El Mundial de fútbol está en octavos de final y en una semana más o menos hay elecciones sexenales federales en México. Estamos hasta el gorro ya de los sobados embustes televisados, de los candidatos a Presidencia y del Alacrán Güero Fox, incitándonos a "votar por México" (¿qué querrán decir con eso, dios mío?).
Poco hay entonces para comentar en el ámbito nacional -pero ojalá gane Presidencia Manos Sucias Calderón, tendríamos a quien ridiculizar sabrosamente en los próximos seis años (hace seis años vaticiné que íbamos a tener un sexenio a modo para criticar con Mariquita Fox en el poder). Los otros dos candidatos que luchan por ganarle a la propaganda de Estado detrás de Calderón -AMLO y Madrazo- son más listos que el avaricioso y persignado panista. Al menos gozamos haber tenido de presidente a alguien tan baboso y mandilón como Mariquita Fox, hecho a la medida para la sátira política. La pachanga podría continuar con el mocho Feli-Pillo.
Así las cosas, sigamos con el asunto de las guerritas en Oriente Medio, cuyos expansivos círculos concéntricos de influencia nos alcanzaron puntualmente, a mediados del siglo XX, cuando las superpotencias crearon el Estado de Israel.
Hasta los analistas políticos saben que la existencia de Israel es bastante precaria (rodean al Estado judío varios países árabes hostiles a su presencia), razón por la cual Israel es pozo sin fondo en cuanto a dinero se refiere, ya que cuenta con limitadas entradas naturales de dinero. No solamente necesitan ahí un presupuesto militar que debe estar entre los más altos del mundo, sino que siendo territorio desértico como los demás países en la región, el "pueblo de Dios" -ja, ja, ja- no fue "bendecido" con enormes reservas de petróleo como sí lo fueron árabes y persas. Su inflación interna es brutal. De pilón, tienen gigantesco presupuesto cultural para justificar, aunque sea superficialmente, la propaganda difundida en películas de Hollywood, libros y periódicos de que son una raza "omni-inteligente." Y aunque la poca simpática realidad es que mundialmente los judíos son conocidos como mercaderes ricos, las donaciones particulares no podrían ni en sueños mantener al Estado judío con el nivel de prosperidad económica artificial que muestra.
¿De dónde sale entonces el dinero que mantiene a flote a Israel?
Bueno, eso solamente lo saben en el Imperio del Mal. Pero atando cabos y reflexionando, es fácil darnos ideas con aceptable margen de certeza. Basta, por ejemplo, con seguirle la pista al dinero en abundancia, que como dicen los que saben, es como el culo: Nomás no hay manera de esconderlo. Países ricos como Francia, Inglaterra y los USA destinan enorme cantidad de recursos materiales y humanos para mantener vivos y bañados a los israelitas (ni pregunte cuánto vale un galón de agua en el desierto). No solamente contribuyen esos países con cash y tecnología de punta, civil y militar (de gratis), sino también con lo último en armamento militar terrestre, marino y aéreo (cazas último modelo, barcos, tanques, investigación y desarrollo, comunicaciones, y tecnología satelital).
Sin embargo, es fácil suponer que la ayuda internacional mencionada no puede ser suficiente para mantener a todo un país como Israel, con alto y artificial nivel de vida que sirva de propaganda, "modelo" y envidia a los países árabes en el área. Después de todo, los países primermundistas tienen controles gubernamentales internos muy estrictos sobre el flujo de dinero de gratis hacia otras naciones, y sus ciudadanos no son fácil de engañar sobre la manera en que sus gobiernos gastan sus impuestos. Su generosidad tiene y debe tener límites.
Pero y entonces, ¿cómo le hacen para mantener a Israel nadando en dinero? Ah, pues mire, yo pienso que los países occidentales aglutinados en el Imperio del Mal han encontrado una solución económica al problema mencionado muy simple y eficaz. Se la diré, pero no lleve esta columna al banco, pues son reflexiones propias que por cierto los obispos no nos dirán en sus risibles "talleres electorales." La hermética secrecía de la secta secreta mencionada no deja pasar ni el aire en cuanto a información de sus planes se refiere. Pero sucede que la alquimia china advierte que Como es adentro es afuera, que para descubrir la enfermedad del paciente basta observar los síntomas. Para ello, utilizaremos una combinación de fisonomía militar china (usted puede encontrar traducciones con fundamentos del aspecto civil de la fisonomía taoísta china en cualquier librería, y al menos podrá aprender a detectar el carácter maligno de la gente), y el método secreto de alquimia china para leer la mente de otras personas conocido como "tercer ojo militar," método utilizado por los estrategas chinos. Ni siquiera tenemos que recurrir a la adivinación china.
