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(Ahora resulta que el "policía" molido a golpes a manos de los campesinos de Atenco y que inicialmente los amarillitas noticieros de Televi$a dieron por muerto, está más vivo que nunca y convaleciendo de la singular madriza hospedado en el muy bien equipado [con nuestro dinero] hospital militar en Los Ja-Güeyes. Porque entérese, el angelito no es cuico sino sargento del ejército. Es decir, las corporaciones policiacas estatales y federales no están solamente militarizadas: ¡Son el ejército pero con otro uniforme! Tal cosa es inconstitucional, dirá usted. Pos sí, pero aléguele al árbitro. Lamentablemente el engaño es normal en un país conquistado como el nuestro. Eso sí, en tiempos de guerra como los que corren desde hace cinco siglos en México, es práctica universal fusilar en forma sumaria [donde los agarren] a soldados enemigos con cualquier otro uniforme que el militar, y aquí los militares son probados enemigos de los civiles. Si los generaletes del H[ueco] ejército verdaderamente aprendieran algo de valor en sus inútiles colegios militares, no disfrazarían a soldados de policías. Pero la estúpida vanidad del poder, la necesidad de ascender a generales a tantos tenientes coroneles ladinos que tienen, y la avaricia de controlar un abultado presupuesto militar para hacerse más ricos, lleva a los generaletes a violar la ley militar, la ley civil, y la decencia. Se comprueba entonces en Atenco lo que he afirmado frecuentemente: Que al represor ejército, uniformado o de civil, lo tenemos infiltrado en todos los segmentos de la sociedad. No en balde el número de changos verdes que mantenemos suma al menos un millón -y me quedo corto-, con la complicidad del Criminal Congreso y de la Criminal Corte Suprema. Acuérdese que un ejército tramposo implica la necesidad de camuflar presupuestos con ayuda de los legisladores para justificar oficialmente las diferentes nóminas militares. Al fin que la Constitución únicamente les sirve a los ladinos para limpiarse con ella el culo. Lo curioso es que ahora los militares empiezan a tragarse entre ellos, pues están tan infiltrados en sindicatos, universidades públicas, y asociaciones civiles diversas, que ya no sabe la mano derecha lo que la izquierda hace. Por eso fue que el 3 de mayo las cámaras de Televi$a en Texcoco grabaron a un sujeto con toda la pinta militar (el de camisa color naranja y sombrero blanco), azuzando a los ejidatarios para golpear en el suelo al policía-soldado que mencionamos al principio. Ni modo que el provocador-azuzador no supiera que el golpeado también es militar, pero ya ve cómo son los changos verdes de obtusos al saberse totalmente impunes. Porque vamos a ver: Al día siguiente (4 de mayo) entraron los changos verdes a sangre y fuego en Atenco para arrestar a medio mundo (la gachupina Televi$a traidora al pueblo siempre proporciona a escondidas los vídeos de este tipo a las autoridades pues la ingenua gente se los deja arrimar), pero dígame, ¿en cuál cárcel está el provocador de la camisa anaranjada? ¡En ninguna! Indudablemente el miserable sujeto escapó del pueblo ya cercado comunicando la clave correcta a sus contlapaches militares, pues de seguro tenía tiempo "sembrado" en Atenco. ¿Por órdenes de quién? Del generalete Clemente Vega y de la yunta presidencial, indudablemente, con la misión de causar problemas a los lugareños, y hacer más fácil su arresto y posterior despojo de sus tierras. Ojalá y de ahora en adelante aprendan los de Atenco a desconfiar de caras nuevas en sus filas. ¿Nadie en Atenco notó que el provocador tiene una pinta y carota de militar que nomás le hace falta sacar un cuchillo y destripar niños y mujeres como en Acteal para probar su identidad de "heroico" sardo mexicano? Por el amor de dios, abran los ojos.)
En China, los adeptos taoístas -estrategas, militares, escritores, sacerdotes, filósofos, médicos, etcétera-, están conscientes desde hace siete milenios que el hombre es parte inseparable del triángulo sagrado formado por Cielo, Hombre y Tierra. ¿Qué quiere decir esto? Entre muchas otras cosas, quiere decir que como todo en el mundo -clima, árboles, animales, tierra y agua-el hombre contiene una chispa -o espíritu- de la misma energía que mueve al universo: Chi. Cuando el hombre nace, la energía Chi le da vida, movimiento y forma a su cuerpo. Cuando el hombre muere, la energía Chi regresa al universo y la forma del cuerpo se desintegra rápidamente hasta convertirse en polvo.
