 Col #209
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EL "SUICIDADO" ASESINADO. Resulta que le dieron un premio de periodismo al fotógrafo que captó la fatal odisea de aquél activista coreano que en Cancún se clavó un cuchillo en el pecho y murió, para consternación del público. Pero resulta que tanto los forenses mexicanos, así como como las autoridades y los periodistas que siguieron el caso son una perfecta bola de nacos, pues el coreano no se suicidó: ¡Lo mataron!
Sí, así como se lo cuento.
Porque el vivillo activista oriental solamente se medio clavó el cuchillo, lo cual no mata en minutos. Nadie sabía más bien ese principio de sentido común que el mismo coreano. Pero un baboso activista compañero del protestante, de esos que nunca faltan en la bola, procedió a "ayudar" al pseudo-suicida sacándole de sopetón el arma blanca, provocándole la hemorragia que lo mató. Ni pa'echar a perder servimos, caramba, y el muy naco se echó al plato a su cuate coreano. Imagínese la sorpresa del presunto suicida, quien no alcanzó ni a decir la versión oriental de no me chingues.
Hasta un niño de inteligencia media sabe que nunca hay que sacar el arma blanca del cuerpo de un herido, sobre todo si la herida es en el pecho o abdomen, pues la inmediata pérdida de sangre que de seguro ocurrirá le causará la muerte. Pero, quien juega con fuego corre alto riesgo de quemarse, y de seguro el ahora occiso no tenía en sus maquiavélicos planes que un dizque samaritano le hiciera el favor de sacarle el cuchillo e ipso facto lo convirtiera en "mártir" involuntario de su causa. Recordemos que el coreano ya había hecho su sangrón, digo, sangriento numerito antes en otros países y le había salido muy bien pues lo llevaban al hospital y después de una transfusión de sangre quedaba listo para su siguiente puñalada.
Pero ya sabe usted, nunca falta un pendejo que eche a perder hasta el mejor truco de magia. Quién sabe cómo se dirá en coreano bendito sea dios.
Por eso no es bueno pasarse de listo, ya que siempre hay tarugos alrededor prestos a salir con su batea de babas. Reza el principio de estrategia militar, siempre hay que esperar lo inesperado. Así que mientras el inmolado-a-güevo descansa ya en el frígido subsuelo coreano esperando la segunda o tercera venida del Mesías, un asesino, quien debería estar en la cárcel por homicidio, anda paseándose a su gusto.
Juar, juar juar.
LEGISLACIÓN CONTRA AFICIONADOS AL FÚTBOL: Pues nada, que los diputados quisieron hacernos creer que trabajan y no solamente saben robar a los mexicanos desde sus curules. Los facciosos priístas propusieron cambios al Código Penal Federal con el fin de castigar la violencia en los estadios de fútbol. Una di-puta-da tricolor, buscando fama o al menos notoriedad, sugirió multas pesadas y hasta diez años de cárcel a aficionados que alteren el orden en los estadios.
Según la legisladora, por cierto hasta ahora ilustre desconocida (but no more), somos los aficionados los únicos culpables de la violencia (la chingaduría de indios sigue viento en popa, ¿eh?). Nosotros somos quienes echamos a perder un deporte, según ella, "tan profesional y sano(?)" como es el fútbol.
Se ve que a la señora legisladora no le mencionaron sus cómplices diputados (o si se lo mencionaron fue para advertirle que con los ladinos gachupines-mexicanos no se metiera) que el pestilente estercolero que es la FMF se dedica a lavar dinero negro del narcotráfico, tosco arte que con ahínco practican allí desde dueños de equipos hasta directivos de la Federación. Por supuesto, con la complicidad y encubrimiento de los medios, especialmente de Televisa y TvAzteca.
¿Quién no sabe ya, por ejemplo, del descarado lavado de dinero que se traen en la Federación con los "sueldos" de sus empleados? ¿O de verdad se creerá la señora di-puta-da que el aquelarre de repartición de millones de dólares entre los federativos es porque el fútbol es negocio de puras ganancias?
