quienes constantemente están desarmando. Hay que someter a los "estados soberanos" a cualquier precio.

Es triste ver que militares desarmen a policías y que sus gobernadores estén metidos bajo la cama cagados de miedo. Gobernadores como Lázaro Cárdenas, de Michoacán, abiertamente se declaran partidarios de la represión militar y alaban la intervención federal y la detención de sus comandantes de policía a manos d militares, disculpando los abusos de la soldadesca pues los Cárdenas de Michoacán son judíos. La verdad es que no puede ser que militares arresten a oficiales de policía en cualquier estado solamente por sus güevos. No puede ser que los gobernadores permitan eso, pues están soplándole al fuego de la rebelión civil contra militares y gobernantes.

Pero a los ladinos en el poder, sin distinción de partidos políticos, solamente les interesa su seguridad para seguir robando. Y chínguese el pueblo. Los abusos militares de rutina no se han hecho esperar en los estados sitiados por la tropa: Detenciones y cateos ilegales, torturas, y desde luego manoseos y violaciones sexuales (siempre impunes, of course) a mexicanas no-ladinas menores de edad. Hasta pederastas nos resultaron ahora los militares.

Todo para que, aparte de armas confiscadas en los retenes, los resultados sean una miserable cantidad de droga decomisada. Nos hubiera salido más barato comprarles esa droga a los narcos para quitarla del mercado, y nos habríamos ahorrado la matanza de civiles y los abusos sexuales militares contra niñas, amén del maltrato a quienes tienen que pasar por los infernales filtros militares.

Es decir, los aparatosos operativos militares "contra el narcotráfico," sospechosamente producen solamente armamento. ¿No hay tráfico de drogas en las carreteras nacionales? Sí lo hay, hombre. Pero los narcos están apalabrados con funcionarios y militares para operar libremente, de manera que no hay decomisos de drogas cuantiosos pues los capos saben dónde y cuándo habrá filtros militares temporales. Los sardos están ahí para maltratar a la indiada solamente, en beneficio del gobierno judío de ocupación. Los retenes, los cateos inquisitoriales, y demás abusos militares son únicamente parte de la intimidación necesaria para someter a la población. Quien se atreva a criticarlos es acusado inmediatamente por muñecos de ventrílocuo como López Dóriga, de ser "aliado al narco," o mojigato. Los aliados al narco, ya vemos, son los gobernantes y generaletes verdes. En un país verdaderamente civilizado, su conducta pondría tras rejas a soldados criminales, pero en México se les protege amorosamente y sus superiores los esconden de las autoridades civiles hasta que el furor de sus atropellos se desvanece.

Es falso el estribillo gubernamental y político de que "solamente los sardos pueden contra malhechores por su capacitación militar," que nadie más puede rescatarnos del hampa (o sea de las mismas autoridades federales). Alegan que no hay policías entrenados para ello. El legislador maricón y cómplice de pederastas judíos y compinche de Manos$ucias Calderón, Emilio Gamboa Patrón, dice taimadamente (crimen merecedor de paredón) que "la guerra contra el crimen organizado se está perdiendo" en los estados ocupados por las fuerzas armadas, pero que si los soldados son rebasados por la delincuencia, ¿entonces a quién recurriríamos?

Vil mentira ladina. Y le diré por qué.

Eso de que solamente el ejército puede defendernos de malhechores es un mito que funcionarios federales, legisladores, obi$pos y generaletes verdes ladinos han propalado perversamente en los corruptos medio$ de desinformación sin que nadie se atreva a cuestionarlo. El mismo ejército propicia la violencia asesinando gente con soldados disfrazados de civil o de policía federal para que el pueblo pida que la soldadesca "resguarde el orden." Truco burdo, pero efectivo debido a la maligna manipulación de obi$pos y medio$.

Ciertamente hay cárteles y secuestradores, pero no es para tanto y menos para echar soldados a patrullar las calles. Déme mil, o cien mil hombres sin idea de lo que es la ley y el orden, y en seis meses se los dejo mejor preparados para enfrentar a criminales, de lo que están hoy los soldaditos mexicanos. Ah, y mucho menos corruptos. Pero eso no conviene a los espanholes que explotan México, por eso el mito del "todopoderoso ejército" seguirá viento en popa.

Seguirán los asesinatos achacados falsamente al narcotráfico; seguirán impunes los abusos militares de todo tipo -incluidos los sexuales- contra la población; seguirán los pederastas y traidores a la patria legisladores ensalzando a los changuitos verdes; seguirán los mañosos ministros de la Corte Suprema cobrando sus obscenamente fabulosos sueldos en Los Pinos y siguiendo la línea jurídica presidencial; seguirán los maricones y avariciosos obi$pos y los medio$ de desinformación encubriendo a los soldados y pidiendo que se mantengan en las calles; seguirán Televi$a y sus miserables pericos del micrófono metidos en la cama con los generaletes verdes. Lo que es peor, seguirá la gente aguantando todo sin respingar.

Los "machos" en este país solamente sirven para pegarles a sus esposas e hijos, pues eso sí lo condonan Gobierno e Igle$ia. Viva México, ¿eh?

TRÁGICA (DES)INTELIGENCIA GUBERNAMENTAL: El Gobierno de México es ineficiente porque para ser funcionario importa ser judío, no el talento ni la capacidad profesional. Esa fórmula heredada de la infernal Espanha es campo de cultivo ideal para la corrupción y el nepotismo. Y así nomás no hay país que sobreviva tiempos difíciles.

Ése es el principal problema en México, y también en toda América Ladina,

Debido a la eficiente destrucción de la educación pública que los perversos conversos en el poder han endilgado a los mexicanos, el resultado no es solamente el tercermundismo, sino el peligro fatal al que se exponen los mismos funcionarios designados por dedazo. En este país donde cualquiera se hace pasar por "experto" en cualquier profesión, o tema físico y metafísico, las consecuencias siempre son negativas. No en balde constantemente asesinan a elementos del ejército trabajando en, supuestamente, "inteligencia militar."

