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En el lenguaje esotérico chino, decir que la serpiente (o la cigarra) cambia de piel quiere decir desembarazarse de algo ya inútil. Es un cambio forzado, si, pero positivo.
Un cambio así, pero de piel política, necesitamos aquí.
Por ejemplo. Los mínimos beneficios que deberíamos recibir a cambio de nuestros impuestos y votos son los siguientes:
1. Que los puestos gubernamentales sean otorgados a base de exámenes. Los candidatos que obtengan las mejores calificaciones llenarían las vacantes por talento propio y no por tener padrinos influyentes.
2. Que los religiosos no interfieran en la vida política ni alteren la paz civil. No es negocio de ellos el aborto y mucho menos el uso del condón.
3. Que el gobierno subsidie las religiones para terminar con el negocito de las limosnas y los diezmos. Esto acabaría con la mala costumbre de los clérigos de meter su cuchara en cuestiones políticas en este país.
4. Que el gobierno procure pensiones, hospitales y asilos para ancianos y enfermos, dotándolos con servicios adecuados.
5. Que los jóvenes tengan educación adecuada a los tiempos, no al partido político en el poder.
6. Que las viudas, huérfanos y niños de la calle tengan garantizados por el Estado su sustento y educación. Así el Estado apreciará mejor el nefasto plan de los curas que viven exigiendo más hijos a los padres aunque no puedan mantenerlos.
7. Que se procure suficiente trabajo y seguro de desempleo efectivo y decente para los trabajadores.
8. Que la seguridad policíaca sea efectiva y de buena calidad.
9. Que se proteja debidamente a mexicanos viviendo o viajando en el extranjero.
Esos nueve puntos eran parte de lo que los ciudadanos chinos exigían de sus gobiernos hace tres mil años. Ya va siendo tiempo que se haga eso aquí, aunque sea con tres milenios de retraso.
METAFÍSICA: Cuando los gobernantes nos dicen que no, es que es cierto, así que finalmente autorizaron los juegos de azar en México. Desde luego que la Iglesia dio su ``bendición,'' pues los curas tienen un olfato envidiable para el dinero. Y ni modo que lo nieguen, ya que se han publicado fotografías mostrando a obispos y dueños de casinos felices después que algún desplumadero en el norte de México fue inaugurado y luego bendecido por los ``representantes de Dios.''
Pero yo voy a otra cosa, a contarle por que curas y tahúres se necesitan unos a otros.
Sabido es que un casino está diseñado para despojar a los incautos. Exactamente como hacen en Las Vegas, por dar un ejemplo. Para que el negocio sea redituable se necesita inversión económica y corazón duro para corromper autoridades que permitan el gangsterismo, la prostitución, el escamoteo de impuestos, y el consumo de drogas que van aparejadas al juego.
Menos sabido por los jugadores es que para vaciarles sus bolsillos y lograr que éstos vuelvan repetidamente y mansitos a dejar más dinero los casinos necesitan colocar hechizos, pero de los buenos. A base de rituales especiales se tapan además escandalitos en los casinos, tales como muertes por infartos o bala, suicidios, secuestros a jugadores morosos en sus deudas a los casinos, y cosillas así.
La presente asociación de obispos con tahúres mexicanos deja entonces en claro que estos últimos buscan la ``protección'' de la Iglesia y sus rituales. Los tahúres lógicamente creen que eso es suficiente.
Pero muy pronto vendran a invertir en casinos empresarios extranjeros asociados a la Mafia y traerán consigo otro tipo de brujería más efectiva para hacer a un lado a los tahúres nacionales, ¡y les van a pasar por encima a éstos!
Los pleitos entre tahúres y brujos nacionales y extranjeros es asunto de ellos y que se arreglen como mejor puedan. No vamos a imitar a los de pro-vida metiéndonos donde no nos importa. Eso si, no les auguro un buen final a los casinos nacionales.
Lo que sí nos interesa a las futuras víctimas de los casinos es que podríamos también prepararnos metafísicamente pero para evitar ser esquilmados en los casinos. El ritual básico está descrito en la columna #14. La variación para su empleo en el juego es que antes de entrar a un casino, hipódromo o palenque, se quema el billete con la petición dirigida al ``dios del juego.''
Y si también nos aseguramos de traer en la bolsa el amuleto apropiado para neutralizar cualquier embrujo del casino, nuestras probabilidades de ganar mejorarán. Así, el desplumadero de mexicanos que tan sabrosamente planean gobernantes, tahúres y curas mexicanos se les esfumará de la noche a la mañana.
