 Col #72
|
 Home |
Columnas |
 Col #74 |
Tenía que suceder.
El Enemigo Público #1, el criminal más buscado por la Procuraduría capitalina no es narco, ni secuestrador mochadedos, ni siquiera un banquero evasor de impuestos. No, el criminal más peligroso es un sujeto ladino y exdirector de Radiopatrullas del Estado de México.
Un policía, para acabar pronto. El ladrón en casa.
Y en la Procuraduría, con gran sentido del humor, suplican al público que les avisen si se encuentran en la calle con el fugitivo. Será para que los fiscales vayan a tomarse la copa con el.
Dicen en China que ``Cuando la persona se mira al espejo observa su propia imagen, y cuando miramos la pinta de sus habitantes sabemos inmediatamente si un país tiene buen gobierno.'' El mundo entero sabe que México no tiene buen gobierno.
Y aunque algunos secretarios de Estado, agentes y jefes de policía, fiscales, procuradores y generalotes todavía no entran a la lista de los criminales más buscados, es secreto a voces que éste es un país en manos de autoridades sospechosas.
Algunos de esos rumores son esparcidos por gobiernos extranjeros, e involucran con el narco a algunos exsecretarios de la Defensa, de ésos que pagan desplegados en los periodicototes capitalinos para decirnos que ellos son ``muy morales, celosos de su deber y honorables.''
Pero la queja mayor proviene del mismo pueblo. Canciones, chistes y dichos empiezan a dar forma y nombres a lo que la gente común piensa de sus gobernantes. Según la estrategia china, esto usualmente señala el fin de un sistema de gobierno.
El crimen, en todas sus modalidades, infiltró ya los poderes Judicial, Legislativo y Ejecutivo desde hace decadas. Incluyendo por supuesto a los ``leales'' del Ejército, y ni modo que lo nieguen pues es dominio público que hay oficiales involucrados con narcos. Pregúntenle al generalote Rebollo.
Apenas el otro día, en Ciudad Juárez, militares de baja graduación cambiaron marihuana por hojas secas y seis kilos de cocaína por harina antes de ser incinerada la droga en acto público de las autoridades para apantallarnos. ¿Ya ve por qué es un mito la llamada ``inteligencia militar''? No pensaron los cacos uniformados que al quemar la droga falsa el olor del humo no sería el mismo.
Lo escandaloso del cambalache, por supuesto, no es que militares hicieran la transa. No. Lo escandaloso es que de tantas toneladas de marihuana y cocaína decomisadas por el Ejército y por ``los feos'' de la PGR, incineraron ¡seis pinches kilos! Así ya entiende uno por qué los feos les prohibieron a las autoridades estatales y municipales decomisar un sólo gramo de droga.
En el caso del robo de los seis kilos de coca, una investigación dejó claro que en el robo están involucrados militares que trabajan de agentes de la judicial federal.
Para excusar su ineptitud, dijeron las autoridades militares que ``no se puede involucrar al Ejército en el robo. Esto es una organización integrada por miles de personas y es imposible evitar que algunos de ellos estén propensos a apartarse de la ley.''
Pero eso ya lo sabíamos los mexicanos y por eso nos parece mal que involucren a las Fuerzas Armadas en la lucha contra el narco. Son los generalotes quienes insisten en hacernos creer que los guachos son unas caperucitas rojas.
Pero el crimen se da en todas las esferas oficiales. Para no quedarse atrás, un senador (¡un senador de la República, coño, un senador!) anda enredado con un cargamento de mariguana que fue decomisado mientras era transportado en camiones de su propiedad. Se dice que el senador está conectado, sorpresa, con un exjefe de Policía.
Ya sabemos, y lo sabrán nuestros biznietos por medio de los cobros que sufrirán, que los legisladores se amafiaron con los banqueros y ministros de gobierno ladinos para robarnos miles de millones de dólares con lo del Fobaproa.
Hacienda recorta el gasto público cuando baja el precio del crudo pero no dice nada del destino de miles de millones de dólares extras cuando el precio se cuadruplica.
(Aunque claro, esa suerte providencial del gabinete zedillista se puede ver de dos maneras. Fabulosa por las inusuales cantidades de millones de dólares que les caen a las manos a los ministros ladinos, pero desastrosa porque por primera vez los mexicanos tienen a mano rituales chinos para agarrarles la pata a los pillines, mismos que podrían quedar peor que cuando llegaron.)
