La inteligencia individual (mucha o poca) es natural, pero el grado de sabiduría en la persona depende de la calidad de sus maestros.
Abajo del nivel de sabiduría está la erudición, o alto nivel de conocimiento. Los intelectuales, por ejemplo, pueden ser eruditos, pero el conocimiento académico en general no tiene la profundidad de la sabiduría ni su alto grado de comprensión. Pueden ver a otros, pero no saben verse a sí mismos.
Un sabio es, digamos, un iluminado. Alguien que tuvo maestros excepcionales. Un intelectual o erudito no es necesariamente un sabio pues el conocimiento común se encuentra al alcance de todos en las universidades pero la sabiduría se obtiene única y directamente de hombres extraordinarios.
Adquirir sabiduría no tiene que ver con la edad, sexo o raza del estudiante. Tampoco con un país o lugar en especial. Tiene que ver con el carácter del estudiante y con la disposición del maestro a enseñarlo a el, no a su familia ni a un grupo.
Por eso cuando le digan que determinado grupo étnico es ``muy inteligente'' o que algunos son ``raza de genios'' debido a sus genes, ríase de tal imbecilidad.
Ahora bien. Desgraciadamente el sistema escolar oficial no produce en México ni intelectuales ni eruditos, mucho menos sabios. Dicen en la propaganda de Hacienda que se gastan el 95% de los ingresos nacionales en servicios sociales como la educación.
Mienten.
El sistema de educación está prácticamente desmadejado. No produce buenos estudiantes porque carece de buenos maestros y porque en este país los gobernantes ignoran el significado de la educación. Pero sobre todo, no hay presupuesto digno ni maestros dignos del nombre. Habrá sus excepciones, desde luego, pero no influyen en nada.
Los estudiantes mexicanos con medios económicos para estudiar en universidades privadas y en el extranjero (los juniors de la clase gobernante, por ejemplo) escapan a la miseria educacional local y más o menos dan el gatazo. Pero la educación pública es, de menos, un crimen contra el pueblo.
Un estudiante mexicano ``educado'' con el Texto Gratuito se compara desfavorablemente con un estudiante americano del mismo nivel. El mexicano termina se educación media capacitado para trabajar en maquiladoras (armando televisores con martillo y soldadura) mientras que el americano puede realizar labores más complejas (como lectura de planos técnicos) sin dificultad.
El mexicano que emigra a Estados Unidos sólo puede aspirar a labores manuales por la simple razón de que su preparación escolar es deficiente en extremo. Un primer ministro japonés dijo alguna vez que los mexicanos son un obstáculo para el progreso de esa nación. (Nacos, pues). Olvidó decir el zotaco ministro qué si ellos tienen cultura es por que viven cerca de China: todo lo japonés es chino, incluyendo el idioma escrito, la filosofía, la medicina tradicional, el arte, etcétera. Si no fuera por eso los chapatines anduvieran todavía colgados de la cola en los árboles.
Si los japoneses vivieran aquí en México gobernados primero por españoles y luego por sus descendientes en el PRI ellos habrían sido los ``espaldas mojadas.'' Pero en vez de dar gracias a Dios por su suerte nos critican a los mexicanos. Malagradecidos, ¿verdad?.
La desgracia de nosotros es que el magisterio mexicano sigue los lineamientos para educación trazados por priístas. Luego ambos se han confabulado para producir ciudadanos tontos, fáciles de embaucar por sus gobernantes.
Por ejemplo. Dice Zedillo qué el alza de impuestos se debe a que la caída del petróleo redujo en cuatro mil millones de dólares el ingreso nacional. Pero no menciona que en el Fobaproa se despilfarraron cincuenta y seis millones de dólares que nosotros pagaremos. Remata diciendo qué los ciudadanos nos tenemos que aguantar pues no tenemos otra opción más que pagar. Y es que Zedillo sabe que el magisterio produce borregos. Sabe que nos tragaremos esa burda mentira sin cuestionarla y sin protestar, por eso se dan el lujo hasta de regañarnos. Ojalá les dure mucho el gusto.