Ahora acaban de asesinar en forma estúpida ¡a un estúpido "jefe de inteligencia" de la PGR! Alguien lo volvió prematuramente redundante. "Estratega líder" de la Procuraduría, le llamaban. Y el líder de los inteligentes resultó ser un tarugo. Bendito sea dios.

A ver. Sabemos que el término "inteligencia" se lo copiamos, como todo en México, a los gringos. Pero los funcionarios mexicanos no entienden lo obvio: "Inteligencia" es un eufemismo gringo para enmascarar el rudo término "espionaje." Sucede que espionaje e "inteligencia" (civil, religiosa, militar o industrial) no son exactamente lo mismo, como no lo son "táctica" y "estrategia."

Espías en el sentido militar chino, hay pocos. Los requerimientos para ser espía son muchos y muy estrictos -arte profundo y secreto usualmente heredado de padre a hijo-, mientras que académicos "expertos" en inteligencia, ególatras e incapaces, abundan. Sobre todo porque en este país nadie parece entender el significado de los nombres. El espía sabe que los errores en su oficio suelen ser fatales, mientras que el "experto" en inteligencia se creé (erróneamente) más listo que los demás, por eso es usualmente descuidado en sus acciones. Es difícil que maten a un verdadero espía. Pero es fácil matar a un "jefe de inteligencia" de la Procuraduría General de la República, según veremos enseguida.

Hace días un funcionario federal ladino llamado Nemesio Lugo Félix, que fungía como (agarre aire) "Coordinador general de Información contra la Delincuencia del Centro Nacional de Planeación, Análisis e Información para el Combate a la Delincuencia de la Procuraduría General de la República," (uufffff), fue asesinado en la vil calle. Contrario al kilométrico título de la víctima, el asesino fue más práctico: En segundos lo mandó al otro mundo.

Con tan larga descripción laboral, uno se imaginaría que el sujeto era un genio, un especialista fuera de serie en investigaciones. Pero no. En México el talento es superfluo. El señor Lugo Félix tenía un bagaje académico más bien pobre para lo que hacía: Fue maestro de primaria cuya principal virtud para trabajar, primero en el Centro de Investigación y Seguridad Nacional (CISEN), y después en la PGR, fue ser...sobrino de la extinta actriz judía, María Félix. Evidentemente Lugo Félix no tenía ni la mitad de inteligencia de la tía. Y así le fue.

Fue una fría mañana de la segunda semana de mayo (día 14 para ser más exactos) en la capital, Delegación Coyoacán. El fulano Nemesio, como todo prepotente policía mexicano, iba loco de contento a su trabajo en las oficinas de la PGR. Ni siquiera pensaba en represalias de alguna de sus víctimas, digo de los delincuentes detenidos y torturados por él, mucho menos de las que había matado impunemente. Después de todo, en México, los machos vengadores existen pero en las películas, pues aunque muchas (por no decir todas) víctimas de los sádicos policías ladinos juran desquitarse por los maltratos recibidos en las mazmorras federales, realmente nunca hacen nada. Los mexicanos estamos entrenados por los malignos charros negros para ser agachones ante la autoridad. Por esa razón el jefe de los inteligentes, Nemesio, circulaba manejando alegremente una camioneta sin blindaje, y sin guaruras. Qué bien, ¿eh?

El principal estratega contra los delincuentes ignoraba que nunca hay que utilizar la misma ruta para ir al trabajo, tampoco llegar a la misma hora a la oficina, y menos aún meterse a lo güey a un callejón, pues es una trampa mortal en caso de emboscada. Como sucedió. Fue de lo más fácil balear a Lugo Félix en el callejón. Simplemente "le cerraron" un automóvil que lo obligó instintivamente a frenar y tratar de evitar el choque. Momento crucial, pues por el lado del conductor llegó caminando el asesino, disparándole a través de la ventanilla del vehículo (tres tiros en la cara y al menos otros dos en el cuerpo). Y hasta las otras pizcas, Nemesio.

¿Aprenderán los ladinos la lección y pondrán profesionales en puestos importantes de gobierno? No. Si lo hicieran dejarían de ser gachupines corruptos, Espanha dejaría de ser Espanha...y México sería un país decente en lugar del 0-T que es ahorita bajo la bota ladina.

¡ATENCIÓN, MIS PEQUEÑOS SALTAMONTES! EL HUEVO METAFÍSICO DE LA LIBERACIÓN DE MÉXICO ESTÁ A PUNTO DE EMPOLLAR.

BAJO MI DIRECCIÓN Y CON LA QUEMA CONJUNTA DE PETICIONES DEL METEORITO ROJO VOLVEREMOS AL ANSIADO "ANAHUAC" (EL DESPERTAR PARA LOS MEXICANOS, LA SALIDA DEL "NUEVO SOL" EN SUSTITUCIÓN DEL QUE SE APAGÓ CON LA DESTRUCCIÓN DEL MUNDO PREHISPÁNICO A PATAS DE LOS GENOCIDAS ESPANHOLES), SABIAMENTE PROFETIZADO POR CUAUHTÉMOC, ÚLTIMO EMPERADOR AZTECA Y SUS SACERDOTES. EL REGRESO DE LOS MEXICANOS AL PODER REAL Y AL CONOCIMIENTO ANTIGUO DESTRUIDO POR LOS GACHUPINES, ESTÁ POR REVENTAR Y SE EXTENDERÁ RÁPIDAMENTE POR TODO MÉXICO...Y POR EL MUNDO.

DE SEGURO.