Por otro cachete, es una pérdida de tiempo mencionarlo pero los militares disfrazados de cuicos, culpables de la ejecución de seis jóvenes en el caso Buenos Aíres hace dos años, andan libres. El fiscal ya dejó escapar a casi todos los asesinos. Y es que primero mandan a sus mastines empistolados a matar ciudadanos y después tienen que dejarlos escapar. Mañosamente los fiscales acusaron a los policías no de homicidio, sino de ``abuso de autoridad'' y así pudieron salir bajo fianza.
Y del Villar, mientras por un lado deja libres a policías, por el otro hostiga con averiguaciones previas a jueces que no se doblegan a sus exigencias. La Iglesia en manos de Lutero, dirían escandalizadas las abuelas. (Menos mal que las viejecillas tercermundistas no supieron que Lutero era tan mujeriego y borrachín como cualquier otro obispo. O más, porque Lutero fue el que dijo, sabia frase, ``La vida sin vino y sin mujeres no vale la pena vivirla.'')
El hábil señor de Hacienda fue denunciado por un diputado de tener solamente cuatro años de servicio en Nacional Financiera y conseguir que sus cuatachos le hicieran el favorcito de computarle los años que tenía trabajando en otras partes desde que salió de la escuela. Le sumaron así 26 años de servicios para que el angelito cobre ahorita una pensión (alrededor de nueve mil dólares al mes) que todo parece indicar no merece.
Los principios chinos acerca de la naturaleza humana dicen, ``La vida es como una obra teatral donde todos somos actores. Tarde o temprano pretendemos ser algo distinto a lo que en verdad somos. A veces nos hacemos pasar por personajes honestos o capaces, y hasta por santos.''
Bueno, pues en el escenario priísta-panista-perredista los criminales mexicanos pretenden ser policías y gobernantes.
METAFÍSICA: Aunque los convenencieros curas y políticos digan lo contrario, los insultos recibidos (personalmente o al país) deben cobrarse aunque tengan que ser nuestros descendientes quienes lo hagan por nosotros. O nosotros por nuestros ancestros.
Eso de perdonar a los enemigos es una perversa y estúpida cantaleta colonialista española-cristiana impuesta a la indiada a través de los vaticanos.
No hay que dejar pasar ofensas. Por muy poderoso que un país, empresa, o grupo étnico sea, y por más que quieran intimidar a sus víctimas gritándoles a todo pulmón que a patadas no les tumbarán las puertas, los rituales chinos les pueden tumbar no sólo puertas sino hasta los calcetines.
Los rituales son como los pensamientos. Los pensamientos penetran ciudades, fortalezas, países enteros y hasta la vuelta al universo entero le dan en segundos. Imagínese, por ejemplo, la superficie de la Luna y verá que en menos de una fracción de segundo su pensamiento ya fue hasta allá y vino de vuelta. De manera que no hay lugar ni persona que resista el embate de los rituales.
Haga memoria mientras hace sus peticiones. Si no hay razón para dejar escapar a los enemigos de antaño y su parentela y cómplices, menos se puede perdonar a los actuales. Si ellos arruinaron y arruinan a varias generaciones de los hijos de usted, ¿cuántas generaciones de hijos se merecen los pillos qué les arruinen?
Y para hacer rituales y domar a gobernantes abusivos no se necesita ni credencial de elector.
FISONOMÍA MILITAR: Los oficiales del Ejército jamás hablan con un ciudadano sin antes insultarlo verbalmente y vejarlo físicamente.
Para partir un cacahuate siempre sacan un machetón. Un soldado debe tratar a los ciudadanos con respeto y decencia, pero tal cosa no ocurre en México.
De pendejo... hijo de la chingada... baboso... te voy a matar si no confiesas... dónde está el guato... te voy a colgar de un árbol... te voy a mandar a la verga... te voy a partir la madre... cuántas armas tienes... a qué partido subversivo perteneces... y demás chuladas cívicas de ésas no bajan los sardos a quiénes tienen la mala suerte de encontrarlos en su camino. Y piensan que son listos al actuar asi.
El secretario Carrasco, el general Cervantes y el presidente Zedillo son los responsables directos del bárbaro ``lenguaje'' de la soldadesca. En vez de andar comprando tanto armamento, deberían contratar maestros de primaria para limarles un poco la barbarie a sus oficiales en ese mal llamado ``Colegio'' Militar. A los colegios van los jóvenes a educarse, pero a ese plantel los estudiantes mexicanos van a unicamente a embrutecerse más. Ahi hacen animales uniformados. De ahí que los oficiales mexicanos sean los más hocicones del mundo.
