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Pérfida. Lapidaria palabra-pedrada usada no solamente por poetisos mexicanos en sus quejosos boleros, pues antes la utilizó el gran Napo de Francia. El original, no el marrullero luchador enmascarado en el manicomio. Napoleón Primero, pues.
Si perfidia quiere decir traición, me imagino que pérfida quiere decir traidora.
"Attaquons dans ses eaux la Perfide Albion," dicen que gritaba a todo gaznate el enano de las botas rellenas y sombrero de tres picos, Napoleón Bonaparte, para reclutar chavos en la guerra de 1813 contra los británicos. Con trabajos hablo espanhol de primaria, así que ignoro el significado de la arenga del enanin, pero parece que no le caía bien Inglaterra y la tenía por desleal.
Otros europeos tienen la misma opinión de Inglaterra. Dicen que los británicos son canijos y no les confían mucho. Por algo será.
Los ingleses inventaron la frase Fair Play o "juego limpio," pero parece ser que ellos no practican lo que predican. Por tal razón, cuando hace año y medio arrestaron al dictador chileno Pinochet en Inglaterra, lo anticipé: "No le van a hacer nada al generalote matón los ingleses y le dejarán ir."
¿Por qué decía yo eso? Por la sencilla razón de que Pinochet pertenece al grupo ladino-judío que lleva las riendas del mundo occidental, así que su futuro es fácilmente predecible para los que no están ciegos. Por eso su hija Lucía pitorreaba a los periodistas. Ella sabía bien que su padre no corría verdadero peligro de acabar en la cárcel.
Condenar a Pinochet por sus atrocidades hubiera sentado peligroso precedente legal para condenar a los ladinos que gobernaron y gobiernan en los países de habla hispana. Después sería fácil encarcelar por tortura y genocidio a generales y exmandatarios mexicanos, argentinos, paraguayos, venezolanos, etcétera. Y así no es como hacen negocios los cuates ésos.
Después hubiera sido posible juzgar digamos a Fidel Castro. Eso no es ni será posible pues el barbón cubano forma parte del mismo grupo étnico de Pinochet, Zedillo, Pastrana, et al (latinajo por "y demás matones que los acompañan").
Ni qué decir que cuando Pinochet fue arrestado se empezaron a mover influyentes personajes en público y tras bambalinas para liberarlo. Entre ellos un panzón exsecretario de Estado güero, la baronesa y exPrimer Ministro Thatcher (la `ñora de las pantaletas de fierro), el actual Papa y sus obispos, y más hermanos étnicos del lagrimoso dictador andino.
Para justificar la tranza política de permitir que Pinochet abandonara Inglaterra, dijo el ministro del interior inglés, Straw, qué el viejo chileno "sufre de extenso daño cerebral" y que dizque se le va la onda. Que al perverso anciano se le olvida todo y no entendería ni de qué lo acusan. Ni hablar bien puede, agregó Straw. (Curiosamente, el que sí parece sufrir esos males es el mismísimo Straw.)
Desde luego que a los ingleses no les remordió la conciencia ejecutar alemanes no-judíos después de la Segunda Guerra sin importarles su estado anímico o físico. ¿Cuál fue la diferencia entre los nazis y Pinochet? Pues que Pinochet es judío. (Aquí gozan de igual inmunidad los cinco millones de ladinos mexicanos.)
A eso se le llama recibir "privilegios." O sea, la persona recibe más de lo que honestamente merece.
En cuanto regresó a Chile, Pinochet "recuperó" inmediatamente la memoria y la habilidad de caminar y hablar. El milagrito no sorprendió a nadie, pues sentarse en silla de ruedas no quiere decir que la persona esté realmente inhabilitada físicamente. Y a lo que se vio en la recepción que le organizaron los militares chilenos, reconoció y abrazó a todos sus cuates. La salud y memoria del matón están bien.
Los que no estamos muy bien que digamos somos el resto de la humanidad después de ser testigos de tal burla ética y legal. En este torcido mundo la justicia desaparece cuando se entrevera con la política. Y pasa hasta en la Inglaterra del "juego limpio." La Pérfida Albión, se quejaba Napoleón.
La misma Inglaterra que seguido acusa a México de "país corrupto."
CAVILAR HONDO Y PLANEAR LEJOS: La llamada "cultura mexicana," de la que tanto presumen en Turismo para atraer visitantes extranjeros no existe desde hace siglos. Lo que sobrevivió a la furia espanhola no sirve más que para llevar turistas a pirámides destartaladas que los curas no pudieron quemar por ser de piedra y a que vean danzantes indígenas con ropas hechas en Hong Kong.
