 Col#284
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Dicen en China que Los ladrones son difíciles de detectar a simple vista porque ninguno trae letrero al pecho identificándose como tal. Por eso hasta no hace mucho, las autoridades chinas les arrancaban una oreja a los pillos reincidentes: Para que la gente se cuidara de ellos.
En México, podemos afirmar sin riesgo a equivocarnos que ser gobernante judío (no tenemos de otros) es el letrero al pecho que los denuncia como ladrones y genocidas despiadados. Tendríamos que cuando menos desorejarlos a todos ellos, pero nos pasamos de buena gente. Bendito sea dios.
Claro que ladrones regulares pueden ser hijos, hermanos, cónyuges, vecinos, amigos, sacerdotes, niños, policías, etcétera. Sin embargo, los mexicanos no sufrimos ladrones más avariciosos y dados al robo a gran escala, que los funcionarios de los tres niveles de Gobierno...y los candidatos a la Presidencia que cada fin de sexenio salen a contarnos sus mentiras.
Mentiras que por cierto ni se esmeran en pulirlas, simplemente nos las reciclan de un sexenio a otro.
Concedemos que no solamente en México se da la corrupción oficial, pues el mundo entero refleja esta debilidad de la naturaleza humana. Leí el otro día que en el país "más moral del mundo," el que marca la pauta de la decencia y exige a otros ser como él, andan investigando a varios congresistas por sinvergüenzas. ¡Si eso hacen los dioses vestidos, qué no harán los pecadores! Pero mientras en otros países encarcelan y/o ejecutan a gobernantes ladrones, en México los premiamos con la adulación y la impunidad. Para eso cuentan ellos mismos con el sucio encubrimiento de sus hermanos étnicos en la Igle$ia y los medios de (in)comunicación, especialmente en Televi$a y TvAzteca (donde así de gigantes son también las tajadas del botín que se llevan por el "favor").
Por eso los candidatos ladinos a Presidencia 2006 -AMLO, Feli-Pillo Calderón, y Madrazo- no ofrecen que encarcelarán gobernantes corruptos de la presente "administración" (sería darse solitos un tiro en el pie pues ellos también vienen a robar lo más que puedan), ni que utilizarán los altos impuestos a la gasolina para lo que realmente son: Para construir y arreglar carreteras de primera clase en lugar de robárselos. (Los otros dos candidatos a Presidencia son todavía más muertos de hambre que no merecen ni mencionarlos: la candidata judía Patricia Mercado sacó y desapareció del banco (hacia sus bolsillos) todo el dinero que le correspondía para "la campaña" en cuanto se lo depositaron a su partido, mientras la indiada muere de hambre. De Campa, qué quiere que le diga si es lacayo y borrego de La Pastora Gordillo.) Mucho menos nos prometerían los candidatos que por fin "el petróleo será nuestro" y veremos el dinero de la venta del crudo en servicios sociales y no en las cuentas de banco de los gobernantes.
Y así por el estilo le podría nombrar dos o tres mil ejemplos de cómo se roban el dinero los gobernantes con la complicidad del Congreso y la Corte Suprema...y de nosotros que lo permitimos.
De manera que los próximos funcionarios -da lo mismo si son perredistas, priístas o panistas, PUES SON LOS MISMOS LADRONES JUDÍOS- vienen inevitablemente al agrandalle. No ve esto quien no lo quiera ver, o a quien le paguen los ladinos por hacerse el ciego. Así que de pendejo nos prometería el próximo presidente lo que ni en sus peores pesadillas piensa cumplirnos al pueblo. Al fin que nadie dice nada. Porque a ver: ¿Cuánto de lo que prometió de candidato Mariquita Fox cumplió de presidente? Pues nada. (Hasta prometió adelgazar la burocracia federal, pero dio marcha atrás cuando le dijeron que cada trabajador sería un panista.)
No tenemos gobernantes sino ladrones porque el Imperio del Mal nos impone presidentes para explotar México, no para gobernarlo. ¿Quién no recuerda la avaricia de Vicente Mariquita Fox y pandilla? Apenas electo presidente, el Alacrán Güero Fox no pudo contener su avaricia y antes de tomar posesión ya gestionaba miles de millones de dólares en préstamos internacionales avalados por el petróleo nuestro... cuando todavía no tenía derecho a hacerlo, ayudado por el también criminal y entonces Parásito de Hacienda, José Ángel Gurría (a quien ahora Fox premió con el apoyo gubernamental para que le dieran al descarado ladrón la Secretaría de Estados Americanos, por eso anda tan contento "aprobando" el robo panista de divisas).