Podemos concluir entonces que la separación entre vida y muerte depende de algo tan sutil como el tenue soplo de energía Chi. Quien deja de respirar -por la causa que sea- muere irremediablemente. (Usted indudablemente ha oído hablar de personas "muertas" que después de enterradas "vuelven a la vida," y entonces sí mueren de verdad asfixiados en un ataúd irremediablemente sellado por la presión de la tierra encima. O sea, fueron enterradas vivas. Ésta es una situación inherente al hombre, donde la persona cae en estado de catalepsia dando la impresión de muerte, pero en realidad está en el módulo más bajo de respiración, según enseña la medicina china. El problema es que los médicos occidentales no saben diagnosticar esta enfermedad y por eso a algunos cuerpos en la morgue, supuestamente muertos de acuerdo con el forense y su certificado de defunción, les continúa creciendo la barba pues en realidad están vivos.)
La razón de la existencia de la misteriosa secta taoísta de alquimia china es precisamente proveer técnicas de longevidad a un muy reducido número de hombres en la sociedad. Técnicas taoístas diseñadas para incrementar el volumen de energía Chi presente en la persona, pero no para crearla. Pero ni siquiera emperadores pueden forzar maestros a enseñarles tales técnicas, pues se adquieren únicamente por méritos de karma. Ni siquiera el hombre más rico del mundo puede comprar los secretos de la longevidad. Pero rico o pobre, el hombre no tiene control absoluto de la forma en que morirá y, paradójicamente, cuando el hombre no quiere morir, es muy fácil que muera. En cambio, algunos suicidas sobreviven a varios intentos de quitarse la vida mientras que ciertas personas mueren inverosímilmente fácil a pesar de amar la vida. Asesinos profesionales también le dirán que no es tan fácil matar a ciertas personas.
En todo caso, el taoísmo enseña que a excepción de causas de fuerza mayor, el hombre no tiene derecho a quitar la vida a otros, derecho único del Cielo. Quienes violan este principio están condenados al desastre. Hasta los suicidas están errados, pues se matan porque han tenido una vida fácil, no difícil como ellos piensan. Agarre usted a un presunto suicida, déle garrotazos hasta que le rompa un par de huesos y quede azul de tanto morete, luego pregúntele si se quiere morir y le dirá que no. Notará usted también que las personas que trabajan en la industria de matar animales tienen mala suerte, pues la energía Chi que da vida al hombre es la misma que da vida a los animales. Y aunque como todo ser viviente el hombre tiene que matar animales para sobrevivir, una cosa es matarlos para comer y otra cosa es matarlos innecesariamente y de pilón cobrar boleto, como hace el ignorante obispo Oné$imo Cepeda montando bárbaras corridas de toros sin ningún respeto a la vida. Solamente bárbaros justifican ese horrendo espectáculo.
Entender los principios taoistas es entender la naturaleza. Es saber que la energia Chi del hombre funciona correctamente interna y externamente cuando se utilizan la medicina -alquimia china, herbolaria y acupunctura-, y tambien el esotérico arte del feng shuei -para armonizar nuestro habitat- y balancear la relacion hombre-universo lo mas perfectamente posible. De no hacerlo, se dañan salud y entorno. Alcanzar el citado objetivo no es precisamente caca de hormiga, pues cuando nuestro exterior esta fuera de balance hay que armonizarlo a la brevedad o el precio a pagar resultara demasiado alto.
Por ejemplo. Viendo documentales de eventos recientes nos horrorizamos ante el desequilibrio en la Tierra causada por actos irracionales del hombre, digamos como desastres ecológicos y genocidios militares ocurridos en la Segunda Guerra, en Vietnam, en Corea, en Irak. Igualmente, el desequilibrio económico, ecológico y militar que existe en México desde hace cinco siglos, causado por las atrocidades y explotación de los gachupines, va empeorando paulatinamente debido a nuestra incapacidad para poner alto a tan grave anomalía. Los judíos en el poder son un tumor canceroso para México, tumor que hay que extirpar para garantizar la supervivencia. Es decir, por el bien común -el verdadero, no el que cacarean los malignos obispos. Es imperativo eliminar de nuestra sociedad la presencia masiva de vaticanos, militaretes ladinos, y Gobierno gachupín. Eso es el remedio indicado para el desbalance que padecemos. Si lo hacemos o no, eso es otra historia. Pero ellos son la causa de escandalosos robos a la nación como el Fobaproa, el furtivo saqueo de divisas internacionales, y despojos a campesinos como en Atenco.