Sigamos entonces una probable ruta del dinero, desde países en toda Ladinoamérica hacia Israel, pero tomando a México como ejemplo único de proveedor de miles y miles de millones de dólares al año para mantener a flote a ese país. Para eso, tienen que morir de hambre y enfermedades cientos de miles de indígenas mexicanos. Dicho al revés, nuestra gente muere para que los israelíes vivan. Y como nuestros gobernantes son judíos por necesidad -cambian los nombres de funcionarios, no el grupo étnico en el poder-, fácilmente nos ocultan que están obligados a saquear al país para cumplir con las órdenes del Imperio del Mal. Y así hubieran seguido las cosas por al menos otro siglo, de no haberse atravesado en su camino los fatídicos rituales chinos que, afortunadamente para nosotros, los ladinos consideran "supercherías."
¿Y cuáles serían las órdenes para los gobernantes en México que emanan de la siniestra secta señalada por la adivinación china con el mote de Imperio del Mal?
Pues que descontando las tajadas al pastel de la explotación de indios que corresponden por derecho de la Conquista a Espanha y el Vaticano, el resto del botín sirva de sustento económico a Israel. Hhmmm.
Así ya encaja el hecho de que los dueños de las empresas más importantes del país -televisoras, estaciones de radio, hoteles y centros turísticos, cerveceras y tequileras, bancos, periódicos, etcétera- sean espanholes judíos. Igual pasa con representantes de facciones políticas, gobernadores, funcionarios, diputados y senadores, más el presidente en turno -causantes todos ellos del espantoso saqueo infligido a los mexicanos (por Salinas, Zedillo y Fox) y conocido como el Fobaproa-, dueños de partidos políticos como la familia González del Partido Verde...etcétera. Las elecciones nos dan dizque a escoger presidente, pero todos los candidatos son judíos. Nomás ellos ganan, y así el dinero fluye ininterrumpidamente de aquí a Israel.
Aún así, queda mucho dinero extra en el país para robar y se hagan ricos por su cuenta funcionarios y políticos. Con solamente hacerse cómplices de las elecciones fraudulentas con las que llegó al poder Carlos Ratón Atómico Salinas al poder, el entonces candidato Diego Fernández de Cevallos se hizo de carísimos terrenitos en Punta Diamante. Y el otro candidato, el Tatita Cárdenas, agarró concesiones de explotación maderera, más aseguró el futuro hueso de Gobernador para su hijito, Lázaro 2. El mismo Ratón Atómico cooperó con el Imperio del Mal al entregar la economía del país en el Tratado de Libre Comercio y Fobaproa, pero de paso se hizo rico asociándose con el judío libanés Carlos Slim en la explotación de concesiones de telefonía celular saqueadas al país. Y por ser Vicente Fox (y Manos Sucias Calderón) cómplice del atraco llamado Fobaproa, el Ratón Atómico allanó legalmente el camino desde Presidencia para que los hijos de extranjeros pudieran ser candidatos a Presidencia y Fox llegara cómodamente a Los Pinos con la complicidad incondicional de Ernesto Zedillo (para que luego digan los "analistas políticos" que el "voto en las urnas importa," ja, ja, ja). La Rata Marta también hizo cuantiosa fortuna personal con colectas varias como el repugnante redondeo en los supermercados, las millonarias colectas de la Cruz Roja que nunca alcanzan ni para que haya curitas en sus paupérrimas clínicas, más las viviendas hechas por el gobierno y regaladas a sus hijos ratoncitos aprendices de saqueadores. En México, siendo ladino, hasta "guerrilleros" como Marcos alcanzan tajadas del pastel, pues el enmascarado de estambre recibirá de gratis registro para su partido político que dizque "defiende a los indios." Eso y sacarse la lotería es lo mismo. Ciertamente el vividor hijo del Tata, Cuauhtémoc, no ha agarrado hueso grande en el gobierno pero explota sin vergüenza concesiones sexenales (herencia natural por ser hijo del generalete Cárdenas que dio a ladinos mexicanos y espanholes la mina de oro llamada petróleo). La última concesión conseguida por el Tatita le fue regalada por Déspota Fox para que el madurote júnior no vaya con las manos vacías, nombrándolo organizador -con fuerte presupuesto "a manejar," claro- de las insultantes celebraciones del "bicentenario de la (inexistente) Independencia." Fecha imaginaria inventada por los encargados de la propaganda de Estado.
