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Payaso involuntario, pero payaso al fin, es don Mariquita Fox cuando abre la boca.
A veces el Maricón Mayor, presidente de todos los ladinos, habla como su ridícula vieja, la vaca sagrada de Los Pinos. A veces habla como persona entoloachada, y a veces habla como si estuviera sobre medicado con Prozac. La constante es que la lengua se le traba y frecuentemente dice palabras al revés o mochas. Y nunca parece darse cuenta cabal de las babosadas que dice. Este cuate es por lo menos, hay que decirlo, un riesgo para la "seguridad nacional."
Juar, juar, juar.
A ver. El otro día Clavillazo Fox pronunció, quizás pensando en delirios eróticos propios de su preferencia sexual, una frase atodamadrina: "De la base a la punta..." y se le perdió la mirada.
Hhmmm, malo, porque los sicólogos gringos dicen que cuando los niños en la escuela se desconcentran y pierden la mirada es que están pensando en delicias sexuales.
De ahí que las palabras del maricón, digo del mandatario con botas, hayan sonado lujuriosas en extremo. Como si se le hubiera hecho agua la boca al güey nomás de imaginarse el asunto.
Eso sí. Lo que definitivamente está podrido de la base a la punta, es el Gobierno ladino panista-mocho.
Empezando, naturalmente, por Marta-y-Fox -la yunta (dos bueyes) presidencial- y pasando por sus cómplices curas molestadores sexuales de niños mexicanos.
Resulta que el despistado Coca-colo Fox creyó que su trabajo terminaba al ganar la presidencia, que ahí cerraba el feliz final de la historia, que ya no tendría otra cosa que hacer más que viajar y robar. Pero su victoria electoral sobre el PRI fue apenas el comienzo de sus obligaciones, no su conclusión. Nada nuevo bajo el sol, porque el actual presidente de las patotas ha estado siempre mal informado, por eso ha convertido la Presidencia en enorme estercolero. Y si él y el resto de gobernantes y funcionarios gachupines criminales que nos gobiernan no han sido exhibidos ante el pueblo, es porque son manada de cobardes sin madre.
Por ejemplo. Los gobernantes judíos mexicanos son los sujetos más matones del mundo, peores a los genocidas de Israel y del continente africano, eso lo saben hasta los niños. Pero también son los más cobardes del mundo y por eso se salen con la suya. Porque digo, lo menos que puede hacer cualquiera que se considere hombre, especialmente si es gobernante con obligaciones precisas hacia el pueblo, es enfrentar las consecuencias de sus fechorías y no esconderse bajo la cama asustados ante la retribución de la justicia.
La cobardía caracteriza a todos los presidentes, generaletes verdes y secretarios de Estado mexicanos, pues buscan siempre escapar a su merecido castigo con marrullerías legales sin fin. Gallinas son por naturaleza y siempre exigen el encubrimiento de sus hermanos étnicos en el poder para escapar al largo brazo de la justicia. Por eso están escondidos en sus mansiones el hediondo genocida y ex-presidente Luis Echeverría, los cínicos generaletes asesinos de indígenas y campesinos, varios ex-secretarios de Gobernación, y cuicos enfermizos y matones como Nazar Haro, Gutiérrez Barrios, Carlos Hank, Luis de la Barreda, et al.
Vergüenza debiera darles a esos ladinos el que primero maten escudados en puestos de gobierno, y luego pretendan cínicamente envolverse en falso "amor por la patria" para evadir su responsabilidad. No saben qué se siente llevar la cabeza en alto y nunca avergonzarse de sus acciones, pues evadir responsabilidades escudados en sus amigotes ladinos en el Gobierno es conducta típica de miserables. Es enlodar su propio nombre de familia y estigmatizar a sus hijos, es peor a morir en el paredón en castigo por sus crímenes.
Cobardes también son Vicente Fox -el Primer Uñas-largas del país- y Marta, su despreciable y ladrona vieja. También carecen del valor más elemental sus amigotes como Santiago Pinocho Creel, Luis Derbez, Abascal, Usabiaga, Yunes, y demás pandilla de delincuentes en el gabinete presidencial, protegidos descaradamente todos ellos por el corrupto Fiscal de la nación, (m)Acedo de la Concha.
Pobres maricones, miedosos y desvergonzados.
Y más feo se ve la cobardía de los militares, generaletes que primero desarman al pueblo para poder cometer sus masacres a gusto, y luego esconden la cara asustados cuando los busca la justicia por sus masacres. Todos ellos son peores a narcos y secuestradores, quienes al menos se juegan la vida y no pretenden ser otra cosa ni hacen juramentos falsos prometiendo servir al pueblo.