Mi opinión entonces es que, de acuerdo al principio taoísta de la Armonía de las Leyes Naturales, si lo que causa ruina y desesperación a los mexicanos no-ladinos son los conquistadores en el Gobierno, entonces hay que ajustar inteligentemente la situación para normalizarla. Al fin que con la metafísica china ni siquiera hay que usar la fuerza bruta para eliminar a los ladinos del poder y retomar el control del país para que ellos sean los subordinados a nosotros. No hay de otra sopa más que administrar nuestra riqueza en lugar de permitir que cada sexenio unas cuantas familias en México, Espanha e Israel, se hagan desmesuradamente ricas. Eso sin contar la tajada sexenal del Vaticano. ¿Le parece objetivo imposible de lograr? Ni tanto, hombre, BASTA CON CREAR NOSOTROS MISMOS UN NUEVO CAMPO DE BATALLA A NUESTRO FAVOR, NO PELEAR EN EL DEL ENEMIGO. Ya vio usted lo que les pasó a los de Atenco por dejarse arrastrar a pelear en el terreno (fuerza contra fuerza) del enemigo. La estrategia militar china advierte que tampoco basta oponer inteligencia a la fuerza del enemigo, también hay que monopolizar la iniciativa. Pero sobre todo, la estrategia debe tener tácticas ingeniosas con capacidad para sorprender al enemigo. Esto es, Hay que atacar al lobo, pero no permitir que el lobo nos ataque. Para eso, la combinación metafísica-estrategia es invencible.
Si los no-ladinos creamos un campo de batalla metafísico invisible donde la iniciativa esté siempre en nuestras manos, entonces automáticamente el brazo ejecutor del Gobierno explotador, el ejército, quedará anulado al tener nosotros el control del rumbo del conflicto. Además, este tipo de ejército metafísico es intangible, y por la tanto no es ni siquiera ilegal pues no hay legislación en ningún país con respecto a la metafísica militar. De crearla, los gobiernos tendrían que admitir la efectividad de los rituales chinos y aceptar que ellos son vulnerables. Para bien o para mal, ¡la metafísica china es suprema! De manera que para crear nuestro propio campo de batalla tenemos la mejor arma que la humanidad haya jamás inventado o que podría inventar en el futuro: Las peticiones del meteorito rojo. Porque contra los rituales chinos no hay armas de fuego, ni tanques, ni aviones de guerra que puedan con ellos. Sus efectos metafísicos en la Tierra no derraman la sangre del enemigo, pero igual lo aniquila sin que las manos del hacedor de rituales se tiñan de rojo. Son la medicina correcta para el desequilibrio político que aqueja México.
Porque mire usted: Generalmente los humanos tenemos un control de nuestras vidas bastante limitado. Control que usualmente no va más allá de vivir como queramos. Por lo mismo, hay que andar con los ojos muy abiertos para evitar que otros controlen nuestras vidas y nos exploten. El caos económico que vive el pueblo de México se debe únicamente a su explotación a manos de los judíos en el poder. Si es una situación caótica, entonces hay que armonizarla...o perecer pues es idéntica a una enfermedad: No tratarla a tiempo acaba con el enfermo.
Con la ayuda de la metafísica china es posible manipular cualquier situación en nuestro favor porque los rituales nos permiten influenciar a voluntad la energía Chi de otras personas, instituciones, corporaciones ejércitos y naciones. Podemos alterar su armonía ambiental o económica a discreción nuestra, pues no hay radares que detecten el movimiento de los rituales chinos. Y nunca perderemos la iniciativa, puesto que cada petición del meteorito rojo es magnetizada y activada por un procedimiento diferente. Eso significa que si neutralizar una sola petición llevaría al menos veinte años, para neutralizar diez una vida no es suficiente. Pero eso no es, ni por mucho, lo mejor de las peticiones. Porque una petición es como la tela de araña: No solamente cae en la trampa la persona o nación afectada, sino que queda inmóvil. La inhabilidad para moverse hacia adelante o hacia atrás, y la muerte, es lo mismo: Progreso, vida, salud y futuro quedan cancelados para siempre. Con el beneficio agregado de que también caen en la trampa sus cómplices, que usualmente resultan ser quienes menos esperamos. Por ejemplo. Tenemos una petición del meteorito rojo contra Televi$a...y socios. Socios que por supuesto no conocemos, pero que los dioses invocados sí conocen. Bueno, pues resulta que uno de los inversionistas en ese monopolio gachupín resultó ser Bill Gates. Sí, el cuate de las computadoras, el hombre más rico del mundo (o al menos lo era hasta que el güey se metió solito en los rituales chinos). Nomás imagínese entonces el número de monos importantes que caen al quemar una petición, digamos, contra un gobierno cualquiera.
