Reflejos en un Espejo Chino

* Francisco J. Vargas

Columna #232: El Vuelo Del Águila

Dice la estrategia china: "No es fácil penetrar una defensa sólida." Por eso las fortalezas son diseñadas primordialmente para evitar ser tomadas por asalto.

En el mundo de la violencia armada organizada, saber defender es preferible a saber solamente atacar. Cualquiera ataca, pero pocos saben los principios militares de vencer defendiendo. Aún así, por más sólidas que sean las fortalezas, el águila solitaria las sobrevuela sin ningún problema. Por esa razón en la escuela de estrategia militar Meteorito Rojo el emblema del estratega chino es el águila imperial.

Y es que el campo de batalla no es lugar para aplicar planes militares diseñados por aficionados ni por "intelectuales" que de repente se sueñen Napoleones. Observe el actual embrollo militar en Irak, donde funcionarios civiles diseñaron, según ellos, una victoria militar fulminante y solamente se empantanaron por las próximas décadas. Y tan campantes, pues no hay consecuencias penales para sus errores y además quienes mueren en el frente son siempre otros. Pero en países como China, donde realmente entienden del arte de la guerra, el estratega que falla garrafalmente en la elaboración de los planes adecuados es estratega que pierde la vida. Por eso China es tan temible en cuestiones militares. Ganar y perder países por medio de las armas no es ocupación para principiantes ni para soñadores. En este negocio hay que saber de lo que se habla, y hablar de lo que se sabe.

Claro. En términos generales, para un estratega capaz los conflictos entre personas, corporaciones o países son el pan de cada día. Aún los rompecabezas difíciles son relativamente fáciles de resolver con principios de alta estrategia y una buena dosis de concentración. Eso es bien sabido en el mundo entero.

Menos sabido es que la estrategia militar china es el epítome de la excelencia porque no solamente resuelve problemas inmediatos, sino los previene antes de que ocurran. Es decir, es el antídoto perfecto contra adversarios omni-poderosos, pues torna una situación desventajosa en victoria (el clásico cambiazo del chirrión por el palito). Porque a veces es necesario recurrir a lo que los "intelectuales" consideran superstición: La metafísica china.

Después de todo, dicen los que saben, En la guerra todo se vale. También dicen: Cuando intenten dañarte o matarte, asegúrate que sea lo último que tus enemigos hagan. Todas las escuelas de estrategia militar china cuentan con principios de metafísica taoísta o budista para penetrar al meollo de todas las situaciones.

Así que cuando los elementos estratégicos y económicos son irritantemente complejos, cuando el balance entre derrotas y victorias es peligrosamente negativo, cuando no hay margen para errores, es el momento de aplicar la estrategia esotérica-militar. Este método incluye la adivinación, la comunicación secreta con espíritus de estrategas militares ya fallecidos, y el control sobre diversas fuerzas militares invisibles.

Por ejemplo. El ritual "conversaciones con los ancestros," descrito en la página 65 de mi libro Ocultismo Chino, permite al oficiante obtener información sobre batallas futuras, y al predecir acertadamente las consecuencias para ganadores y perdedores, podrá manipular correctamente fuerzas militares visibles e invisibles a través de peticiones como las del meteorito rojo.

Porque en todas partes las guerras civiles empiezan más o menos igual: En respuesta a gobiernos represivos y explotadores, pequeños grupos de malcontentos se rebelan espontáneamente contra sus verdugos e intentan derrocarlos sin más armas que su indignación ante la miseria y la marginación social y económica. Pero si no utilizan la inteligencia contra la fuerza por medio de rituales para ajustar la disparidad de fuerzas sin confrontaciones físicas, sus posibilidades de éxito son nulas. Solamente sufrirán y no lograrán más que arruinar sus vidas y las de los suyos.

Sin embargo, para enfrentar todo tipo de explotadores están las peticiones del meteorito rojo. Por eso reza un principio chino de estrategia: Utiliza tu cerebro primero.

PREGUNTAS Y RESPUESTAS: Pregunta un lector si debido a mis críticas escritas no temo represalias violentas de parte de Iglesia y Gobierno, instituciones tradicionalmente con poco sentido del humor en cuanto a comentarios negativos sobre su honestidad y conducta pública se refiere.