No por nada nuestro país está en la ruina y el Gobierno es el peor enemigo del pueblo. Pero el sistema produce mucho dinero que diariamente sale en ruta al Oriente Medio. Véase, por ejemplo, como entre el Alacrán Güero Fox y el Parásito de Hacienda, Francisco Gil Díaz, han escamoteado al país -en fideicomisos secretos, enormes presupuestos aprobados pero nunca aplicados, excedentes del petróleo, pensiones de trabajadores robadas descaradamente por gobernantes, préstamos de bancos extranjeros dizque para servicios sociales, robo disimulado de las jugosas reservas de divisas, ventas de bonos en el extranjero, etcétera-, no menos de veinticinco o treinta mil millones de dólares (sin sumar los miles de millones aportados por otros países del área que también cooperan de manera similar a la misma causa) que para mí son trianguladas a Espanha y de ahí a Israel.
Aparte está el armamento obsoleto o inoperable que las fuerzas armadas mexicanas compran a Israel a precio de oro con la complicidad de generaletes, congresistas y medios de desinformación. Por eso México nunca cambia, porque es país conquistado y gobernado por la contlapacheduría que es el grupo de ladinos que nos gobiernan y pertenecen al Imperio del Mal. Con complicidades internacionales, es posible manejar secretamente tanto dinero. O dígame: Con tantas agencias internacionales de los países más avanzados monitoreando mundialmente el movimiento inusual de fortunas, ¿nunca han detectado tanto dinero fluyendo desde México en una sola dirección? Nos ven la cara de pendejos, ¿o qué? Porque extraña la habilidad de México y demás países ladinoamericanos para manejar miles de millones de dólares a través de bancos de muchos países sin que nadie los vea. Especialmente es extraño que los USA no sepan de ese dinero. ¿Por qué esa complicidad o encubrimiento?
La lucha contra el narcotráfico y el terrorismo ha desarrollado intensa vigilancia sobre cantidades de dinero que sobrepasen los cinco mil dólares. ¿Entonces? Recuerdo que autoridades gringas desvelaron hace años, cuando vigilancia de este tipo era rudimentaria, que el entonces presidente Miguel de la Madrid tenía depósitos en bancos suizos por muchos millones de dólares...y no pasó nada. Igual hicieron con Raúl Salinas...y no pasó nada. Últimamente, un hijo del entonces gobernador Arturo Montiel deposita más del equivalente de un millón de dólares en pesos y en efectivo en un banco gringo, y ni pestañean los banqueros a pesar que ése no fue ni el primero ni el último depósito que el júnior hizo. Saben igualmente en Gringolandia cuánto dinero escondido tiene Fidel Castro, lo balconean, y no pasó nada. ¿Por qué?
El Parásito Francisco Gil Díaz seguido viaja por todo el mundo haciendo transacciones monetarias secretas (no reportadas al Congreso) en nombre de la yunta presidencial...y nadie, ni gringos ni mexicanos dice nada. No es un secreto que nadie puede robarse la catedral de su pueblo y esconderla en su casa. ¿Qué pasa entonces?
Pues pasa que siendo todas las operaciones de ocultamiento de dinero en ruta a Israel hechas a través de bancos en países pertenecientes al Imperio del Mal, la discreción ésta asegurada. Por eso los bancos internacionales siguen prestando dinero a México aún cuando jamás se ha usado ese dinero para los servicios sociales que pretenden los gobernantes, sino robado: Todos están en el ajo. Y chínguese el indio.
Por lo demás, no es factible que algún gobernante mexicano sea acusado de enriquecimiento inexplicable por nuevos gobernantes en Los Pinos, ya que todo es perfectamente explicable...para ellos mismos. Si AMLO llegara a Presidencia no cuestionaría -como tampoco lo harían Madrazo o Manos Sucias Calderón- el saqueo a la nación hecho por Fox y pandilla, pues como buen judío -si no fuera ladino no sería candidato- él también tendrá que saquear al país pues esto no es cuestión de individuos, sino resultado neto de la Conquista. La explotación se terminará cuando llegue un mexicano no-ladino al poder, es decir, no inmediatamente. Pero a menos que apliquemos un remedio radical, no hay manera de detener el saqueo porque el número de hambrientas ratas ladinas mermando el granero nacional es demasiado grande para los pocos gatitos desdentados que lo cuidan. Es decir, las leyes en México están hechas específicamente, por los mismos ladrones enquistados en Los Pinos, Congreso y Corte Suprema, para permitir y encubrir el traidor saqueo. Ése es crimen merecedor de paredón, pero las autoridades son parte del problema y la impunidad campea.