Claro, para grandes proyectos se requiere algo más que los rituales básicos, pero por algo se empieza: Un viaje de mil kilómetros comienza con el primer paso. Si quemamos la (próxima) petición del Meteroito Rojo 28 no solamente sometemos a los explotadores en el poder que causaron la tragedia en Atenco, sino que demostramos con ello que ya es tiempo de darle una lección al enemigo ladino. Y eso es lo importante, el hecho de decidir por nosotros mismos cuándo y cómo enfrentar al enemigo. Pero antes de enfrentar metafísicamente a los explotadores gachupines en Atenco, estudiemos la situación militar ahí para identificarlos correctamente, pues hay muchos "héroes" ladinos navegando con bandera de redentores pero traicionando a los mexicanos.
Por ejemplo. ¿Cuándo ha visto usted que un gobierno proteja, en lugar de exterminar, a un guerrillero que le ha declarado la guerra? Nunca, ¿verdad? Al contrario, los gobiernos ejecutan guerrilleros donde los pescan. Nuestra propia historia menciona a innumerables descontentos indígenas y mestizos que han sido exterminados por el "valeroso" ejército mexicano con todo y familias. Sin embargo, el Gobierno cobija amorosamente al "zapatista" Marcos cada que le da por incursionar con diferentes pretextos por diferentes zonas del país. Autoridades federales, estatales y municipales, con el feroz ejército exterminador de malcontentos indígenas haciéndose disimulado, le hacen vallas para que pase, indudablemente por órdenes de la yunta presidencial, a quienes últimamente el enmascarado de estambre parece servir. Obviamente el ladino Marcos es operador del Gobierno, pero la ingenua indiada lo adora, y ni hablar. Nada más que el precio a pagar por el error de creer amigo al enemigo es siempre muy alto. Lo comprobamos en Atenco.
Porque no es coincidencia, según mi punto de vista, que por meses las autoridades estatales no supieran en cuáles casas vivían los dirigentes del movimiento para la defensa de la tierra, los cuales eran buscados por diversos delitos -inventados, of course- del fuero federal. Ninguno de los agentes federales y estatales infiltrados en Atenco habían logrado saber los domicilios que el Gobierno anhelaba detectar para lanzar luego a la soldadesca sobre el pueblo y desarticular el movimiento reacio a entregar sus tierras para el aeropuerto en Texcoco, arrestando a los cabecillas. Entonces sucedió algo extremadamente raro, sospechoso diría yo. El listillo guerrillero que nunca guerrea, Marcos, visitó al líder Ignacio del Valle en Atenco. Y ¡oh!, coincidencia: A las pocas horas de haber Marcos dejado Atenco, cayeron los militares sobre el pueblo con el pretexto de un policía golpeado y otros secuestrados producto de un pleitecito el día anterior entre floristas y municipales en Texcoco, azuzado por provocadores disfrazados. Los militares traían un cicerón enmascarado -pienso que era parte de la comitiva de Marcos que visitó Atenco- que iba señalando exactamente las casas donde vivían los líderes de los malcontentos. La consiguiente masacre ya es conocida por todos.
La cuestión es: ¿Por qué mientras la invasión de Atenco se llevaba a cabo, se escondió Marcos? Digo, solamente salió a decir babosadas y eso después que las autoridades habían abandonado Atenco. Entonces sí, Marcos regresó al lugar dizque para reclamar que los presos -a los que él les puso el dedo- fueran liberados. Bendito sea dios.
Dicen que la hija del líder arrestado y hundido ilegalmente en cárcel de alta seguridad, América del Valle, tiene orden de aprehensión gracias a la ambición desmedida de obispos y gobernantes a quienes se les hace agua la boca nomás de pensar en las ganancias si les roban sus tierras a los campesinos de Atenco. Pues entonces más vale que NO LE DIGAN A MARCOS -NI A TELEVI$A- DÓNDE SE OCULTA LA MUCHACHA, DE OTRA MANERA SE VERÁ RODEADA DE MILITARES EN CUESTIÓN DE HORAS. La cara de América del Valle es la cara de una mujer mestiza con más güevos que Marcos, pero perseguida por defender su tierra mientras el traidor enmascarado no corre ese peligro porque es ladino al servicio de la Rata Marta y Mariquita Fox. Él, criminal declarado, se pasea por los pasillos de Televi$a. Ella, perteneciente a la clase conquistada, tiene que andar a salto de mata por el "delito" de plantar la cara a gobernantes judíos ladrones.