Es el pinche miedo a terminar con sus huesos en la cárcel debido a sus crímenes, miedo injustificado en alguien que se considere hombre, lo que obliga a gente como los Amigos de Fox a mover cielo y tierra para evitar ser enjaulados, aunque para eso hayan obligado a su patrón Fox, el Primer Cobarde del país, a torcer la ley para evitar ser enjaulados por sus crímenes.
Igual está el secretario de Gobernación, Pinocho Creel, quien torció la manita a las autoridades electorales para que mintieran a su favor y así escapar a la cárcel por sus delitos electorales. Y este criminal sujeto quiere, como todos los de su calaña, ser presidente.
Bendito sea dios.
Ningún gobernante ladino sabe, y menos entiende, que la dignidad del hombre debe ser tal que ningún funcionario debiera hacer cosas que lo avergonzaran ya no ante el pueblo, sino ante su propia conciencia. Pero buscar escapar responsabilidad después de cometer felonías en perjuicio de la nación es de hombrecillos sin pizca de decencia.
Aunque si los secretarios de Estado tienen como ejemplo a un presidente ladrón y maligno escondido siempre bajo las faldas de su concubina Marta y de los generalotes verdes, entonces se explica el infierno político que tenemos.
Porque para pandillas de mañosos judíos y maricones de pilón, las que conforman el Gobierno mexicano actual.
PREGUNTAS Y RESPUESTAS: La siguiente es la pregunta más repetida que me hacen los lectores, respecto a mi proclividad por anunciar con anticipación a los ladinos mis planes contra su explotación: "¿No es la secrecía un factor importantísimo de la estrategia militar?"
Mi respuesta es la siguiente: En efecto, mis chiquilines, la estrategia militar china contiene una táctica con cuatro mil años de antigüedad llamada "operaciones clandestinas." En tales operaciones, la secrecía es vital para alcanzar los objetivos. Sin embargo, el principio mencionado aplica a la estrategia militar ordinaria, no tanto a la estrategia china que no reconoce conocimiento superior alguno.
La estrategia militar extraordinaria no pone énfasis en la secrecía porque el estratega se apoya en conocimiento militar profundo y secreto que teóricamente lo hace muy superior al adversario común. Por ejemplo. En la escuela de metafísica-estrategia militar china llamada "Meteorito Rojo," a la que yo pertenezco, es inconcebible atacar al adversario sin antes dejarle saber lo que se le viene encima.
¿Por qué?
Déjeme contestarme yo mismo la pregunta (ya que muy pocos fuera de China sabrían la respuesta): Pues porque es tanta la diferencia en conocimiento, que destruir al enemigo ordinario sin darle oportunidad de siquiera correr ya no sería juego limpio. Derrotar oponentes comunes como son los ladinos mexicanos en el poder es como quitarle violentamente un dulce a un niño: Ni pa'dónde se haga.
Y quien avisa el golpe, recuérdelo, no es traidor.
En cambio, son los ladinos en el poder militar y federal quienes siempre andan encapuchados, allanando casas sin órdenes de aprehensión, atacando e interrogando ciudadanos a media noche como los criminales disfrazados de autoridades que son. Su cochina y traidora conciencia los hace secretivos aunque supuestamente representan legalmente a la autoridad.
Pero yo no necesito secrecía alguna. Y de todos modos me la pellizcan los ladinos. O que me demuestren lo contrario si tan chingones son.
El AÑO DEL GALLO: Llegó el gallo de madera -de febrero 4, 2005 a febrero 4, 2006-pavoneándose soberbio frente a las gallinas e inaugurando un nuevo ciclo astrológico para el mundo entero. En consecuencia, el mono del año anterior tuvo que salir veloz y escurriéndose fuera de escena.
Poco diré de lo que se avecina militarmente este azaroso ciclo de doce meses, pues la violencia armada será pavorosa, pero fuera de los rituales del libro Ocultismo Chino poco hay que defienda a las pobres víctimas. De nada serviría espantar a mis lectores de diferentes países donde la Muerte recogerá contenta millares de almas.
Sí diré a mis paisanos, sin embargo, que este año va a ser el peor año metafísico y político para Mariquita Fox. Dudo que sobreviva su presidencia el ramalazo esotérico de tan fatídico año, pero allá él y su asquerosa vieja, la maligna bruja de Los Pinos. El par de bueyes van a sufrir en serio.