#2. Es escándalo público lo convenenciero de los cuates de pro-vida. Esta organización clama día y noche contra el aborto, algo que únicamente concierne a cada mujer y su conciencia. No hay justificación legal para que los mojigatos ataquen a mujeres por lo que hagan en su propio cuerpo. Sin embargo ese machismo enfermizo es inexplicablemente tolerado por el resto de la sociedad.
El abusivo apedreo verbal por parte de pro-vida (con celoso desprecio similar al de los maricones contra las féminas) ocurre ante la pasividad de Gobernación porque la fuerza política del Papa es enorme. Y donde hay miedo no da coraje ni hay soberanía.
A saber en qué acabará este circo.
COSMOLOGÍA: Lo tradición taoísta dice que al principio la Tierra tardó muchos siglos en enfriarse después que la energía Chi del cielo y la tierra se estabilizaron. Los volcanes se calmaron y los temblores de tierra amainaron. La espesa neblina que cubría todo se fue disipando gradualmente y el calor solar se dejó sentir tibiamente.
Con el campo magnético de la Tierra estable, el ciclo rítmico y ordenado de las Cuatro Estaciones quedó establecido, la vegetación y lodías bosques florecieron y los ríos empezaron a fluir hacia el mar arrastrando consigo el agua de los deshielos y de las lluvias torrenciales.
En este nuevo, diáfano y hospitalario clima, la vida floreció en todas sus formas. En la nueva claridad el ancestro del hombre fue capaz de ver a simple vista la configuración del terreno, aunque su mundo no era todavía tan brillante como lo es ahora. Dejó el refugio de sus cuevas y aprendió a batirse con bestias salvajes a la luz del dia. También pudo migrar, pues la noche y el día quedaron por fin constituidos y pudo guiarse por el sol, la Luna y las estrellas.
La división de día y noche permitió medir el tiempo en forma rústica pero aceptable. Para cuando se extendieron por el mundo, el color de la piel de los semi-hombres cambió de acuerdo a su hábitat, y en ese periodo de claridad primaria los dioses y demonios ocasionalmente se hacían visibles a ellos en forma que no es posible ya en nuestros tiempos.
Así aprendieron acerca de la naturaleza y forma de divinidades y demonios, y acerca de la existencia de un ser Omnipotente. Se dieron cuenta que su propia naturaleza los hacía diferente a las demás creaturas y empezaron a enterrar sus muertos para prevenir que quedaran expuestos a los elementos y a las bestias y aves de carroña.
Pero migrar por valles y montañas mal vestidos y sufriendo cambios climáticos y de vegetación afectaban su salud y se enfermaban seguido, además de que consumían vegetales venenosos y carne cruda. Afortunadamente su dieta se diversificó después que empezaron a cocinar, lo que les permitió viajar cada vez más lejos.
Este tipo de creatura inventó herramientas para hacer su vida más comfortable y también inventó trampas y armas filosas, pues sus manos eran (y son) mucho menos poderosas que las garras de las bestias. Como su piel carecía de escamas o concha, y del grosor y abundancia de pelo similar a las bestias, aprendió a cubrirse del frío y la lluvia con pieles de los animales que cazaba.
Mucho tiempo después, el tipo de hombre actual empezó a medir el tiempo y espacio, desarrollando el calendario y con el un método para plantar y cosechar diferentes tipos de granos de acuerdo a cada estación. Aprendió a predecir el clima y a reconocer los movimientos de estrellas y planetas. Inventó la rueda, y calculó pesos y medidas con elementales sistemas de matemáticas y geometría. Aprendió a escribir la historia de incidentes importantes haciendo nudos en cuerdas cortas. Luego empezó a cimentar las bases sociales de lo que un día sería llamada civilización.
PARA MORIRSE DE RISA: Ahora resulta que Marcos se nos volvió limosnero. Buscándole y rebuscándole, encontró al fin como hacerse rico a costillas de los nativos.
Soldado de hamaca, poetiso tropical, guerrero Tenorio y dudoso ``defensor de indios,'' Marcos hace saber al público que abrió una cuenta bancaria para que la naquiza le mandemos dolarillos o pesos, que de todo agarra.
Supuestamente el subcomandante utilizará el dinero para defender ``los derechos de los pueblos indígenas.'' Quien sabe que querrá decir con eso, pero lo único que hace diferente a Marcos de un político priísta son las ronchas que le dejan los piquetes de zancudos chiapanecos y el escaso contacto con el agua y jabón.