RESPUESTA: Cierto. Muchos funcionarios y curas criminales son intolerantes por naturaleza. Lo cual es, a mi juicio, normal, pues a ningún bicho oculto bajo piedras le gusta que le echen la luz encima. O sea, a ningún pato le gustan los escopetazos. Aparentemente por eso han mordido el polvo en forma por demás indeseable algunos críticos.

Más sin embargo las apariencias suelen ser sumamente engañosas. Porque las críticas a instituciones públicas no son motivos suficientes para asesinar a nadie. A pesar de lo que mucha gente creé, criticar ni mata ni es motivo para morir.

Además, el periódico con las críticas de hoy sirve, dicen los gringos, para envolver mañana el pescado en los mercados. Son pues inútiles las críticas. Y las críticas habladas en los medios electrónicos duran mucho menos, pues a las palabras se las lleva el viento.

No tienen entonces por qué tomar las críticas a pecho los charros negros (curas jineteadores de tarugos), gobernantes y políticos, pues no son infección de Sida. Sobre todo si tomamos en cuenta que los medios están en manos de ladinos, lo cual quiere decir que la crítica es hecha por ladinos contra sus hermanos ladinos.

Por ejemplo. Las críticas contra los espanholes en periódicos mexicanos nunca han causado más daño a curas y gobernantes que tocarlos con el escándalo. Y de escándalo, al menos en México, nadie se muere ni pierde su puesto pues los judíos mexicanos son genocidas pero también son desvergonzados. Es más, ningún periódico mexicano ha sido capaz de derrumbar un sólo gobierno con denuncias, mucho menos con críticas.

Los críticos que son asesinados lo son por razones personales entre víctimas y victimarios. Es decir, los victimados por alguna razón u otra rehusaron mantener silencio en algo acordado de antemano, o de plano atacaron a gente que les caía mal a nivel personal, no a nivel profesional. Esas muertes son más bien venganzas, no represalias.

Lo que de verdad daña a funcionarios corruptos, a políticos venales y a curas depravados son los rituales chinos del calibre de la peticiones del meteorito rojo. Estos rituales no son críticas ni tampoco denuncias, son literalmente condenas metafísicas. Estas peticiones militares no quedan muertas para envolver pescado al día siguiente, ni se las lleva el viento: Se van directamente al más allá para exigir acción de los dioses contra gente maligna en este mundo.

Y que los quejosos maten a los dioses si no les parece que la gente los denuncie ante los tribunales celestiales.

PERMANENTE: Aunque frecuentemente me preguntan los lectores acerca de la posibilidad de que yo ejecute rituales para ellos, mi contestación es siempre la misma: Con los rituales descritos en el libro Ocultismo Chino, la persona puede hacer por sí misma mejores trabajos esotéricos que los de cualquier cardenal o chamán profesional, y sin necesidad de divulgarle secretos íntimos a extraños. En cambio, el lector puede obtener de mi parte algo todavía más valioso y secreto: A falta de mejor nombre le llamaremos a este objeto "caja negra." Su función es buscar el punto metafísico más favorable que garantice a la persona, y a toda su familia viviendo bajo el mismo techo, no solamente lo mejor del presente, sino del futuro. Sin importar a qué se dedica la persona, el objeto ayuda al propietario a convertirse en el tronco generacional que sostendrá metafísicamente a la familia de allí en adelante para que se afiance en el presente y en generaciones posteriores, manteniendo hijos, nietos y bisnietos la buena suerte y el poder esotérico adquirido inicialmente. Así se evitan fácilmente fracasos y encarcelamientos futuros en la familia (o se logran liberaciones en el presente), calumnias, pobreza, mala salud, mediocridad... Aunque claro, żcuánto vale tan preciado objeto, lo mejor del arte metafísico, que otorga tanta ventura a tantas vidas? Si usted tiene que preguntarse qué precio tiene la "caja," es que no puede costearse el precio para adquirirla. Para mayor información al respecto basta mandarme un e-mail (visionpf@direct.ca).

PERMANENTE 2: Debido a la inquietud de algunos lectores de diversas nacionalidades por obtener el libro Ocultismo Chino pero que por diversas causas no pueden comprarlo por Internet, Vision Press Films pone este libro a disposición de librerías de cualquier país interesadas en venderlo directamente a sus clientes.

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* Master, Estrategia Militar China

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