Además, Fox exigió -ilegalmente también- cientos de millones de dólares de la administración zedillista "para la transición y sueldos de colaboradores," de nuevo con la colaboración del miserable Gurría. Es decir, ¡Fox todavía no empezaba "a gobernar" -en realidad solamente a pasearse en avión con cargo a nosotros- y ya nos estaba robando! Y por si fuera poco, ni él ni la Rata Marta, ni los hijitos de ambos, ni nadie en el gabinete han parado de robarnos. Fox va por el título indiscutible de mayor ladrón gubernamental de los últimos siglos porque ni siquiera disimuló lo muerto de hambre que es, como bien lo disimulaban los priístas pues al menos esperaban a tomar posesión antes de empezar a rebanarle tajadas al pastelote.
Es hasta ahora, casi seis años después, que Mariquita Fox entiende que todos menos él estábamos mirando su avaricia desmedida. Y para tratar de tapar su mierda, como los gatos, ahora trata de embarrar al próximo presidente anunciando que habrá partida especial de varios millones de dólares para la "transición presidencial" -ahí están las reservas de divisas que todo lo pagan con factura a nosotros- y el presidente electo pueda afrontar gastos varios. Sabe que el recién llegado no podrá resistir la tentación de dinero de gratis y lo tomará, legitimando así la voracidad del judío guanajuatense de las botas. Esta táctica de involucrar a subordinados con dinero oficial es, por cierto, táctica china milenaria que los ladinos importaron de ese país a Europa hace siglos.
En la China antigua había dos tipos de involucramiento oficial: El civil, y el militar. El involucramiento civil consistía en que cuando el monarca chino se apropiaba ilegalmente de algún tesoro o propiedad, o hasta de algún país, procedía a dar su mochada a los ministros -quisieran o no, que para eso eran súbditos- para que todos callaran la boca. El involucramiento militar consistía en que cuando el monarca capturaba y ejecutaba a algún rebelde o enemigo político personal, obligaba a todos los generales y gobernadores del imperio a comer partes perfectamente cocinadas del cuerpo del ejecutado para involucrarlos en su lealtad al trono. Imagínese que alguno de los mencionados hubiera rehusado el ofrecimiento imperial haciéndole el feo a su "burrito" de machaca humana. Capaz que en ese mismo momento el emperador lo hubiera mandado a la cocina para que a él lo hicieran caldo tlalpeño.
En fin, A lo que te truje, Chencha. En estos días he leído y oído barbaridad y media acerca de por qué nadie puede componer el país, y sobre la esperanza (inútil) de que "el próximo presidente" arregle el desorden nacional. Lamento bajar de su nube a tanto "analista político" iluso -ya hay más analistas que taqueros en día de vendimia-, pero el próximo presidente "escogido" por el Imperio del Mal está concentrado no en planear poner alto al saqueo gubernamental, sino en llegar al poder y romper el récord de robos de su antecesor. Mucho menos intentaría el sujeto encarcelar a la yunta presidencial (Marta-y-Fox), o a sus ratoncitos, por los cuantiosos robos al pueblo de México.
Porque mire usted. El presidente electo, en el primer minuto en que es declarado tal, empieza a vender los mejores puesto en la administración a quien pague más. A su vez, cada "comprador" vende los puestos de sus propios subordinados también al mejor postor. Por eso no hay oficiales de carrera importantes en ninguna dependencia gubernamental. ¿Quiere ser embajador? Pues piérdale el amor a las pacas de dólares en su cochinito, al fin que recuperaría ese dinero en horas una vez instalado en su puesto. ¿Quiere ser Canciller de México? Pues Igual.
En otras palabras, no solamente el próximo presidente robará seis años a manos llenas, sino que desde el primer momento que gana la contienda electoral empieza a recibir una avalancha de dólares, pues los ladinos viven y ahorran para hacerse "de hueso." Por eso no se compone el país con solamente cambiar de partido político en Presidencia, pues la práctica de vender los puestos gubernamentales es muy jugosa y nadie va a cambiar el "sistema." Al contrario: Cambiando de partido político en Los Pinos habrá más puestos gubernamentales por vender, ya que los arreglos del anterior presidente con sus subordinados quedan inmediatamente nulificados y se multiplican "las vacantes" para quienes puedan comprarlas. ¿Cómo se va a arreglar el país con solamente "elegir," digamos, a AMLO? De tal manera que indígenas y mestizos mexicanos quedan excluidos del gobierno, pues cada plaza vale oro y los susodichos jamás podrían pagarlas pues no tienen ni en qué caerse muertos, aunque les sobre el talento profesional.
