 Ocultismo 3
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EL ESQUELETO RUMBERO EN EL CLOSET DE MARTA. Entre los numerosos esqueletos que Marta, la maligna bruja de Los Pinos, guarda celosamente en su armario de alcoba, hay uno especialmente inquieto. Cual gato en costal que se niega a estarse sosiego, el esqueleto de las fraudulentas finanzas de Vamos México va a terminar por arruinarle la vida a la ya de por si avinagrada, autoritaria y aldeana (por su mala conducta) abuelita con trasnochados deseos de ser considerada monarca.
La bravucona, manipuladora y maleducada Marta ha cometido el error de su vida al creer que todo el monte mediatico es de orégano. Es decir, (mal)acostumbrada que está a pisotear impunemente a periodiqueros (reporteros, directores, propietarios) nacionales, a la maligna bruja de Los Pinos le dio por ponerse a las patadas con un prestigiado periódico inglés, The Financial Times, al intentar convertir una entrevista de la corresponsal del diario en México, Sara Silver, en pleito personal.
Pero así se hacen las cosas en este tercermundista y fascista México ladino.
Dicen los encargados del periodismo en México que el reportaje del F.T. no dice nada nuevo sobre Marta, que los desmanes financieros en vamos México ya se habían dado a la luz en la prensa nacional. Pero no es cierto, al menos no en la misma forma.
Ciertamente ya se habían mencionado los problemas éticos y financieros, pero en forma muy aislada, en letra chiquita, en el párrafo final de las columnas, acentuando el "Dicen que en Vamos México..."
Y no es para menos, ya que la enana es capaz de cualquier barrabasada. Sabido de sobra es que a la brujilda le da por levantar el teléfono y hablar directamente con los propietarios de periódicos hostiles a la pareja presidencial, demandando el despido de reporteros y columnistas que han osado criticarla. El cementerio periodístico mexicano está plagado de tumbas con los cadáveres de prestigiadas plumas que trataron de denunciar los delitos de la segunda dama. Y luego ella llora en público lágrimas de cocodrilo y se dice "perseguida." Perseguidas son sus víctimas, quienes pierden su trabajo por decir la verdad acerca de sus desplantes monárquicos.
Cualquier medio informativo que alabe a la provinciana (en intelecto) Marta, es para ella digno exponente de la libertad de prensa. Pero todo medio que la ataque está entrando en terrenos del, según sus propias palabras, libertinaje periodístico, algo totalmente inaceptable en un Gobierno fascista al cien por ciento como el de los panistas-mochos Fox-y-Marta.
Me avergüenza que mi México produzca gachupines criollos de la ralea de Mariquita Fox y su crápula vieja.
Además, el público ese que según las encuestas (manipuladas) de Los Pinos adora a Marta no existe, pues las encuestas se hacen para producir resultados a la medida de quien las paga.
Es verdaderamente repulsivo el carácter de Marta (igual de repugnante que el de su marido Vicente), pero eso es lo que produce la educación católica en mujeres y hombres: los hace manipuladores y pediches como curas, tramposos, mentirosos, y ladrones. Al fin que dizque la confesión "lava" los crímenes. Esta mujer es el mejor ejemplo de lo que el baboso Pinocho Creel quiere hacer de los niños mexicanos al intentar imponernos la educación católica y sus "valores universales."
En la entrevista que Marta se auto-programó en Televisa para desmentir el reporte negativo a su persona en el F.T., fue fácil ver lo que Marta piensa al manipular a sus interlocutores. Por ejemplo. Al contestar cualquier pregunta a Leonardo Kourchenko, primero lo veía rápidamente a los ojos para comprobar que el sujeto estaba dócil al cien por ciento (porque así se los había ordenado el Multiplicador de Mierda Azcarraga-3 a él y a A-de-la Micha), y entonces bajaba los ojitos y contestaba con voz melosa y falsamente humilde. Pero al contestarle a A-de-la, la veía directamente a los ojos y sin quitarle la mirada iba acomodando la respuesta según semblanteaba a la conductora, quien estaba más reacia. Eso, aquí y en China, se llama manipulación, hipocresía, alevosía y ventaja.
¡Y este engendro quiere ser presidenta!