Los maestros mexicanos andan más ocupados en la política, en hacer demostraciones públicas como el asalto a la Cámara de Senadores para apoyar a sus líderes sindicales, ocurrido hace dias, que en enseñar bien. Ocuparon el recinto oficial y se robaron documentos históricos, aparte de la destrucción de muebles que siguió a la toma, dejando grabadas con navajas crudas muestras de grafito en paredes y mesas.
Esos criminales son los guías de la juventud mexicana en las escuelas. Y ninguno pisará la cárcel, pues han hecho bien su labor de producir tontos parea beneficio del PRI.
Así qué, repito, cuando los mexicanos emigran a los Estados Unidos arriban listos para ser maltratados. Un grupo de mujeres hispanas le preguntó a la veterana (y desabrida) actriz hollywoodense Debbie Reynolds su opinión acerca del futuro de la mujer mexicana en los Estados Unidos y ella replicó sin pensarlo mucho, ``sirvientas.''
Lo terrible de ese insulto, aparte de ser cierto, revela que la inteligencia no se hereda, pues la chapatina pudo haberlo dicho de otra manera. Así pues, la ``raza suprema'' también tiene nacolinas.
Pero las pobres mujeres insultadas no pensaron siquiera defenderse aunque sea pidiendo un boicot para las tres películas que en veinte años ha hecho la sosa actriz.
Ni sabrían como hacerlo, pues su educación no las prepara para defender sus derechos, mucho menos su dignidad. De aquí van preparadas por los maestros únicamente para ser pisoteadas física e intelectualmente por los patrones blancos. ¿No es eso un agravio contra la patria? Y si lo es, ¿cómo es qué no protestamos?
Precisamente en Estados Unidos se está librando una guerra feroz y soterrada entre dos razas por el poder militar y económico: la blanca y la amarilla.
Los orientales, con muy alto nivel de educación, les disputan abiertamente a los blancos el tradicional primer lugar de éstos en la sociedad. Por el otro lado, negros, latinos e indios nomás los ven, pues su propio grado de educación es bajísimo. Estas tres razas sólo sirven para comprar lo que los primeros dos grupos producen y para trabajar para ellos por el sueldo mínimo.
Pero, como dicen en China, ``nadie nace genio,'' ni los blancos ni los orientales son más inteligentes que los mexicanos, pero para los primeros la educación es factor promordial en sus vidas.
Americanos, japoneses y coreanos alegan que su raza es superior a los mexicanos. Pero el conocimiento y la inteligencia pueden ser incrementados con la educación y otros métodos, sin importar el color de piel de la persona, ni su origen étnico.
El concepto de que la educación puede aumentar la inteligencia humana fue hecho público por Confucio hace veinticinco siglos al decir, ``todos los hombres son creados iguales y es el conocimiento lo que separa al sabio del ignorante.''
Entonces, cuando una sociedad como la americana discrimina a los mexicanos es porque no hemos sabido ganarnos el respeto de ellos para ser tratados como iguales.
Gran parte de la culpa es del Gobierno mexicano que reprime educacionalmente a los mexicanos no blancos, pues la diferencia entre mexicanos y americanos es la educación, no la inteligencia.
Si se prestara atención a las necesidades educativas del pueblo, el de nosotros sería un país digno y fuerte. Pero no lo será nunca. Al menos no lo será mientras gobierne México el grupo étnico (blanco) en el poder.
METAFÍSICA: Los senadores priístas están para defender los intereses del partido, no los del pueblo. En relación con el robo del Fobaproa el senador Pérez Jácome dijo ``respondo plenamente por Zedillo, Ortiz y Gurría.''
¿Qué le parece? Respecto a la enorme deuda que los pillos priístas quieren cargarle al pueblo, dijo el canijo senador, ``somos un país con mucho aguante, y lo soportamos todo. Si nos robaron, que los castigue la ley si los agarra. Y si no, que los castigue Dios."