Esa es la situación militar en Atenco. Ignorarla es un error, y más vale que AMLO -de quien por cierto vi un extrañó presagio que apunta a que será el próximo presidente de México-, utilice su cerebro y libere a los ejidatarios detenidos en cuanto asuma la Presidencia. Sería lo mejor que pudiera hacer para congraciarse con "los jodidos." Así de fácil.
DE MUJERES CON BIGOTE: Sin duda usted ya habrá oído que en Inglaterra tienen un chiste en el que un curioso le pregunta a otro por qué los espanholes usan bigote, y él responde: Para parecerse a su mamá.
Bueno, pues un judío italiano que dizque es cantante y ha vivido varios años en México, decidió cambiar la geografía del chiste y endilgárnoslo a nosotros. Qué gracioso. Al hijo de puta nomás nosotros le gustamos para embarrarnos. Desde luego, siendo judío, indudablemente se refería a sus hermanas étnicas aquí cuando hace días dijo en un programa de televisión en Italia, que las mujeres mexicanas (es decir, ladinas) no incitan a enamorarse de ellas porque tienen bigotes y que la única (judía) mexicana atractiva es Salma Hayeck. La puntada fue similar a la de un cantante espanhol que vino no hace muchos años a decirnos que las mujeres aquí son feas y que solamente se salvan las edecanes judías en Televi$a. ¡No sabía el güey que la población aquí es mayoritariamente indígena y mestiza a los cuales las espanholas, el modelo de belleza del cantante, solamente nos causan náuseas! Sin embargo, se le perdona el insulto al gachupín pues las escuelas en Espanha producen estúpidos que piensan que América es India, y que México está en Centroamérica. ¿Pero cuál es la excusa del italiano?
Porque digo, se necesita estar ciego para no ver que Salma Hayek utiliza rastrillo dos o tres veces al día, so pena de por ahí de las seis de la tarde parecer hombre lobo, digamos copia exacta del horripilante senador Diego Fernández de Cevallos.
Además, eso de que un judío hable mal de las judías es una idea riesgosa. Porque resulta que hace ya como tres décadas, el actor judío gringo Marlon Brando fue a filmar una película en Italia con La Magnani, actriz judía italiana muy famosa en esos días. Pero después de varias tomas de una escena romántica entre los dos actores, el director nomás no entendía por qué la cara de Marlon se agriaba en el momento de intentar besar a la actriz. Al principio el director lo atribuyó al hecho de que Brando era maricón, pero también era excelente actor, así que besar una mujer no podría ser el problema. De manera que suspendió la filmación y llamó aparte al actor para preguntarle cuál era la dificultad. Y Brando muy asqueado respondio: ¡Es que ella tiene pelos en la nariz!
Y era italiana. Imagínese el bigotazo.
Yo quemo una petición del meteorito rojo, mi compadre quema otra, así que ya tenemos dos, y mensualmente necesitamos solamente un oficiante más -Uno Solamente- para hacer al menos un triángulo esotérico y mantener activa la rueda de los desquites contra los enemigos de los mexicanos. Tarde o temprano, así nos tome un siglo, llegaremos al número que mantenga las peticiones del meteorito rojo en movimiento perpetuo.
Afortunadamente, al final de cada mes tenemos actualmente como cuatrocientos oficiantes en total que bajan las peticiones del meteorito rojo, más un número indeterminado a quienes esas mismas peticiones se distribuyen a través del correo electrónico por los lectores de esta columna. Es decir, ya somos un ejército de hacedores de rituales chinos. Chico o grande, pero somos un ejército invulnerable, invisible y anónimo. Los ladinos, obispos y rabinos no podrán tocarnos metafísicamente ni aunque sigan asesinando a diario niñas mexicanas para sus trabajos de magia negra contra los mexicanos nativos.
Yo pre-magnetizo personalmente cada una de las peticiones del meteorito rojo y no hay manera de que nadie las neutralice. Este temible ejército metafísico seguirá creciendo día a día. La cosa se va a poner mejor para nosotros, y peor para los chupa-sangre. Se lo garantizo yo.
Para órdenes y/o informes, comunicarse por correo electrónico a visionpf@direct.ca.
* Master, Estrategia Militar China
E-mail: visionpf@direct.ca
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