#2. La esposa de el lider palestino Yasser Arafat declaró frente a la primera dama de los USA, que Israel está envenenando con gases a las mujeres y niños palestinos. Asegura también que Israel contaminó con materiales químicos al 80 por ciento de las fuentes de agua en Palestina causando un alto índice de cáncer en la población.
Si eso fuera verdad sería una monstruosidad militar sólo superada por el genocidio de indios en México. A ver cuándo les da a los pueblos sometidos por aprender rituales militares chinos. Con puros quejiditos no van a llegar a ninguna parte.
LA PROPAGANDA QUE COMPRAMOS: La secuela perversa dejada por las películas en las mentes de los cinéfilos, especialmente jóvenes, es aterradora y comparable a la destrucción social causada por el opio y otros enervantes.
Las películas extranjeras (y en las de aquí, por supuesto) dieron publicidad y glorificaron a las pandillas juveniles y el resultado es que las ciudades americanas más grandes presumen hoy de ``gangas'' de méxico-americanos que se tragaron todo el veneno de las películas. Ahora los cholos sólo sirven para que jóvenes americanos hagan lucrativa carrera de policías reprimiendo a esta muchachada mal guiada.
Ése es un buen ejemplo de que quién vea películas a lo buey, sin cuestionarse su significado, acabará mal del coco. Aunque no fume opio.
Y ni espere que el gobierno advierta a los ciudadanos sobre los peligros de el cine. Los gobernantes son del mismo grupo étnico que controla la industria cinematográfica occidental.
¿HASTA CUÁNDO LOS TOLERAREMOS, SEÑOR? Con la excusa de evitar que los mexicanos residentes en los USA traigan y luego dejen aquí carros americanos usados, dicen en Hacienda que cada automovilista debe dejar fianza hasta de 800 dólares. Alegan que cuándo la persona salga del país, usualmente después de 30 días, se le regresará la fianza completita.
Nada ilegal ahí, aparentemente.
Solamente que nos ocultan lo que harán con los intereses generados cada mes por esos millones de dólares depositados en fianzas. ¿Ah, verdad?
LA HUMILDAD DE LOS OBISPOS: ``La Iglesia quiere ser pobre,'' gimen los curas mexicanos.
Pues querrá ser pobre, pero no se ve que los curas hagan nada por lograrlo. Y en cambio sí les gusta comer bien.
En la reciente boda del primer atarantador de masas, Azcarraga Tercero de Televisa, y mientras apenas a unos metros de distancia del jolgorio los nativos sureños se las apañan con una tortilla diaria como alimento, los ladinos-judíos-criollos mexicanos les restregaron su miseria a los pobres con gran fiestón. Fiestón avalado por los más altos jerarcas de la Iglesia. Y del Estado, faltaba más.
Podría haberse ido Azcarraga a presumir su riqueza a cualquier ciudad de México o del mundo. Podría haberse largado a España, que tanto ama. Pero no, le pareció que sus dólares harían más contraste en un lugar hundido en la miseria y así con poco gasto se vería fenomenal la boda. Escogió un parquecito ecológico en Quintana Roo (que nombrecito tan pinche el de ese estado, ¿no lo podrían cambiar?)
El nuncio Mullor hizo un tiempecito en su cargada agenda para oficiar la boda.
Después, Mullor y los demás obispos mexicanos que dicen amar tanto la pobreza se codearon con los invitados de honor para despacharse entre vinos, músicas y risas el siguiente menú: Camarones con vinagreta de guayaba, crema fría de alcachofas, y róbalo en hoja de maíz con miel. Y de postre, uno de los siguientes: tulipán de caramelo con nieve y fruta, chocolate con plátano, coco de chocolate con helado y frutas tropicales, mousse de maracuyá (quién sabe qué será eso) y trufa de cacahuate.
Como se ve, dada la categoría de la lista de invitados, el menú fue más bien pobre. Pero eran 600 los coleros y los tiempos en Televisa no están para gastar demasiado en frivolidades. Al menos hasta que entre en acción el próximo teletón para cuando menos recobrar gastos de bodas y cosillas de ésas.
Eso sí. El menú fue mucho mejor que la rata de campo que acompaña la tortilla de los indios mexicanos. La bola de nativos locales, azorados y escondidos entre la maleza, veían con sus bailadorcillos ojazos el festín pero sin poder llegarle, aunque podrán cooperar cuándo los televisos los inciten a entrarle a las limosnas de el teletón. Y observando la dieta de los indios y la de los ladinos en sus pachangas, veo muy difícil que los obispos se quieran volver pobres en un futuro muy cercano. Al menos no voluntariamente.