Dicen que andando con lobos se aprende a aullar y por andar con curas Marcos ya aprendió a mendigar. Ya hasta le perdió el gusto al fragor de la batalla. Nada raro, pues los balazos duelen. Y el aromático tabaco de pipa y el bouquet del perfume de las periodistas extranjeras que gustosas van al catre con el a ver que información le sacan, son más suaves al olfato que el picante olor a pólvora y muertos que suele cubrir el campo de batalla.
Con buen sentido del humor, perfeccionado después de años contando chistes a la indiada en el cerro, nos avisa Marcos que ya se le está acabando ``el fondo de guerra.'' No será por haber guerreado, digo yo. Además, si tal cosa fuera cierto ya le hubieran caído encima los guachos pues un ejército sin dinero está derrotado.
Así que a ver si le creen los turistas, porque yo no pienso contribuir al fondo personal de retiro del ``guerrillero.''
ESCUELITA PARA ADULTOS: Preguntarle a un ciego que nos indique el camino es tan inútil como pedirle consejos al ignorante.
El otro día el director de un periodicotote capitalino que habitualmente editorializa en un programa radiofónico nacional (el del autollamado dizque ``periodista entre los mejores'', López Dóriga) dejó en claro que hay que regresar a la escuela a quienes pretenden crear opinión sin saber.
Fíjese usted. Dice el citado director que está mal que los defensores de los derechos humanos defiendan a los sospechosos de secuestro que habitualmente son torturados, quemados y hasta destazados vivos por honorables miembros de la sociedad que trabajan de cuicos.
¿La excusa para expresar tal barbaridad, misma que los más creíamos extinguida con la caída del nazismo? Según el, ``porque la criminalidad está incontrolable.'' Se medio justifica diciendo que no pide que vuelvan las torturas de la Santa Inquisición, sino que dejen trabajar a los cuicos en paz con sus golpizas ilegales a los detenidos llamadas eufemísticamente ``convencimiento.''
Se nota que el periodista es ladino y ajeno a los acontecimientos diarios en calabozos nacionales. Ahí las torturas de los inquisidores de antaño a los neoindígenas han sido aumentadas y perfeccionadas con el uso de la electricidad y las tortura sicológica.
Peor aún, teniendo el trabajo de informar el director está mal informado, lo cual es ridículo, pues hubiera bastado una plática con alguno de sus propios reporteros de la fuente policíaca para enterarse del nivel de bestialidad imperante en los interrogatorios policíacos en México.
Cuenta el director campechanamente que en una ocasión un sospechoso de secuestro fue detenido y torturado (obviamente no era policía) para saber el lugar donde ocultaban a su víctima. Cuando el representante local de los derechos humanos fue a reclamar al gobernador del estado la forma en que torturaban al sospechoso, el gobernador lo retó a que denunciara por radio y televisión el caso y que la opinión pública decidiera. El estaba dispuesto ``a renunciar'' si la gente se ponía del lado del sospechoso.
Y el narrador de la gracia del gobernador encontró gracioso y aceptable el caso. Desgraciadamente por esa actitud cómplice de los ``informadores'' es que los gobernantes encuentran fácil violar las leyes y abusar de las libertades individuales, pues saben que los periodiqueros callarán los abusos.
De acuerdo a la logica del mentado gobernador, habría que dejar de lado el Código Penal y que la muchedumbre decida la suerte de los sospechosos. Que la chusma ajusticie por votación a quien le plazca. Precisamente por ese contubernio de los Medios con autoridades, no hay investigadores policíacos dignos del nombre en México.
Las leyes están para cumplirse trátese de delincuentes o de cuicos. Eso de tirarse a lo fácil y torturar sospechosos para ahorrarse el trabajo de investigar, sobre todo porque están impreparados los policías, es lo que ha hecho común en este país la cultura de la tortura y los asesinatos clandestinos a manos de autoridades de todo tipo. Este método de investigación no requiere personal capacitado, ni evidencias, ni testigos, ni confesiones voluntarias. Solamente requiere de golpes para ``resolver'' los casos. Pero la verdad es que los intereses del pueblo en general deben estar por encima del interés de unos cuantos. El que secuestren a una persona no quiere decir que hay que volver a la Edad de Piedra para salvarla inmediatamente. Precisamente por torturar para rescatar unas pocas víctimas es que el método torturil alcanzó ya proporciones monstruosas y nadie está ya a salvo de esta epidemia. Cuando se les hace fácil a las autoridades violar las leyes y cuando los informadores se ponen del lado de ellos y no del público, el desorden está garantizado.