Y en nada ayuda la complicidad de países miembros del Imperio del Mal para encubrir a sus hermanos étnicos en la explotación de México. Por eso, aún cuando el cuantioso dinero sustraído a México y otros países vecinos es causa de desempleo y miseria en la región debido a la inflación y falta de generación de empleos, no hay revoluciones porque la válvula de escape que es Gringolandia ha estado abierta por más de medio siglo a inmigrantes legales e ilegales. O estaba abierta, mejor dicho, porque ya no lo está. Si México expulsó del país hacia Gringolandia, en cada uno de los últimos cinco años, un millón de trabajadores jóvenes desempleados es porque los americanos lo permiten. Y ahí está el problema que México tiene encima, porque la línea divisoria se ha militarizado y está restringiendo el flujo de ilegales hacia los USA.
Pero el asunto no tiene solución rápida ni efectiva, por eso la frontera México-USA se está convirtiendo en un polvorín político y militar. No porque los gobernantes de ambos países lo deseen, sino porque se filtró en la situación un elemento inesperado por todos: Los letales rituales chinos. Los rituales en manos de la gente, y abrir la caja de Pandora, es lo mismo, pues nunca se sabe por dónde brotarán los efectos de los rituales. En nuestro caso, los meteoritos rojos reventaron inesperadamente en la frontera México-USA cuando los ciudadanos americanos demandaron que su gobierno ponga remedio a la porosidad de la frontera que tanto ha abaratado la mano de obra en los USA causando niveles altos de desempleo.
No es entonces que Bush no quiera ayudar más a Fox permitiendo marginalmente el paso de ilegales hacia su país, es que no puede hacerlo más. Dice Babas Fox que los mexicanos analfabetas hacen el trabajo que ni negros quieren hacer, pero no es verdad, porque sí lo quieren hacer pero no a los sueldos irrisorios que los inmigrantes ilegales han propiciado. El cuento ése de los diputados y senadores mexicanos alegando que los USA es "país de inmigrantes" tampoco es honesto. En esencia, TODOS LOS PAÍSES SON PRODUCTO DE LA INMIGRACIÓN, pero nadie -incluyendo por supuesto a México y los USA-, está obligado a poner en peligro su existencia permitiendo la entrada masiva e ilegal de hordas de extranjeros.
Si el descontrol interno en México ha sido tolerado por gobiernos extranjeros, repito, es porque el dinero tiene que fluir hacia Israel, pero la presión de los gringos en la frontera y los rituales chinos le están dejando una bronca política fenomenal al próximo presidente mexicano, sea quien sea. La militarizada frontera norte se está atascando con mexicanos, centroamericanos y otros extranjeros que no pueden ya penetrar ilegalmente a los USA. Y México, por las razones expuestas arriba, sencillamente no tiene dinero para generar los empleos y seguridad que la población requiere. Tampoco podría el próximo presidente mexicano confiscar dinero robado a los gobernantes salientes, porque sabe perfectamente que ya se mandó todo a Israel. Y para acabarla de amolar, el nuevo presidente llegará personalmente acotado por las peticiones del meteorito rojo.
¿Qué hacer?
Ah, pues muy sencillo: Para quitarle el cascabel al tigre, el mismo que se lo puso. Pero, ¿y si no se le da la gana quitárselo? Juar, Juar.
Yo quemo una petición del meteorito rojo, mi compadre quema otra, así que ya tenemos dos, y mensualmente necesitamos solamente un oficiante más -Uno Solamente- para hacer al menos un triángulo esotérico y mantener activa la rueda de los desquites contra los enemigos de los mexicanos. Tarde o temprano, así nos tome un siglo, llegaremos al número que mantenga las peticiones del meteorito rojo en movimiento perpetuo.
Afortunadamente, al final de cada mes tenemos actualmente como cuatrocientos oficiantes en total que bajan las peticiones del meteorito rojo, más un número indeterminado a quienes esas mismas peticiones se distribuyen a través del correo electrónico por los lectores de esta columna. Es decir, ya somos un ejército de hacedores de rituales chinos. Chico o grande, pero somos un ejército invulnerable, invisible y anónimo. Los ladinos, obispos y rabinos no podrán tocarnos metafísicamente ni aunque sigan asesinando a diario niñas mexicanas para sus trabajos de magia negra contra los mexicanos nativos.
Yo pre-magnetizo personalmente cada una de las peticiones del meteorito rojo y no hay manera de que nadie las neutralice. Este temible ejército metafísico seguirá creciendo día a día. La cosa se va a poner mejor para nosotros, y peor para los chupa-sangre. Se lo garantizo yo.
Para órdenes y/o informes, comunicarse por correo electrónico a visionpf@direct.ca.
* Master, Estrategia Militar China
E-mail: visionpf@direct.ca
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