Porque digo, nadie que tenga más de tres años de edad se creé que el televiso Ricardo Peláez de verdad ganara veinticinco mil dólares al mes cuando trabajó para la Federación, mismo sueldo que tiene el secretario general de la institución. Igual de inverosímil es que el maloliente vaginólogo y entonces árbitro mayor, Codesal, desquitara un sueldo de nueve mil quinientos dólares, similar al del secretario adjunto de la FMF, ni que el director de programación ganara ocho mil dólares al mes, ni que docenas de directivos ganaran sueldos semejantes.
Lo anterior sin contar con que Televisa le "regaló" un Mercedes Benz blindado al mero mero de la FMF, Alberto de la Torre. ¿La justificación oficial? No la sabemos, pues otro federativo, el bueno-para-nada y cínico Víctor Garcés, respondió así a preguntas de reporteros: "¿Y qué?" Pero nos imaginamos que el costoso automóvil es a cambio de la complicidad de la FMF con Televisa para que la Selección juegue innecesaria y constantemente sin preparación adecuada, produciéndole millones de dólares al Multiplicador de Mierda Azcarraga-3. Y chínguense los jugadores y la afición.
Nadie podrá olvidar tampoco la alegre y singular generosidad con que el hoy encarcelado delincuente-empresario, Carlos Ahumada, repartía millones de dólares en la FMF como si fueran confeti. El señor de las pacas evitó así que investigaran allí la procedencia del dinero que el superactivo argentino utilizaba para comprar equipos de fútbol y conciencias de directivos. También evitó que la PGR y su corrupto Procurador General, (m)Acedo de la Concha, investigaran nunca nada, a pesar de la fetidez que tales acciones provocaron.
Los dueños de equipos (como Vergara) siempre han llevado dinero sospechoso al juego.
Desde que yo tengo memoria, cada fin de torneo, a la hora de firmar contratos con sus jugadores, lloran los dueños de clubes alegando que no tienen dinero. Pero lo curioso es que a la siguiente temporada terminan invirtiendo carretadas de dólares en la compra de nuevos jugadores nacionales e importados. Un ejemplo es la UNAM. ¿Cómo le hacen, entonces? O nos mienten a los aficionados, o están lavando dinero.
Por eso es altamente sospechoso que Hacienda, que no le perdona ni un peso a cualquier contribuyente común y normal, jamás haya auditado como dios manda a la FMF. Aquí estamos hablando entonces de oscuras complicidades al más alto nivel gubernamental y futbolero.
Así es como les gusta hacer dinero a los ladinos nacionales, fácil y sin trabajar.
Concluimos irremediablemente pues que en el fútbol mexicano no se trabaja por talento, se trabaja para lavar dinero y para que se enriquezcan obscenamente unos cuantos ladinos. Es decir, business as usual.
Por eso el reciente juego USA-México lo perdieron sin siquiera pelearlo los femeputos. Se asustaron y cancelaron innecesariamente el viaje de Cuauhtémoc Blanco con la Selección, dizque por una supuesta demanda contra el jugador en Dallas. Esto es, para echar a perder solamente tienen gracia los cabrones federativos y no ven la frustración que causa en los mexicanos este tipo de derrotas. No quieren perder tiempo ni quebrarse la cabecita buscando soluciones a problemas difíciles, se limitan a fregar a otros para que a ellos les quede tiempo libre para disfrutar vinos espumantes con putas y putos que el dinero malhabido les proporciona. Eso sí lo hacen muy bien.
Por otro lado, en lugar de designar media docena de naturalizados para suplir la falta natural de talento en la Selección, los femeputos les asignan aberrante e ilegalmente un limbo futbolístico en el que ni son ciudadanos mexicanos ni son extranjeros, impidiéndoles criminalmente trabajar en lo que saben hacer. (Y quién haga caso a los imbéciles antipatriotas Hugo Sánchez y Manuel Lapuente, diciendo barbaridades debido a que están ardidos porque no tienen la Selección en sus manos, necesita un siquiatra.) Esta estupidez no solamente es ilegal al obstruir a los naturalizados su derecho de ganarse la vida y de representar al país que escogieron como su nueva patria, sino que ocurre a ciencia y paciencia del retrasado mental y secretario de Gobernación, Santiago "Pinocho" Creel.