En cuanto a comida, para que se indigesten los nativos y los visitantes por igual, poco hay aparte de tamales y tacos acompañados de letales y fríos refrescos de cola. Tan maravillosa dieta nos tiene artríticos, panzones chaparros y con graves problemas de digestión, renales y hepáticos. Pero felices.
Por su parte, los ladinos mexicanos descendientes de los gachupines no han podido reemplazar lo que nos destruyeron. En 500 años no han producido nada que valga la pena culturalmente, mucho menos en materia de salud desde que acabaron con la herbologia mexicana. Eso nos da una idea de su cociente intelectual colectivo. Lo que los ladinos saben hacer bien es destruir y explotar gente. Gachupines, pues. De cavilar, planear, crear, nada de nada. A ellos pónganlos donde puedan robar a gusto, especialmente si para eso tienen que matar indios, ya que esto les causa indescriptible placer. Pregúntenle a Hank.
La contribución de los ladinos al arte nacional durante cinco siglos se puede resumir en dos palabras: Mierda pura. Aparte de la genial idea - alarde universal de inteligencia - de plasmarle el águila y la serpiente en el lomo al ridículo Tito Guizar, no se ve que del cerebro les brote otra cosa a los ladinos que no sea materia fecal.
Ni en el mundillo del entretenimiento, donde ya la Televisión y el Cine están inventados, han podido los ladinos crear algo medianamente satisfactorio. Tienen la cabeza tan hueca que el otro día decía muy excitada una "actriz" de Televisa (nido de tratantes de blancas), que hacen falta más telenovelas para mostrarlas al mundo "como evidencia del talento mexicano." ¿Qué le parece? Me recuerda a briaga y voluptuosa actriz americana, remedo de La Monroe, que sabiendo que los estudios de cine idiotizan al público propuso a los productores vender en frascos los orines de ella. No bromeaba.
La Televisión y las películas producidas en este país dolosamente hunden más al espectador mexicano en la imbecilidad. Si las cintas y telenovelas rebosan estupidez, irremediablemente causarán retraso mental en quienes las miran. Por eso a falta de verdadero talento ahora exportamos estupidez filmada a Gringolandia para consumo de la indiada allá.
En Los Ángeles, por ejemplo, hay cinco canales de televisión en espanhol. Cinco, señores y señoras. Cinco canales con programación mexicana en una ciudad americana. Y de las cinco estaciones no se hace una. La fecal programación únicamente se multiplica por cinco. Exhiben horribles programas de noticias y mucho bailar feo y cantar fuera de tono. Luego más telenovelas. Y vuelta a cantar y bailar feo. Y para variar un poco, media hora de "noticias nacionales" con leedoras de noticias feas, caribeñas y con voz de hombre. Y vuelta a las canciones y telenovelas made-in-Televisa.
Y pensar que los americanos se rascan la cabeza para descubrir el por qué los hijos de mexicanos son los niños más nangos en las escuelas de Los Ángeles. Todo porque los productores de cine mexicanos, Televisa y TVAzteca, hacen lo que el Gobierno mexicano requiere para tener ciudadanos nangos que no se le alebresten. Ni aquí ni en el extranjero.
Lo bueno es que los ladinos mexicanos ya se apendejaron ellos mismos con su basura filmada y están ciegos al peligro que los rodea. Por estar pensando en cómo repartirse lo que queda de dinero en las arcas nacionales no ven presagios de lo que les espera, como lo sucedido en El Mexe. Allí los ciudadanos desarmaron, desnudaron e hincaron a cuicos abusones demostrando que el desorden civil siempre estalla en minutos y sin aviso previo.
Y al pueblo, cuando se encabrona, le valen los tanques del Ejército. Por eso los generalotes verdes, tan sublimemente matones ellos cuando de individuos se trata, se abstuvieron de meter la bota en El Mexe pues entendieron que la violencia civil de la chusma podría extenderse al país entero como reguero de pólvora ardiendo al menor pretexto. Y mal no calcularon, pues pendejos no son. Por eso se dice que los militares tienen tres piernas: No hay quién los alcanze cuando corren. Y al menos en El Mexe no se apareció ni uno.