Lo malo fue que la boda tuvo lugar bajo intensa lluvia, lo cual es mal presagio para la pareja de casados. Sabiendo lo anterior, el Arzobispo de Yucatán taimadamente tranquilizó a la pareja diciéndoles, "En mi pueblo dicen que cuándo llueve es de buena suerte y por lo visto ustedes tendrán muchísima.'' Y los nacos se lo creyeron.
Porque en mi pueblo dicen que cuándo llueve es porque el Cielo llora. Mal presagio. Durante la boda el Cielo lloró probablemente debido al embrutecimiento de indios, programa del que es parte Azcarraga Tercero. Pero ya entrados en el banquete, los obispos son capaces de voltear cualquier principio de metafísica con tal de quedar bien con sus anfitriones. Dado el presagio tan negativo, la pareja necesitará seguido de la Biblia que le mandó ya autografiada a Azcarraga su cómplice el Popis por medio de Mullor.
Despues de la boda la pareja dejó la capilla y caminó sola por la vereda principal del lugar, vereda cubierta en esta ocasión con hojas de palma, pétalos de flores y orquídeas. Los tufos de los miserables lugareños quedaban así muy lejos del olfato de la enamorada pareja. Y para desquitar la invitación, los coleros les hacían por los lados miles de burbujas de jabón. Qué espectáculo, ¿verdad?
Los recién casados se fueron de Luna de Miel al Africa, así que no sería mala idea que Azcarraga buscara un brujo local que le de una limpia porque eso de la lluvia no le augura nada bueno.
LAS HAZAÑAS DEL ``H'' EJÉRCITO MEXICANO: Para no perder la costumbre, el Ejército torturó en Zacatecas a dos indígenas chamulas, primos hermanos por más señas. Uno de los golpeados está grave y bajo custodia de la cuicada Ministerial del área, y el otro simplemente desapareció.
Resulta que a los paisanos chamulas se les ocurrió, en mala hora según vemos ahora, salir del municipio de San Cristóbal de las Casas, Chiapas, para cumplir a pie una manda por los centros religiosos más importantes del país.
En sus incautas mentes los dos indígenas pensaron que México vive un estado de Derecho congruente con una república convencional, y que los ciudadanos podemos transitar libremente por el país, según ordena un librote llamado La Constitución y que ningún presidente, legislador o penalista se ha tomado la molestia de leer.
Error mayúsculo el de los dos primos al pretender viajar a patín por el país, porque en Zacatecas se les apareció el Diablo. O el Ejército, que para el caso da lo mismo.
Apenas llevaban cuatro meses chancleandole por esos caminos de Dios los peregrinos, cuando al lado de un arroyito fueron intempestivamente interceptados por un pelotón de soldados. Esto sucedió cerca de un pueblito. Su apariencia de humildes, desarmados y enterregados caminantes se les hizo muy peligrosa a los guachos, que por otra parte nomás andan viendo a quién chingan. (Indios, preferentemente, pues somos más nangos.)
Pobres cuates chamulas. Iban en busca de indulgencias y bendiciones y se encontraron con los sirvientes del Demonio, con los soldados. Al preguntarles ``atentamente'' por identificaciones, los indígenas les enseñaron a los sardos credenciales que los identifican como militantes campesinos del Partido del Trabajo y ahí ardió Troya. Les han puesto una madriza los guachos, que no vea.
Resulta que antes de empezar su peregrinación, los primos le avisaron al cura de su diócesis acerca de su próxima aventura. Y el güey, digo el cura, en vez de darles un documento oficial de viaje explicando el significado religioso de la mencionada manda, se limitó a desearles buen viaje. Y claro, eso de nada les sirvió a los chamulas.
No les pareció desde luego nada razonable a los changos verdes que los indígenas anduvieran tan lejos de su tierra, y ñaca que se los chingan. Los golpearon ``brutalmente'' dice una de las víctimas, así que nomás imagínese el circo pues también les aplicaron el consabido tehuacanazo con su respectivo chile piquín. Estamos en la tierra del chile, ¿no?
Uno de los indígenas acabó en el hospital para una operación, ya que presentaba estallamiento de vísceras y lesiones contusas diversas. De ese pelo estuvo la zapateada que le aplicaron, ya que los sardos siempre dejan a sus víctimas como si los hubiera atropellado un tren. Además el médico a cargo de la operación solicitó protección oficial ya que militares rondaban el hospital. Finalmente cambiaron al paciente a un hotel. Ahí les platicó a los reporteros su odisea y agregó, ``Estoy todo adolorido por dentro.''