En lugar de aprovechar el talento extranjero que nos cae del cielo, les cerramos las puertas porque supuestamente, según Hugo, Lapuente, la Nena Quirarte y los femeputos, "no son mexicanos." Hágame el cabrón favor. ¡Los jugadores ya tienen pasaporte mexicano que los hace tan ciudadanos como a usted o a mí! Pero en México, como si no lo supiéramos, basta con ser ladino para ser técnico de fútbol, federativo o secretario de Estado aunque se sea más estúpido que un chancho.
Evidentemente pues, son unos criminales en la FMF y debieran estar en la cárcel. Digo, si hubiera justicia en México y los diputados representaran verdaderamente al pueblo, aunque ya sabemos que para los gachupines somos solamente un paraíso de explotación regenteado por ellos. Por eso la di-puta-da ladina de esta historia solamente busca perseguir indios.
En el Congreso tienen tiempo para castigar a aficionados al fútbol, pero no para encarcelar a los diputados corruptos de los vídeos, pues estos delincuentes son ladinos, y ya sabemos que el credo de los marranos gachupines es que como México no hay dos. Por eso autorizarán pronto, con la Igle$ia de socia y encubridora, los casinos en el país, pues es dinero fácil, ilegal y moralmente corrupto, como les gusta a los ladinos.
Y chínguese otra vez el indio.
País de mierda este, literalmente.
Y ante la salvajada de las torcidas penas que propone la legisladora priísta, el televiso ladino Javier Alarcón pone su granito de arena y dice que las multas son superfluas, que hay que castigar a la indiada desordenada directamente con la cárcel. Gachupines hijos de puta...
Olvida decir Alarcón que los desórdenes en los estadios ocurren porque las autoridades se alían con los femeputos para que los días de juego se prohíba la venta de cerveza en las ciudades menos en los juegos de fútbol, mismos que se llevan a cabo al mediodía para que la indiada consuma más cervezas. Ya ebrios, y con estadios que cuentan con muchas gradas y pocas butacas para beneficiar los masivos movimientos de las porras financiadas por los dueños de equipos, viene el único resultado que tan criminal situación puede generar: la violencia. Esa violencia que este sujeto exige castigar con cárcel solamente. La cárcel debiera aplicar también para los ladinos de la FMF y para el M&M de Televisa, pues los menos culpables son los aficionados al ser manipulados despiadadamente por televisos, cerveceros y femefutos. Pero Alarcón solamente pide castigo para los aficionados.
Muy bien, chinguemos al indio, que al cabo de eso se trata en México, ¿no?
Ante la disyuntiva de reír o llorar ante esta escandalosa situación, mejor hay que reír a carcajadas, pero no sin antes quemar peticiones para poner a estos cabrones manipuladores en su lugar. Que aprendan a tenerles miedo a sus víctimas.
EL (NO) MEDALLÓN DE MARIQUITA FOX: Que desde Gringolandia la FAO distinguió con una medalla al presidente de México. Sería por su desastrosa política de campo que tan efectivamente ha destruido la agricultura nacional y a los campesinos (el muy ratero se embolsa cada año el presupuesto para el agro), pero que tan ricos ha hecho a Fox y latifundistas cómplices.
Afortunadamente, los diputados no llevaban mochada en el asunto de la corcholata, así que evitaron el insulto al pueblo de México negándole autorización al presidente para recibirla. Mariquita Fox, desde luego, se indignó hasta el paroxismo (se ve bien chistoso el güey cuando se enoja). Pelaba los ojotes, medio mentaba la madre a los diputados, y alegaba que el premio era "para los campesinos, no para mí ." Ajá.
O sea, la medalla era para los campesinos (todos andamos ya de mojarras en los USA), pero el que la luciría en su frac sería únicamente Mariquita Fox.
Bonita cosa. El omni-ególatra nos quiere dar más atole con el dedo. Porque si de eso se trata, entonces mejor que le den medallas a Fox y nos las colgamos nosotros, ¿no?
Juar, juar, juar.
* Master, Estrategia Militar China
E-mail: visionpf@direct.ca
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