Pero los cinco millones de ladinos mexicanos siguen ciegos y sordos a la realidad e insisten en acrecentar sus fortunas sin oír los reclamos del pueblo. Así pasó en Cuba cuando su revolución: Los rebeldes entraron a las calles principales de la Habana correteando a los sardos de Batista a plomazo limpio mientras la aristocracia ladina bailaba y bebía celebrando las fiestas, reacios a aceptar la realidad.
A eso se le llama pensar con los pies y no utilizar el cerebro.
LAS HAZAÑAS DEL "H" EJÉRCITO MEXICANO ¿No qué muy chingones los ladinos en el poder y sus generalotes verdes? Tanto matar indios a sangre fria y en cuanto les levantan la piedra las organizaciones de derechos humanos y les pega el sol, las alimañas priístas se espantan.
Y ni modo de defenderse de acusaciones de violar los derechos humanos de los mexicanos no-ladinos, pues son ciertas. Por eso Zedillo evita firmar acuerdos para castigar el genocidio en tribunales internacionales.
Zedillo acaba de ordenar que el Gobierno no esté representado en la última reunión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos en la Organización de Estados Americanos que tendrá lugar en la ciudad de Washington D.C. La SRE sondeo con anterioridad a representantes de organizaciones no gubernamentales y se dio cuenta que en la reunión en Washington le sacarían los trapitos al sol al Ejército mexicano por sus matanzas y abusos en perjuicio de la indiada.
Y así como Gurría les llamó "ignorantes" a los legisladores cuando le descubrieron su mañosa jubilación, así el representante jurídico del Ejército nacional calificó de "vileza" las intenciones de los defensores de derechos humanos.
Tanto mentarle la madre a los civiles y patearles las nalgas en la calle, y cuando los acusan por sus tropelías los sardos se declaran mártires y se meten rápidamente abajo de su piedra. Se enojan porque haya gente que les cuestione "el derecho del Ejército" a secuestrar, torturar, matar y desaparecer civiles.
Pero hay ONGs que insisten que en el Ejército mexicano no hay justicia, sino protección a matones uniformados.
Pero en el omnipotente fuero militar mexicano todos los asesinos verdes caben, sabiéndolos acomodar. Para eso son "valientes, leales y honorables." Qué bello es ser soldado mexicano, ¿eh?
COMO MÉXICO NO HAY DOS: Vaya fichita nos resultó el militar Carrillo Olea, "gobernador con licencia" de Morelos requerido por la justicia.
Resulta que Carrillo está acusado de tener nexos con narcotraficantes y secuestradores, de lavar dinero negro y de violar derechos humanos. La madeja se desenredó cuando el caso de El Moles, un muchacho que los judiciales estatales secuestraron y mataron a golpes por una acusación jamás probada, pero que los cuates de "comunicación social" repiten como padre nuestro, de que era dizque secuestrador.
Secuestradores resultaron los cuicos.
Carrillo Olea, naturalmente, negó todo cuando lo salpicó la caca. En entrevistas daba primeramente la impresión de ser sincero. Sin embargo, no hay militar sincero y pronto se le descarapeló la máscara y anda corriéndole a una orden de arraigo emitida por la Suprema Corte de la Nación. Carrillo sabe que al jalar la hebra se desbarata el tejido.
Pero vivimos en México, país perteneciente a los ladinos, así que "los amigos de Carrillo Olea" presurosamente le echaron una mano. Y echarle la mano a un político o militar mexicano es que la autoridad viole la ley y que se hinchen los no-ladinos. Mientras en el caso Stanley a los detenidos les fabrican evidencias, los militares mexicanos desaparecieron archivos con denuncias contra Carrillo de la manera habitual, honorable y valiente con que acostumbran actuar los changos verdes: Robándoselos.
Cuatro "asaltantes" robaron del Congreso del Estado las denuncias contra Carrillo que estaban en poder de legisladores no-priístas. Y los archivos que no se llevaron los borraron de la memoria de las computadoras.
El presidente de la Comisión de Justicia del Congreso piensa que los ladrones fueron miembros del Cisen, de Gobernación y de Defensa Nacional. Y para dejar claro que en México los militares están sobre la ley, el Ministerio Público se tardó nueve horas para actuar después de la denuncia por robo hecha por los legisladores.
Vivan el México ladino, sus militares sinvergüenzas y sus ciudadanos dóciles como borregos.
NUESTRO FÚTBOL: Ya no podrán quejarse los defensores del sargento Lapuente que el fútbol del área Concaca-f donde juega México es de tan mala calidad que por eso no progresamos. Nos ganó El Salvador antes, luego empatamos con Guatemala en la Copa de Oro y después Canadá nos echó fuera de mala manera. O sea los malos somos nosotros.