No fue para menos, y no me extrañaría que estuviera adolorido hasta por fuera. Pero además lo amenazaron los soldados con desaparecerlo si hablaba de más. Y debe ser cierto, porque hasta ahorita no han encontrado al otro indígena, que simplemente ``desapareció.''
A ver, Cervantes, ¿dónde está ese indígena? Y tu, Zedillo, ¿no tienes nada qué decir al país acerca de eso?
(En grandiosa ceremonia pública en Torreón, el secretario de Gobernación Carrasco aseguró que Zedillo desea que no haya caminos, calles, ni ningún rincón del país que no sean lugares seguros donde impere la ley y, sobre todo, la confianza. Pues según vemos sus deseos no son sinceros pues ya hubiera retirado al Ejército de esos lugares.)
Nos sentimos cada vez mas distantes los mexicanos de nuestro Ejército. Qué desgracia saber que los caminos de México son más inseguros mientras más haya en ellos soldados que alguna vez consideramos gallardos guerreros y hoy son únicamente delincuentes legalizados.
MUNDO LADINO: Este país se conmueve con los abominables actos de secuestradores de niños. Hay muchos secuestros pero si el niño es ladino entonces los medios lo apoyan, pues es uno de ellos. Luego las autoridades obligan a los sospechosos a someterse a interrogatorios de televisos conducidos frente a las cámaras de tele. Los interrogadores ``expertos'' suelen ser los ladinos Zabludowsky y sus zabludowskitos. No se en qué ley está permitido eso, pero obviamente sirve a la causa política de gobernantes ladinos y también al aumento de ratings y ganancias para los televisos.
Se entiende la rabia de los ladinos en los medios contra los que matan niños ladinos, pero y de los que matan mexicanos no ladinos, ¿qué? ¿Los no ladinos no tienen padres qué los lloren? Zabludowsky y pandilla se abstienen discretamente de entrevistar a soldados asesinos y agentes de la PGR matones. Si los secuestradores son malos, ¿cómo es qué los uniformados y policías matan e igualmente causan sufrimiento a familias humildes pero los televisos y las autoridades permiten que su vida transcurra en la sombra?
¿Por qué hay ese doble trato a delincuentes en México? ¿Por qué solamente cuándo las víctimas son ladinas, como en el caso del bebé recientemente secuestrado y asesinado, pasan las autoridades a los delincuentes por la pasarela pública? ¿Nos quieren decir qué lo hacen para asustar indios? ¿Será porque unicamente está permitido que las autoridades ladinas exterminen indios? ¿O nos quieren decir que la vida de un ciudadano común vale menos que la de ladino?
No solo eso. Milagrosamente, por cierto, se volvio a oir la ronca voz de los juristas mexicanos. Tocaron el tema del bebe secuestrado. Como no arriesgan la chuleta aqui, se lanzaron con todo contra los culpables del crimen y no blancos como el, por supuesto. Un jurista les llamó ``mal nacidos.'' Nada que objetar. ¿Pero y cómo les llamaría, si se atreviera y encontrara algún día la voz para ello, a las autoridades asesinas que dejan cadáveres de mexicanos no ladinos tendidos a diario por las calles de México?
Alguien tiene que dar al pueblo explicaciones de tal vileza por parte de ``juristas,'' televisos y gobernantes.
UNO DE ITALIANOS: Los italianos son cultura non, donde el Vaticano y la Mafia coexisten sin problema. A lo mejor son los mismos, ¿verdad?
Bueno. El caso es que el Tribunal Supremo en Roma declaró abandono justificado del hogar el que la esposa se vaya a causa de la suegra. Convivir con los suegros es exasperante e imposible, de manera que ya es legal que la esposa abandone al marido por esa causa. O que el marido abandone a la esposa.
La sentencia toma en cuenta la tasa de intolerancia suscitada en el hogar no sólo por la omnipresencia de los viejos, sino hasta por los incesantes reproches y la intromisión de los suegros en los asuntos de la pareja. Esto incluye a ``otros parientes terribles.'' Ya me imagino cuales.
A ver cuando nos traen esa ley pa'ca los holgazanes legisladores mexicanos, porque yo ya no aguanto a mi suegra. Ni siquiera leyes nuevas tienen que hacer, sólo copiar las buenas que hagan en otros lados.
* Master, Estrategia Militar China
E-mail: visionpf@direct.ca
| Col #72
|
Home |
Columnas |
Col #74 |
Copyright © 1999, Francisco J. Vargas