Y para colmo de la burla, nos dicen los gobernantes que no hay plazas de gobierno para no-ladinos porque "no tienen la educación nece$aria." Pero si los judíos mexicanos que son altamente educados hacen lo que hacen en el poder, dudo que los nativos mexicanos harían peor las cosas aún sin saber leer ni escribir. Los títulos universitarios, queda claro, no les han servido de nada a los gachupines ladinos por la simple razón de que ellos no llegan a gobernar, sino a robar únicamente para reponerse de lo que pagan por los huesos a roer. Si hubiera un sistema de exámenes nacionales donde los ciudadanos más talentosos accedieran al menos a puestos de gobierno intermedios, el país marcharía mejor...pero se les acabarían a los ladinos las enormes entradas de dólares por la venta de tales puestos. Imagínese qué hará el próximo presidente con esas plazas.
Como habrá lectores que dudarán de mis palabras, tomemos el caso de Jorge Castañeda, La gallina que se creyó pavo real. Yo no se cuánto pagó a Mariquita Fox por la Secretaría de Relaciones Exteriores -la cruel mentira de la contratación de head hunters para buscar talentos fue una falacia foxista digna de fusilamiento sumario-, pero para recuperar lo gastado se inventó la inútil cuanto cara "identificación consular" para que los indocumentados en Gringolandia pudieran abrir cuentas de banco. No solamente no sirvió para nada el citado fraude, sino que Castañeda encareció además los demás trámites consulares, aumentando hasta el precio del estacionamiento vehicular en los consulados en Gringolandia (que se supone debe ser gratuito para empezar), y dio carísimos contratos de construcción de embajadas, así que podemos imaginarnos el tamaño de su mochada. ¡Imagínese cuánto dinero habrá hecho Castañeda que después ya quería comprarse el puesto de presidente!
Luis Ernesto Derbez está igual. Llegó primero a la Secretaría de Comercio, y de ahí juntó dinero suficiente para comprarse la cancillería que dejó vacante Castañeda. Arribó despidiendo a todo mundo para vender esos puestos a sus amigotes que pudieron comprar esos huesos, pero capacidad en el puesto no tienen. Por eso fue que Derbez ha sido funesto -como lo fue Castañeda- para las relaciones exteriores de México. Claro, a Mariquita Fox no le importa eso mientras le paguen bien por las secretarías. Imagínese entonces cuánto pagó por la Secretaría de Hacienda el Parásito Francisco Gil Díaz. Como México no hay dos, ¿eh?
Hijos de puta.... ¿Por cuál de ellos va a votar usted el 2 de Julio?
Pero no se enoje. Ríase mejor nomás de pensar la chinga que les vamos a poner a todos ellos con las peticiones del meteorito rojo. Al igual que llegaron Fox y pandilla, la nueva horneada de ladrones gubernamentales viene hambreada de dólares, pero en lugar de recoger lana van a salir trasquilados igual que el Coca-Colo. O pregúntenle a la Rata Marta como le ha ido desde que las rituales chinos se han aposentado en su vida y la de sus hijitos. Chequemos dentro de veinte años a La maligna bruja de Los Pinos para saber exactamente lo que les depara el destino a la bola de ladrones ladinos en el Gobierno.
Juar, juar, juar.
Yo quemo una petición del meteorito rojo, mi compadre quema otra, así que ya tenemos dos, y mensualmente necesitamos solamente un oficiante más -Uno Solamente- para hacer al menos un triángulo esotérico y mantener activa la rueda de los desquites contra los enemigos de los mexicanos. Tarde o temprano, así nos tome un siglo, llegaremos al número que mantenga las peticiones del meteorito rojo en movimiento perpetuo.
Afortunadamente, al final de cada mes tenemos actualmente como cuatrocientos oficiantes en total que bajan las peticiones del meteorito rojo, más un número indeterminado a quienes esas mismas peticiones se distribuyen a través del correo electrónico por los lectores de esta columna. Es decir, ya somos un ejército de hacedores de rituales chinos. Chico o grande, pero somos un ejército invulnerable, invisible y anónimo. Los ladinos, obispos y rabinos no podrán tocarnos metafísicamente ni aunque sigan asesinando a diario niñas mexicanas para sus trabajos de magia negra contra los mexicanos nativos.
Yo pre-magnetizo personalmente cada una de las peticiones del meteorito rojo y no hay manera de que nadie las neutralice. Este temible ejército metafísico seguirá creciendo día a día. La cosa se va a poner mejor para nosotros, y peor para los chupa-sangre. Se lo garantizo yo.
Para órdenes y/o informes, comunicarse por correo electrónico a visionpf@direct.ca.
* Master, Estrategia Militar China
E-mail: visionpf@direct.ca
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