En general, eso sí, les digo a todos que este año habrá frías temperaturas para dar y prestar. Heladas y agua a granel, pues.
Que las enfermedades de las vías respiratorias los agarren confesados, mis pequeños saltamontes.
METEORITO ROJO #10: Esta petición va dirigida con toda la energía esotérica posible contra uno de los peores cánceres que tiene postrada a la mexicanada no-ladina: Los cerveceros y tequileros gachupines que sufre México.
Los emborrachadores de indios en este país son exclusivamente espanholes. A eso vienen los cabrones de su cochina patria. Aquí, con la complicidad de los hijos de los conquistadores en el Gobierno, los chupa-sangre ibéricos cumplen una función criminal pero primordial para la seguridad del Estado mexicano: Emborrachar indios para degenerarlos mental y físicamente a ellos y a su descendencia.
Las cerveceras y tequileras no son empresas, son armas de represión dirigidas principalmente contra los nativos mexicanos. Ya si después hay manera de hacer negocio exportando sus apestosas bebidas a los mexicanos en Gringolandia, mejor que mejor.
Esta táctica de emborrachar indios para evitar alzamientos contra los invasores espanholes empezó inmediatamente después de la Conquista, y hasta la fecha no ha parado. Al contrario, se ha incrementado.
Toca entonces a nosotros, los descendientes de los indios mexicanos herrados, encadenados y decimados cruelmente por el ejército de monosabios ladinos, desquitarnos contra ellos a través de los rituales chinos y las peticiones del meteorito rojo.
De otra manera, ¿con qué cara veríamos a nuestros padres cuando los encontremos en el más allá después de nuestra muerte? ¿Qué excusa les podríamos dar a sus espíritus si sabiendo el remedio para poner de rodillas a los espanholes que nos explotan no tomamos desquite de los bárbaros y su descendencia, igualito a como ellos nos obligan a los hijos de no ladinos a cargar borrachos con la cruz de la derrota en nuestras espaldas?
Porque aparte de que los espanholes nos explotan y destruyen a nuestra raza con sus cochinas aguas alcoholizadas, nunca regresan un peso en beneficencia a sus víctimas, siempre van a Espanha a darles su sangrienta generosidad a sus paisanos.
Hasta los narcos mexicanos se portan mejor donando dinero a las comunidades de indígenas. Los gachupines recogen sus monedas de aquí y siempre se van a beneficiar a su propia gente a Espanha. No les debemos tener entonces la mínima cuota de consideración ni compasión. Así como ellos nos joden, así hay que chingárnoslos nosotros con rituales. De hecho, los cerveceros y tequileros y los bancos que guardan sus sucias fortunas son nuestros enemigos jurados más acérrimos.
Y por si lo anterior no lo convence para dejar de consumir tan malolientes bebidas, le revelaré un principio chino de salud: La cerveza no solamente es perjudicial porque empeora la digestión generando y agravando, por ejemplo, úlceras estomacales, sino que lo peor es que produce impotencia sexual en el hombre. ¿A usted le gustan las chelas heladas? Pues haga ricos a los espanholes y contribuya a la alcoholización de nuestra raza si así lo desea, pero sepa que está arruinando su salud y su vida sexual.
Y a muchos no les interesará hacer rituales contra los cerveceros-tequileros, pero si se despiertan un día asustados porque el pitirrín ya no les responde, ya saben por qué. Nomás acuérdense dónde lo oyeron primero.
Al grano, entonces. Se comienza el ritual chino con la apertura de la ceremonia frente al altar casero, tal y como se instruye en el libro Ocultismo Chino. Se hace luego un muñeco de trapo o de papel, y se quema junto con la petición, siguiendo las instrucciones pertinentes en el mismo libro.
Luego se le escribe el conjuro del Tigre Blanco a la petición o del meteorito rojo, conjuro que encontrará en la página 110 del libro. También se puede escribir el conjuro encima del billete que se quemará junto con la petición, tal y como se instruye en el libro.
Si el oficiante desea experimentar y agregar otros conjuros del libro o que ya sepa, mejor, pues hará más efectivo el ritual. Mientras más seguido se haga el ritual, mucho mejor. Recuerde que estas peticiones están magnetizadas de antemano por mí para que ni curas ni rabinos puedan bloquearlas.
Para órdenes y/o informes, comunicarse por correo electrónico a visionpf@direct.ca.
* Master, Estrategia Militar China
E-mail: visionpf@direct.ca
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