Entonces, como ya todos los enanos de la Confederación nos crecieron y nos ganan, ahora le toca a México ponerse a la altura de los equipillos de la nueva Confederación. Ése es nuestro nivel, por más que dizque le hayamos "ganado" a Brasil el otro día.
#2. Lo sabía desde hace mucho cualquier mexicano en los estadios, pero les tomó a los científicos años para descubrirlo. Cada que un juez de línea levanta la bandera para señalar offsides imaginarios y anular goles legítimamente conseguidos, la gente les pregunta burlescamente qué si están ciegos. Y resulta que el diez por ciento de abanderados si andan mal de la vista. Especialmente cuando hay que juzgar el fuera de lugar que tiene lugar hasta el otro lado de la cancha.
Y es que el pueblo nunca se equivoca, aunque lo duden los priístas-panistas-perredistas.
#3. Los desabridos muñecos parlantes de televisa que narran fútbol necesitan darse una vueltecita por la escuela para adultos y enriquecer su vocabulario. A ver si así nos evitan pendejas apreciaciones. La más socorrida es la de decir, cuando un jugador tira al marco, que "se tuvo confianza." Y los demás qué hacen, ¿temblar de inseguridad?
Otra frasecita del gusto de los cabezas huecas es la de decir, "hizo el gol en jugada de pizarrón." Si eso fuera verdad los goleadores no tendrían más que hacer "jugadas de pizarrón" para anotar en cada juego.
Peor están las cotorras de Telemundo. El narrador uruguayo sólo sabe decir cuando alguien cabecea la pelota, "dijo no con la cabeza." Y si el portero toma la pelota por abajo tendremos que soportar por enésima vez su sobada frase, "hincadito como en la iglesia." Al comentarista, un colombiano, hasta ahorita no le descifrado lo que dice, pero su incontinencia verbal hace suponer que creé saber mucho de fútbol aunque eso lo sabremos cuando su cerebro alcance su lengua.
#4. Ya les andaba a los güeyes de la Federación: Lapuente vuelve a jugar con la selección a estadio vacío como se demostró en el juego en que Canadá eliminó a México en Los Ángeles. Y la gente empieza, como siempre, a abuchear a los jugadores en los aeropuertos.
La selección habitualmente mete mucha gente en los USA pero últimamente juega (si lo que hacen se llama jugar) con un puñado de aficionados aferrados haciéndola de público.
Qué pena.
#5. La costumbre de quitarle más de dos jugadores a los equipos cuando juega la selección es una estupidez. Con dos jugadores por plantel es suficiente y se evitaría alterar el calendario del torneo.
Ahora que si tanto le gusta el Atlas a Lapuente, que les ponga la casaca verde a los chamacos y se lleve todo el equipo a jugar disfrazado de selección.
Pero le anticipo que ni así va a ganar. Seria como darle las llaves de un Ferrari a un arriero: no sabría qué hacer con el vehículo.
PRINCIPIO DE DINERO: Normalmente el hombre aprende la lección después de la experiencia. Pero en México no la aprendemos ni antes de después. Siguen explotándonos los ladinos a más no poder y nosotros con la boca abierta mirándolos.
Ejemplo. Las campañas electorales priístas son carísimas porque así se reparten el dinero los ladinos entre ellos solitos: Publicidad en televisión y periódicos, consultores de imagen, transportes, impresión de propaganda, etcétera. Por eso el Gobierno aprueba enormes presupuestos para las campañas, alcabos que nosotros pagamos.
Y en la última colecta de los bomberos capitalinos el 70% de lo recaudado se gastó en publicidad. O sea, los ladinos se reparten primero. En este pueblo de tontos todo es posible.
#2. Zedillo fue a Israel a firmar con sus ancestros étnicos un tratado de comercio. Eso significa que los judíos nos venderán armas a alto precio para que Zedillo y sus generalotes verdes repriman más rápido a la indiada. Las podrían comprar más baratas en otros países, pero los hermanos étnicos están primero. Y nosotros, las víctimas habituales de los sardos, pagamos la factura para que Zedillo y sus cuates aquí y en Israel se hagan más ricos y para que Israel exporte armas.
O los ladinos son muy listos, o nosotros somos muy tontos.
Usted qué creé.
* Master, Estrategia Militar China
E-mail: visionpf@direct.ca
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