Cínico el tipo. Saben que somos aguantadores y ``lo soportamos todo'' así que somos fáciles de robar. Sólo que aquí se equivocan los priístas: de seguro la ley no los ``agarrará,'' como burlescamente anticipa el senador, pero si le podemos agarrar a él la palabra en lo del castigo divino.
Y créamelo: desde allá arriba los dioses pondrán a mano por usted a los rateros. Nomás no los suelte.
EL MITO DE LA "SOBERANÍA MEXICANA:" No contentos con reprimir militarmente al pueblo y luego esquilmarlo con impuestos vampirescos, los funcionarios han malbaratado lo poco que quedaba de soberanía en México. En este país el rango de funcionario requiere personas de cabeza hueca.
A cambio de préstamos y otra cosita, la canciller Green, el procurador Madrazo y el fiscal Salvatti dieron su anuencia para que autoridades extranjeras entrevisten con el detector de mentiras a los aspirantes a agentes federales mexicanos. Qué para que no tengan nexos con el mentado ``crimen organizado.''
Ingenuos. ¿Cómo va a tener contacto previo con grandes criminales un mexicano común y corriente? Eso pasa ya que pertenecen a los cuerpos antidrogas de élite. Quieren santos de policías, lo cual es el colmo de la imbecilidad.
Pero lo alarmante es que nuestros gobernantes autoricen tamaña barbaridad diplomática sin antes dar cuentas públicas de tal contubernio con autoridades de otro país. ¿No es eso traición a la patria?
En vez de hacer que los extranjeros vengan a servir a los mexicanos, los funcionarios mexicanos han logrado lo inaudito: qué los mexicanos sirvan a los extranjeros aquí. Y aguantamos agachados a gobernantes y extranjeros por igual.
Menos mal que el procurador Madrazo está pidiendo la pena de muerte para el delito de ``traición a la patria.'' A ver si la estrenan el mismo Madrazo y sus amigos.
COMO MÉXICO NO HAY DOS: Lo lógico sería que los encargados de la (nula) seguridad de Colosio deberían estar enjuiciados por fallar en su misión, ¿verdad?
Pues no. En este país patas pa'rriba los incapaces o traidores son premiados en forma escandalosa. Juzgue usted: Zedillo es presidente y el general Domiro acaba de ser ascendido a brigadier.
¿Qué nos querrá decir el PRI con esto?
#2. Viendo que el gobierno roba impunemente a los ciudadanos, los merolicos, digo los cineastas han presentado ante el Congreso una propuesta de ley cinematográfica.
Los canijos angelitos, en contubernio con funcionarios priístas, exigen que el público paguemos un impuesto adicional para financiar los bodrios nauseabundos qué producen los miserables.
Si Gurría roba descaradamente al pueblo con alza al precio de la gasolina injustificados y con altísimos impuestos que nunca se sabe a dónde van a acabar, se dicen los sinvergüenzas del cine, ¿porqué los cineastas no pueden gozar también del pastel?
Y los legisladores, en vez de mandarlos al diablo con una patada en el trasero, ¡están considerando la propuesta! Y es que en esa cueva de Alí Baba que es el gobierno priísta todos son pillos.
Mueren diariamente de hambre muchos mexicanos y estos villanos quieren dinero gratis de los contribuyentes para hacer porquerías de cine. ¿Por qué no pasan otra ley para que paguemos impuestos para mantenerles también a sus amantes y a sus maricones?
#3. El tenebroso Gurría (el de Hacienda) demanda que la evasión fiscal se considere como "delito grave,'' a nivel de asesinato o tráfico de drogas. Sin derecho a fianza.
Pero el verdadero delito grave y peor a los antes mencionados es el que cometen funcionarios pillos, ambiciosos y cínicos. Su labor es la que debe ser calificada como delito, como traición a la patria, y sin derecho a fianza.