Pero más vergonzosa estuvo la entrevista que Joaquín López Dóriga le hizo el lunes nueve de febrero por Radio Fórmula. Este sujeto gachupín fue el más servil de los entrevistadores que se prestaron a que Marta dijera a su gusto mentira tras mentira acerca del reportaje del F.T. Que fea manera de ganarse la vida la de este cuate. La entrevista empezó con el entrevistador ya empinado y con los calzones en los tobillos. Así ha de estar el tamaño del sobre que le dieron, porque yo nunca le he oído una entrevista filosa con Marta. Pero, ¿qué otra conducta se puede esperar de miserables ladinos entrenados para engañar indios, si lo han hecho ininterrumpidamente durante cinco siglos y les ha salido muy bien?
Qué feo, oiga. Nunca antes ningún judío gachupín en el Gobierno mexicano había sido tan descarado en su desesperación por hacerse rico sin capital (léase robar al pueblo) en un par de años como lo están haciendo Fox-y-Marta, y hasta sus hijos.
Pero como México está en manos de conquistadores ladinos, en el Congreso senadores y diputados de todos los partidos (son los mismos ladinos) se han amafiado para evitar que haya una indagación oficial sobre el manejo de los dineros en Vamos México. Después de todo, perro (gachupín) no come perro (gachupín). Y no hay manera que el pueblo exija cuentas o castigue a estos sinvergüenzas, pues estamos en un país ocupado militarmente por los gachupas.
Y todavía se quieren reelegir los legisladores, aduciendo que "no podemos ser los eternos amateurs." ¡Hijos de puta! Lo que sí son es consumados ladrones y traidores a la patria, ¡en eso tienen hasta maestría!
Al cabo que en México "no pasa nada" si los malévolos legisladores roban a más no poder y tuercen la ley para proteger sus crímenes. Hasta aceptan que Marta podría buscar un escaño en el Senado "para protegerse con fuero de futuras indagaciones al terminar Fox su período como presidente." Esto es, aceptan los muy cabrones que en eso se ha convertido el Congreso, en fuente de fuero para que los criminales escapen a cualquier acusación por los innumerables delitos que cometen en otras áreas de Gobierno, tal como lo demuestran Pancho Barrio, Manuel Camacho Solís, Manuel Bartlett, et al.
Pero, decía, Marta se echó encima innecesariamente a la prensa sajona cuando imprudentemente gritó a los cuatro vientos que Sara Silver y el F.T. habían "mentido, calumniado y tergiversado la información financiera sobre Vamos México." Ya desde la entrevista personal con la señorita Silver la impudente Marta se le había echado encima verbalmente, como acostumbra hacer con la naquiza periodiquera nacional, espetándole que dijera si buscaba un simple reportaje "o qué."
Bendito sea dios. Para vergüenzas no ganamos. Las intenciones de todo mundo, menos las de Marta, son cuestionadas por ella bajo enfermiza sospecha de esconder motivos ulteriores.
Después, la enana trató hasta de comunicarse con el dueño del periódico inglés para poner en mal a la entrevistadora, pero para los del Reino Unido Marta es otra pinche india y ni caso le hicieron. Eso no fue suficiente para detener que la brujilda actuara como en los churros cinematográficos del payaso Juan Orol, y como espías de opereta los achichincles de Marta deslizaran información contable de Vamos México a Sara Silver...¡en sobrecitos deslizados por debajo de la puerta!
Ni en tales situaciones se atreve la tramposa gachupina a dar la cara decentemente, pues no entiende otra forma de conducta que el engaño y las chapucerías.
Ahora que, con la nada fragante boquita que tiene la brujilda, su palabras contra el periódico podrían traerle repercusiones negativas en un futuro muy cercano. Los diarios ingleses no olvidan ni perdonan fácilmente los insultos a su personal, ni a sus editores los asustan frecuentemente las esposas tramposas de presidentes de países plataneros como el que (des)gobiernan Marta-y-Fox. A ver si también les dice a ellos que "no saben con quién se están metiendo," como cuando amenaza periodiqueros nacos por acá.
El suicidio, mi amigo, el suicidio. No hay de otra. Para declarar la guerra a un periódico extranjero de postín, primero hay que saber (no solamente creer que se sabe) estrategia. Los sombrerazos guajoloteros no sirven de mucho contra enemigos fuertes.
Los ladinos nacionales se están suicidando y todavía no se han dado cuenta ni del efecto ni de la causa. Pero usted y yo sabemos que los rituales chinos van a acabar con su dinastía, aunque nadie se lo haya dicho a Marta todavía.
Y éso, mi amigo, es para destornillarse de la risa.
Juar, juar, juar.
* Master, Estrategia Militar China
E-mail: visionpf@direct.ca
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