Por eso es incontrolable la delincuencia policíaca. Los abusos policíacos y militares empezaron como una gota y ahora son torrente. Se tortura y asesina porque se toman las interrogaciones como un asunto personal y no como un trabajo hecho por servidores públicos responsables ante la justicia por sus actos.
Precisamente por eso los jefes de policia no pueden depurar los cuerpos policiacos y cambian y cambian de gente que resulta igual que los que se fueron. Y es que al igual que el director del periódico citado, no se dan cuenta que el problema es el incumplimiento de las leyes existentes. Si éstas se hicieran cumplir, hasta los policías criminales se reformarían igual de fácil a como se hicieron delincuentes.
COSAS ODIOSAS: Porfirio Muñoz Ledo y algunos legisladores y presidentes se equivocan al parchar o querer hacer una nueva Constitución. Muestran un ego enorme pero poca inteligencia política.
Los Constitución actual no se hizo por tontos ni ha pasado de moda, pues sus Artículos son cimientos para un buen gobierno. Únicamente hay que aplicarla y a todos nos irá mejor, pues es el marco fundamental que contiene los principios necesarios para regir un país libre.
¿Para qué perder tiempo haciendo otra Constitución que no se necesita? Al contrario, hay que continuar la idea original haciendo que todos los gobernantes la obedezcan pues desbarran quienes por ignorancia dicen que es obsoleta. Hay que actualizar su aplicación, no sus principios.
CUCHILLITO DE PALO: Estamos asistiendo ``en vivo'' a la fabricación artificial de un nuevo santo, Juan Diego, con la finalidad de que produzca fuertes entradas de dinero a las arcas de la Iglesia mexicana. Y Labastida será el alcahuete que legalizará con su silencio el show.
Por lo pronto unos ``investigadores'' del clero alegan que descubrieron evidencia (dizque en el mero Archivo General de la Nación) de que Juan Diego fue un príncipe que estuvo casado, naturalmente, ¡con una princesa!
No me extrañaría que pronto ``descubran'' que tal princesa era europea de rubia cabellera, lechosa piel, y azules ojos. A los vaticanos los vuelve locos ese tipo racial de mujer.
También descubrieron los sabuesos del clero que simultáneamente el príncipe descalzo era gato en la iglesia y barría y hacía el quehacer ``con prontitud y de buena gana,'' como les gusta a los curas que actúen sus sirvientes. Evidentemente terminaba sus ocho horas de sirviente y se iba raudo a hacerla de príncipe y a administrar sus extensas tierras.
Si, el nuevo Juan Diego es indio de sangre azul, emparentado con el rey Netzahualcóyotl. Que hasta se codeaba con nobles españoles, nos dicen. Quién sabe cuándo sería eso, pues la leyenda cuenta que habitualmente andaba solo en el cerro donde vio ``la aparición.'' (Por cierto, si tantos sirvientes tenía el ahora príncipe, ¿cómo es qué no quería platicar con la Virgen pues alegaba que tenía a su mamá enferma y no la podía dejar sola?)
Lástima que Maximiliano haya llegado mucho después a México, de otra manera el clero ya hubiera emparentado al indio con la casa real de los Habsburgo. O de menos con ``Mamá Carlota,'' la locota, la grandota con narices de pelota.
Y para hacerlo más ``a la mexicana,'' dicen los obispos que Juan Diego no era casto como se rumoraba. No señor. El, como todo macho mexicano, tenía un harem de princesas indias. ¡Qué maravilla de indio! Pero qué digo, éste es un Súperindio con capa voladora. De seguro Enrique Krauze pedirá que le hagan una película, pues hace palidecer al resto de la indiada nacional.
Aún así, yo me sentiría mejor si lo emparentan, pero ya, con don Juan Carlos, actual rey de España, pues la evidencia es clara: increíblemente comparten los dos el sagrado nombre de Juan.
Y habrá quienes se crean esta galáctica biografía de Juan Diego que está tramando la sucursal del Vaticano en México. Pero falta ver si el Papa deja a los obispos mexicanos salirse con la suya, pues el polaco ya se anda autopromoviendo como ``hacedor de milagros,'' pero en vida.
Su Santidad si que nos resultó más chingón.
Pero imagínese este Dúo Dinámico en las parroquias: Súperindio y SúperPapa, ascendidos a santos.
No dejarían indio con un peso en la bolsa.
* Master, Estrategia Militar China
E-mail: visionpf@direct.ca
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