Cada que se acerca el fin de su sexenio, como es el caso ahora, empiezan los funcionarios a sacar dinero de dónde sea para irse multimillonarios. De ahí el alza a la gasolina y a los impuestos. Cada seis años es la misma historia y no hacemos nada. Nos merecemos un gobierno de ladrones.
PRINCIPIO DE SALUD: El consumir estimulantes (café, cigarrillos, refrescos de cola como Pepsi y Coca, etcétera) es la causa de que el Chi en abundancia se centre alrededor del corazón al sufrir la persona cualquier sobresalto.
Los estimulantes (y el consumir bebidas y comidas frías) es lo que causa el nerviosismo que afecta a tanta gente en México y en el mundo entero.
En la medicina tradicional china se le llama Chi a la energía interna, la que da vida al ser humano. Al ``ponerse nerviosa'' la persona, sudores fríos empiezan a recorrer su cuerpo, especialmente en las palmas, y el ritmo de su corazón se excita. Esto indica que un exceso de energía interna se ha acumulado en el corazón, y la medicina occidental no tiene cura para esto.
La manera de contrarrestar el citado desajuste físico es, por supuesto, dejar de consumir estimulantes y bebidas frías. Pero por lo pronto, ante un ataque de nervios, la medicina china aconseja que en cuanto la persona sienta las palmas calientes y sudorosas, se de masajes en el centro de sus palmas para disipar el exceso de calor. Se agarra una mano con la otra y utilizando la yema del pulgar se dan masajes circulares y enérgicos en el centro de la otra, sosteniéndola firmemente. Primero una mano y luego la otra.
Simultáneamente a la estimulación de las palmas, se respira a ritmo semilento para calmar la mente. Inmediatamente la persona sentirá que el susto se pasa.
PRINCIPIO DE DINERO: Hay que tener la edad apropiada para hacer las cosas, hasta para robar.
Un ladrón de edad madura está destinado a pasar sus últimos días en la desgracia. Si no es policía y lo agarran robando lo mandarán a prisión, y cuando sea liberado ya no tendrá edad para hacer muchas cosas. De pilón tendrá encima un récord criminal.
En cambio, un ladrón joven y con experiencia madurará bien en prisión y hasta desarrollará más ``sangre fría'' para cometer actos de robo más audaces todavía cuando salga libre.
Igual que banqueros y hombres de negocios (ladrones por demás bien vestidos) los ladrones maduros no se tientan el corazón para robar más. Esto los hace capaces de grandes robos.
Por eso quienes controlan la política y la riqueza mundial son viejos, con experiencia, ricos, malvados y ladrones diplomados.
PRINCIPIO DE FISONOMÍA: El taoísmo es la doctrina de la relatividad, del Yin and Yang. Todas las cosas tienen su lado contrario.
En la fisonomía taoísta el principio del dualismo aplica igual. De manera que es aconsejable tener presente que todo tiene un lado opuesto, especialmente lo que a humanos se refiere.
Por ejemplo. Si alguien le dice a usted que el es buena persona, agárrese, probablemente es un asesino.
Si alguien le dice que es honesto, lo más seguro es que sea un ladrón de primera. Si su mejor amigo le dice que el nunca seduce a las mujeres de los amigos lo más seguro es que le va llevar serenata a la esposa de usted. Si un compañero de trabajo dice que lo va a recomendar con el patrón seguro que lo va a poner en mal. Si le piden prestado y le dicen que le pagarán al recibir la quincena, ya se lo fregaron. Y así por el estilo.
¿Ya ve usted por que no es conveniente creer en las palabras de Gurría el de Hacienda, ni en las de Zedillo el de la banda presidencial al pecho, ni en las de Mullor el de la nunciatura, ni en las de Ortiz, ni en las de la Green, etcétera?
Ahora bien. Usted es libre de creer o no en este principio. Pero si peca de crédulo lo va a pagar caro. Y no hay peor error que no aprender de las experiencias ajenas, ni de las propias.
* Master, Estrategia Militar China
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